Había vuelto de los estudios a las 2 am. En los últimos 2 meses habíamos terminado de hacer la 3 era temporada y solo necesitaban la musica y editar los episodios.
Tuve un beso con Ed, no hay mucho que contar, solo que nuestros labios se unieron y se tocaron, pero nada más. No sentía nada más que la sensación de estár besando a mi hermano. ._.
Por suerte solo tuvimos que repetirla 2 veces.
Carter me contó que al fin había tenido "Relaciones Sexuales" con Laura. Y que su primera vez estuvo bien, me alegré al oir eso. Y luego vino a mi casa para hablar con Ross sobre "Segundas, terceras y cuartas veces".
Hasta creo que se expresaba mejor.
Y ahora me encontraba aquí, orgullosa de mí misma luego de haber grabado por casi 5 horas seguidas.
Tenía sed, mucha sed.
Me levanté de mi cama y caminé hasta la cocina, donde me cogí una botella de agua y me la llevé a la cama.
Miré la hora y esta marcaba las 5 am. Traté de distraerme con juegos en mi teléfono pero no resulto.
-¿Estás bien?- la voz de Ross sonaba adormilada. Me sentí culpable por haberlo llamado y despertado a las 5 am.
-Si.
-¿Porque me llamas a las...- hizo una pausa para mirar la hora-...5 am?
-Porque estoy despierta y ya no puedo dormir.
-¿Quieres que te cante una canción?
-No.- respondí.- ¿En cuanto tiempo te vestirías?
-¿Qué?
-Voy para allá.
Traía a Ross a mi casa en mi auto, se había quedado dormido mientras regresabamos y tenía la cara pegada a la ventana que se encontraba junto a él.
El cielo empezaba a despejarce mientras que yo conducía, las luces de la ciudad empezaban a prenderce y la temperatura se hacía más caliente.
Tuve que despertar a Ross cuando llegamos. Él subió casi dormido las escalera y tropezó en la última.
-¡Mierda!- exclamó.
Ambos nos lanzamos a la cama y tratamos de dormir. Sentí el calor de Ross tan cerca al mio que no tardé mucho quedarme dormida.
...
La siguiente mañana fue igual, había vuelto de nuevo de las estudios a las 2, y estaba tan cansada como el día anterior. Creí que me había despertado la sed, pero luego de unos segundos me dí cuenta de que él sonidos de mi teléfono fue el que interrumpió mi profundo sueño.
Estiré mi brazo y cogí mi teléfono, Stormie me estaba llamando. ¿A las 3am?
Contesté algo confundida.
-¿Hola?
Solo se escuchaban sollozos del otro lado de la línea.
-¿Hola?- repertí con el tono de voz más alto.
-_______.- la voz de Riker sonaba agustiada. Me senté de inmeadiato, Riker no sonaba así...nunca.
-¿Pasa algo?- pregunté. Sabía que pasaba algo, pero no sabía que.
-Ross...- dejó de hablar. Se me aceleró en corazón.
-¿Qué ha pasado Riker?- mi voz sonó mucho más aguda de lo que esperé.
-Se le cortó la respiración mientras dormía.- explicó.- Ryland nos avisó y llamamos a los doctores. Ellos están acá examinandolo, tiene cables en la nariz. No puede respirar.
No sé que fue lo que pasó después. Solo recuerdo que me puse los primeros pantalones que encontré y la primera camiseta que logre alcanzar, y que luego llegaba en mi auto al hospital en el que Ross estaba internado.
Cuando llegué una enfermera se que acercó, me dijo si podía ayudarme. Le dije que solo buscaba a un paciente y me llevó a una sala blanca con un mostrador y muchos asientos.
-Tome asiento señorita Red.- me indicó la enfermera y luego se retiró. No me importó saber como esque ella conocía mi apellido. Solo quería verlo...ya.
Me senté pero eso me puso más nerviosa, cerré los ojos y me dije a mi misma que todo estaría bien.
Cuando los abrí me fijé en mi entorno. Habían como 15 personas en la misma sala, algunas durmiendo, otras leían algo, otras tenían la mirada perdida y otras miraban fijamente a la puerta, como si todo lo que esperan puedier salir de allí.
En la casa que quedaba al frente todos deberían estár durmiendo comodamente, sin preocupaciones. Muchas personas están descanzando, sin enterarce de que alguien en este momento está sufriendo. Sin saber que Ross no podía respirar, sin saber que en una sola habitación hay 15 personas esperando respuestas, 16 si me incluyo, y que cada segundo se nos hace eterno.
Me levanté y me dirigí hacia el mostrador, en la que una joven enfermera con aspecto toscó jugaba en su teléfono.
-Disculpe, ¿Porque tardan tanto?
Levantó sus ojos negros hacia mí y me examinó el rostro.
Se limitó a fruncir los hombros y volvió a sumercirce a su telèfono.
-Disculpe.- me aclaré la garganta.- He llegado hace un rato y aún no veo a mi paciente.
No levantó la mirada de su pantalla. Empezaba a molestarme.
-¡Disculpeme pero le estoy hablando!.- grité.
-Señorita baje la voz.- respondió con tono arrogante.
-Estoy pidiendole una respuesta.- insistí.
-Resulta que yo no puedo darle todo lo que usted pide.-me dijo.- Busquese a un asistente personas para eso.
-¡No llamara a mi asistente personal para que me responda algo que usted debe saber!
Ya no controlaba el tono de mi voz, y estaba conciente de que muchas personas se habían despertado y ahora tenían la mirada clavada en mí.
-¿Que esta pasando aquí?.- una enfermera de piel morena nos interrumpió.
-La señorita está montando un enorme escándalo solo porque quiere ver a a alguien.- se adelanto la enfermera del teléfono.
Me volteé hacia ella con toda la furia casi saliendose de mí.
-¡Mi novio está allí adentro sin poder respirar!- dije señalando la puerta.-¿No lo entiende? ¡El amor de mí vida está allí esperandome!
La enfermera del teléfono se quedo callada cuando la enfermera numero 3 me tomó por el brazo y me llevó hasta el elevador.
-¿Su apellido?- preguntó presionando el botón.
- Lynch.- respondí al instante. Entré cuando las puertas se abrieron.
-Piso número 3 señorita Lynch.- me dijo.- ¿Me daría su nombre?
-_______.
-Muy bien señorita Lynch.- escribió algo en un papel, luego lo despegó y me dio una cinta que decía "_______ Lynch - Visitante"
Las puertas se cerraron, haciendo que el silencio reinara y que mi angustia creciera.
