Camaleón

Capítulo X

La puerta del departamento está abierta, son las 8:14pm. Sergio está en la vereda, con una bolsa negra. Se acerca alguien y él se coloca fuera del alcance del alumbrado público.

Daniela. ¿Hola? ¡Sergio!

Sergio. Hola. ¿Qué hacés por acá?

Daniela. Traje algo... vos, ¿qué hacés afuera?

Sergio. Tiro la basura a esta hora, así mis vecinos no me ven.

Daniela. Te traje unas dosis del antídoto, ya que no te gusta tu apariencia. Vamos adentro. ¿Qué estabas haciendo?

Sergio. Ejercicio... como todas las noches.

Daniela. Bien, mucho tiempo en la cama del laboratorio no es bueno.

Sergio. Tal vez, puede ser, pero siempre hice ejercicios en casa.

Daniela. ¡Oh bien! Yo te traje algo en lo que estoy trabajando en el laboratorio, González me dijo que lo haga.

Sergio. Y es... ¿qué es?

Daniela. Ropa que hace lo que vos hacés...

Sergio. ¿Cambia de color cuando yo cambio de color?

Daniela. No sólo cambias de color, vos también cambias de materia, es decir, tocas unos ladrillos y sos unos ladrillos.

Sergio. Sí, lo sé. ¿Esta tela también lo hace?

Daniela. Bueno, no hay otra persona como vos, así que vine a probarlo. ¿Querés probártelo? ¡Por favor!

Sergio. SÍ, entremos.

Daniela. Tomá, adentro de la bolsa está la ropa.

Daniela. ¿Ves? Érika me dijo que te quedaría bien. Ponete en la pared y tratá de que yo no te vea.

Sergio. ¿Así?

Daniela. Sí.

Sergio. ¿Desaparecí?

Daniela. No.

Sergio. ¿Qué hago?

Daniela. Concentrate y creé que te ves como la pared. ¿Qué sé yo?

Sergio. ¿Y ahora?

Daniela. Bien, ya no te veo. Y tampoco tu ropa nueva.

Sergio. Perfecto.

Daniela. ¿Es cómodo? ¿Alguna molestia?

Sergio. No, no siento ninguna. ¿Cómo lo hiciste tan rápido?

Daniela. Se podría decir que yo terminé el trabajo, esta investigación ya estaba hecha, la encontré en los anteriores estudios sobre pruebas con la SC. González no es el primero en trabajar esto. Así como nosotras somos sus ayudantes él era un ayudante.

Sergio. Interesante.

Daniela. ¿A qué se debe el traje?, ¿Me van a exponer en un tipo de feria de ciencias o algo así?

Daniela. No, exponerte no. Creeme que no, por lo que escuche vas a ser un saboteador, repito, por lo que escuché.

Sergio. Interesante.

Daniela. Fuiste elegido hace bastante, pero al irte de Buenos Aires no podían hacer nada con vos porque estabas con tu abuela, y esto es secreto. Ya el jefe de González te tenía en la lista.

Sergio. ¿Quién es el jefe de González? O era...

Daniela. No sé, cuando yo entré ya no estaba. Y como te dije, es secreto, y saber eso no influye en mi trabajo.

Sergio. ¿Por ser un tipo que andaba en bandas robando mercados y quioscos?

Daniela. No sé, ya te dije, no manejo esas cosas y tampoco sé quiénes lo hacen.

Sergio. No me gusta que me oculten tantas cosas. Yo pensaba que iba a ser un asunto legal y oficial, para ganar algún premio importante en el rubro de los científicos. Pero, ¿qué puedo hacer?

Daniela. Por ahora quitate esa ropa, y me voy a casa que mamá me espera.

Sergio. Ya me la saco.

Daniela. Gracias.

Sergio. ¿Cuándo podré salir a pasear, salir a correr, caminar o comer?

Daniela. No sé. Pero quedate tranquilo que, entre nosotros, lo haremos sin consentimiento.

Sergio. Mmm como digas.

Daniela. Listo. Ahora andá a dormir. Mañana comienzo el día acá, haciendo tus estudios, esta vez uno de verdad. No te podés escapar sin saber todo lo de tu cuerpo, tu metabolismo.

Sergio. No dije que me escaparía.

Daniela. Pero eso es lo que estás pensando con tantas preguntas que me hacés. Bien, me voy. Ya sé que no te vas a escapar por hoy.

Sergio. Pero antes saludame. [La besa apasionadamente y Daniela le corresponde].

Daniela. Bueno Sergio. Mamá está desde la tarde en casa, me está esperando.
Buenas noches Camaleón.

Sergio. ¡Qué tengas linda cena y puedas descansar!

Daniela. Nos vemos Sergio.

Sergio. Chau Dani.