Capítulo 15: No puedo parar de huir.

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Pov. Nicolas

Raquel literalmente huyó a su cuarto y Alex solo me miró extrañado.

-¿Por qué Raquel huyó a su cuarto sin decir nada?- Mira con cara de confusión hacía el cuarto de Raquel.

-Ni idea hermano, ni idea- Digo yo restándole importancia a el asunto.

Pero obviamente si sé porque huyó, ella está huyendo de todos y de todo que haga que esos sentimientos crezcan por miedo a ser destruida otra vez y no parará de huir hasta que llegue un punto en donde no pueda luchar más, la pobre se está destruyendo a si misma por dentro.

-Bueno hermano deberías de ir a que Raquel te cure las heridas- Dice Alex mientras me señala la habitación de Raquel.

-Si debería, bueno me voy, disfruta tu desayuno- Digo mientras salgo de su habitación.

-Gracias- Dice Alex con la boca llena.

Mientras voy por el pasillo puedo escuchar a mi pequeña ¿Llorar? ¿Por qué llora?.

De inmediato corro a su habitación a ver que le ocurre y cuando la veo la encuentro sentada en una esquina de su cuarto llorando, abrazando sus piernas y su cabeza oculta entre ellas.

-Pequeña ¿Todo está bien?- Pregunto mientras me acerco a ella.

Ella levanta su mirada y me mira con sus ojos cristalizados y los tiene azules.

No dice nada y yo solo voy y la abrazo tan fuerte que entienda que nunca la soltaré y que no me rendiré a pesar de que ella siempre huya.

Además de que el clima no ayuda parece que se fuese a caer el cielo de tanta lluvia, relámpagos y truenos.

-No me rendiré pequeña, a pesar de que tú siempre huyas...

Luego de un rato abrazados y ella llorando en mi pecho, por fin puedo sentir como ella se calma y levanta su cabeza.

La pobre tiene los ojos rojos y hinchados de tanto llorar, tiene la cara hinchada y se nota claramente en su mirada lo destruida que aún está y el claro miedo a volver a sentir algo por alguien y que la destruyan más de lo que ya está.

Verla así hace que se me parta el alma, no puedo ver a mi pequeña así de mal.

Ella se abraza más a mí y recuesta su cabeza en mi hombro, yo le doy un beso en la coronilla y puedo sentir como sonríe ante ello.

-Nicolas no quiero ilusionarte más y jugar contigo, entiende que nunca pararé de huir- Dice y se le quiebra la voz en la última palabra.

-Tranquila enana, yo esperaré el tiempo que sea pero no me rendiré, correré más rápido que tú y te alcanzaré para agarrarte y refugiarte en mis brazos.

Puedo sentir como lágrimas caen de sus ojos y ella solo queda en silencio.

Estuvimos los dos bastante tiempo allí en el piso abrazados cada uno en silencio supongo que ella sumergida en su batalla interna contra sus demonios y contra todo y yo sólo pensando en el mal nacido que llegó a destruir tanto a mi pequeña que ahora ella tiene miedo al amor...

-Nicolas- Dice levantando su cabeza y aún está toda hinchada la pobre.

-Gracias por estar aquí conmigo, en estos momentos en donde me destruyo otra vez- Dice mientras lágrimas salvajes aún corren de sus ojos.

-Siempre estaré en todo momento para ti pequeña- Digo y luego le doy un beso en su frente, ella sonríe desganadamente ante ello.

-Ahora- Se suelta de mi abrazo y siento un gran vacío entre mis brazos- Ven, que tenemos que desinfectar tus heridas y cambiar el vendaje- Dice mientras me extiende su mano para ayudarme a parar.

No me destruyas, Por favor...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora