Tres en casa. Parte 5

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Esa noche cai dormido a la cama, fue la mejor noche de mi vida, e incluso los sueños fueron los mejores, aunque de eso ya no me acuerdo, solo recuerdo a mi hermano Alberto despertarme dándome palmaditas en el culo. Los dos estábamos en la misma cama, los dos desnudos, los dos empalmados y también con la cabeza algo pesada.

Al final te gustaron mis amigos? – me pregunto mientras se pajeaba levemente

Ha sido una pasada, quizá nos hayamos pasado un poco, sobre todo con Nacho

Pues fue él el que lo pidió, y a ti ya no había quien le parara

Creo que en un momento dado ya no era yo, lo recuerdo como si fuera otro el que se lo follaba, el alcohol me jugo una mala pasada

Nadie te obligó, además, asi espabilas un poco, que no es para tanto

Los dos mirábamos al techo, pero también de soslayo, mientras nos tocábamos, esa tensión que siempre estaba latente entre nosotros se había destapado y ya no teníamos miedo ni pudor el uno del otro. Yo tenia ganas de agarrársela, pero me contuve, él me miraba aparentemente indiferente a mis deseos mientras se la ponía totalmente dura, había que rematar pero no sabíamos como seguir.

En ese momento apareció Nacho

Ya despiertos? – asomo la cabeza por la apertura de la puerta – creo que no hace falta preguntar – añadió cuando vio la escena, entrando a la habitación y sentándose en la cama

Que tal estas? – le pregunté, vaya pregunta mas tonta, pero no se me ocurrio otra forma

Ayer me pusiste a tope – sonrio abiertamente – creo que “la cosa” se puso bastante seria y todos estuvimos genial, para mi fue algo mas que sexo, en ese momento había una conexión entre nosotros, una conexión que surgio no necesariamente del alcohol

Entiendo lo que dices porque a mi me paso lo mismo, Alberto y yo estábamos hablando ahora de ello y yo no sabia como expresarlo

Todo empezó como un juego, que al final se nos fue de las manos – atajo Alberto

No estoy de acuerdo! – respondimos los dos al unisono, Nacho y yo intercambiamos una mirada y una sonrisa

Nacho se puso mas comodo a los pies de la cama y nos miro a ambos, desnudos y con sendas erecciones a la baja, él había venido con un slip pero se lo quitó para estar mas a tono con nosotros

Ayer quería follar, y lo hice, pero me faltó alguien – esa sonrisa que tenia permanentemente desaparecio unos segundos

Pero si follaste con todos – replico Alberto

Me falto alguien – obviamente no hacia falta decir a quien se referia

Y no has tenido ocasión esta noche? – pregunte yo, haciendo una muy sutil (o no?) referencia a que compartia habitación con Alberto

Alberto se quedó frito y aun sigue roncando

Pues él se lo ha perdido – dijo mi hermano, que ya empezaba a “animarse”

Tanto Alberto como yo retomamos el punto en que se había roto nuestra conversación unos minutos antes

No tuviste suficiente con los tres? – le pregunto mi hermano ya mas concentrado en lo suyo que en la conversación, logrando una buena erección. Yo también me esmere, pero lo mio no luce tanto

Me estrenasteis bien y lo mejor es que no me dolio, pero aun asi me hubiera gustado que hubierais sido los cuatro – y viéndonos a los dos, siguió – ahora podríamos aprovechar y hacer un repaso

No –dijo tajante Alberto y acto seguido se dio media vuelta, mostrando su culo

Que quieres decir – pregunto Nacho

Tres en casa (relato erotico).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora