No tengo fuerza para continuar, mis brazos están adormecidos, mis lágrimas ahora saben a sal. Sabia que entrar al mar al rescatar algo que no merecía ser recuperado era suicida, ahora que el agua entra a mis pulmones, entiendo que fue un error, fue un error desde el primer momento en que regrese aquí para ocultar mis lágrimas en el océano, como tuve por costumbre desde hace mucho tiempo. Sabía que esto era una terrible equivocación cuando sentí el aliento pesado del mar soplar sobre mi cara, levantando mi cabello descubriendo mi cuello, y me sentí bienvenido, sentí que esto era una señal de que hacía lo correcto, porque añoraba esa sensación de cariño, extrañaba la impresión que el hermoso paisaje me extendía ante mi, el regalo de aceptación que yo tanto deseaba obtener, haciéndome adicto. Creí que hacía lo correcto, que estaba haciendo el bien
¡Pero que tan equivocada estaba! Admiro mi ingenuidad, creí que podría arreglar las cosas, pero al ver el peligro que no pude evitar, volví a creer que estaba en lo cierto al adelantar este terrible suceso, ¡Lo pude evitar, dios mío, estuvo en mis manos esquivar este abominable momento! Por el amor de dios, ¡Mi terquedad!
Visualizando la amenaza, caí de la orilla, rodando, azotando en la red como la presa ante el cazador. Intente escapar pero no pude, ya era demasiado tarde, ya no pude huir. Me tenías atrapado, el mar se apoderó de mi.
¿Pero que puedo hacer? ¿Que puedo hacer si tengo las manos entumecidas? ¿Que puedo hacer si por mas que contenga el aire se me escape? ¡¿Que puedo hacer si el mar se echa sobre mi, su fuerza feroz que se cuela por mi nariz sofocandome desde dentro de mi cuello?!No tengo fuerza para luchar contra la marea, contra la corriente que me arrastra mas y mas lejos de la orilla, en cualquier momento sera mi fin, vivo mi últimos instantes de dolor, esperando el momento, el momento para morir, pero el mar, aun no empuña la daga, aun no se decide a matarme, me quiere vivo, me quiere vivo solo para verme como extiendo mis brazos a una falsa esperanza, ¡Maldito seas! ¡Maldito seas! ¡Oh misericordioso mar, oh misericordioso amor! Arrastrame a la orilla, o ahogame y llevate mis huesos lejos, lejos de tierra.
¡Que hombre más cruel! ¡No te inclinas! Estoy rogando, ¿No me ves? ¡Ruego por clemencia! ¡Tu eres el hermoso mar! Al que yo sin precaución confíe mis virtudes y mis vicios. Tu eres ese mar que me lleva y me devuelve a la playa, contemplo de lejos mi salvación y siento que quizá pueda vivir, la siento tan cerca que puedo incluso tocar esa arena casi seca, pero me tomas de nuevo y me arrastras a la perdición. Eres el mar y su ciclo sin fin. Ese vaivén de olas que me revuelcan en un sufrimiento limpio.
Amor mío déjame o llévame. Mar mío, acuestame en la playa o cobijame con tus olas.nota: nuevo capítulo cada miércoles, disfruten y gracias por leer.
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not your fault; joshler
FanfictionTyler no es atractivo, interesante, social, divertido, o tan siquiera una buena persona. Es en realidad alguien con manos tan frías que puede apagar el fuego con ellas sin sentir dolor. Pero Josh, el chico del camión, quien lo acompaña a la escuela...