Kenway? Cap 17

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Eva: S-Shay Cormac!?- se levantó asustada de la mesa donde Jacob y Ezio se levantaron protegiendo a Eva poniéndose enfrente de ella, sabían las intenciones de Shay con Eva y solo la utilizaría para hacerse con el poder en los templarios y si llegase a pasar eso los asesinos podrían estar condenados por el resto de sus vidas.

Shay: vine a llevarme a esa mocosa para obtener el poder y condenarlos a ustedes!!- dijo frío y demandante, Ezio y Jacob protegieron más a Eva pensando en donde rayos estaría Edward

Jacob: no dejaremos que te la lleves!- dijo Jacob tirándose hacia el para atacarlo pero en un dos por tres Jacob yacía en el suelo con una enorme herida en su abdomen, estaba inconsciente

Ezio: c-como hiciste eso!?- preguntó el asustado mientras hacía que Eva se pusiese detrás de él, los dos retrocedieron pero Arno se puso en el puesto donde antes estaba Jacob protegiendo a la nieta de Edward que ahora corría peligro de ser llevada a la fuerza por Shay- no dejaré que te la lleves y si debo morir entonces lo haré!

Shay: si eso es lo que deseas- sonrió con malicia sacando un machete que en un abrir y cerrar de ojos estaba clavado en el vientre de Ezio, matándolo poco a poco, Arno solo abrió la puerta trasera y detuvo como pudo a Shay mientras Eva salía corriendo al bosque a buscar a Edward donde fuera que este pero no pudo correr mucho ya que Shay la atrapó- al fin estás en mis manos!

Eva: ABUELO AYÚDAME- gritó para que le escuchase pero no recibió respuesta alguna y Shay solo se quejó con ella

Shay: Edward no te salvará esta vez, ahora eres una templaría

Eva: prefiero morirme antes de ser una templaría otra vez!!- se quejó ella mientras se retorcía, gritó otra vez que se abuelo la ayudase pero nada pasó, Shay la noqueó y enseguida salió corriendo de la posada dejando a los asesinos desangrandose dentro de la casa, Eva estaba rogando por sus adentros de que ellos sobrevivan.

Horas después

Eva se había despertado exaltada, estaba en un cuarto blanco con paredes cafés que le daban un toque de vejez al cuarto que que a ella no le gustaba en lo absoluto, sus ropajes eran unos ropajes negros con rojo típico de templarios, se vio las muñecas y tenía unos brazaletes gruesos en estas donde ella en un movimiento de dedos activo unas hojas ocultas pequeñas pero mortales, estaba definitivamente en un castillo templario que de seguro habría sido Cormac el que la trajo aquí.

Eva: espera al día de tu muerte Cormac- murmuró ella con cierto rabia y miedo, sabía que muy pocos podían con Shay al ser muy fuerte y estar perfectamente entrenado de cerebro a manos

Shay: el día en que vea que eso pase te castigo, Kenway- sonrió con malicia ya que por fin había logrado su cometido, traerse una legítima Kenway al castillo templario para así obtener el mando de todo y ser subido de rango a un templario guía/líder/ Jefe que por fin podría hacer lo que le plazca con sus sirvientes- de ahora en adelante serás mi rehén y harás lo que te pida, ¿entendido?

Eva: jamás obedeceré a alguien como tú- no se había fijado en que los ropajes que el llevaba puestos eran los mismos que llevaba Shay aunque poco le interesaba eso ahora, se levantó de la cama y se acercó a él con un rostro serio y enfadado que exigía su libertad a gritos aunque Shay jamás la cumplirá, era obvio que intentar encarar a ese hombre con la estatura que ella poseía sería imposible y menos cuando ese hombre no le teme a absolutamente nada

Shay:- posa rápidamente su mano izquierda en el cuello de la menor levantándola del suelo poco a poco, ahorcándola- si piensas que te dejaré ir solo por intentar encararme estás muy equivocada, jamás te dejaré ir JAMAS, y si veo que no estás te juro por mi vida que asesinare a cada uno de esos malditos asesinos que tú amas, ¡¿quedó claro?!- Eva asintio con miedo, ahora si estaría condenada a vivir el resto de sus días en ese maldito castillo templario, quería está con su abuelo, deseaba estar con su abuelo y sentir el calor paternal que el le ofrecía al abrazarlo pero ahora estaba lejos de él y cuando más lo necesito nunca no apareció- suerte sobreviviendo, mocosa- la soltó bruscamente dejándola tirada en el suelo mientras está se levantaba con dificultad del suelo, respirando agitada.

Pero no iba a cometer el mismo error de nuevo, iba a esperarlo hasta el fin de los tiempos, sabía que el no se iba a rendir a rescatarla para volver a estar cerca de ella otra vez y esta vez se encargaría completamente de Shay para que nada ni nadie los vuelva a separar

Eva: sé que vendrás Edward, lo sé- dijo ella mirando la luna desde la ventana que se reflejaba en sus claros ojos como el Mar Caribe que siempre andaba con ese distintivo color azul que le hacía destacar del resto de los mares o eso pensaba ella, cada vez que veía a Edward le recordaba al Mar Caribe, sus ojos azules siempre brillaban con un resplandor especial mientras su actitud a veces era fiero como la tempestad y calmado como los aguas en la noche más bella- te esperaré a Edward- se le saltaron las lágrimas de un momento a otro, por cuarta vez estaba lejos de su abuelo, ¿cuantas veces tenía el destino que separarlos para poder hacerla sufrir por completo? O ¿que será lo que querrá verdaderamente el destino al tener a Edward y Eva separados? Por qué jamás podían estar juntos!.

Después de 3 meses

Las cosas habían cambiado demasiado, Eva fue obligada a convertirse en templaría por el nuevo "Jefe Templario" que no era nada más que Shay Cormac la cual la obligó a informar el pergamino del permiso superior de que una Kenway había decretado oficialmente que Cormac, el aprendiz maestro de Haytham, había subido de rango a ser el jefe de todos los templarios, cosa que ella jamás habría dicho pero por obligación, tuvo que hacerlo.

Eva: Edward...- susurró en un hilo de voz aunque lágrimas ya no poseía para derramar en sus lamentos, Edward había desapareció o eso parecía ya que en tres meses ella nunca supo nada de él, le envió cartas que jamás fueron correspondidas y palomas mensajeras que se terminaban devolviendo a ella con la carta que debía haber llegado a su abuelo.

Perdió toda esperanza de que el fuera a rescatarla, de seguro se emborrachó yéndose con una mujer cualquiera a pasar el rato, olvidando de un momento a otro que poseía una nieta la cual había querido y protegido desde que se conocieron mejor.

Shay: desde hace días sé que perdiste las esperanzas de que tu famoso abuelo te venga a rescatar- dijo entrando al cuarto de la menor que se quedó cabeza baja mirando el mango de la ventana- pero ahora eres una templaría, tu objetivo es matar a los asesinos, eres una cazadora- el sonido del metal siendo deslizado sonó en el cuarto, Eva con miedo volteo pensando que le iba a mata pero en vez de eso saco de su espalda una pequeña escopeta igual a la de Shay que no estaba recargada

Shay: cumple con el deber que el destino escribió para ti

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