Código azul

Aunque lo dijese a su manera

Podía sentir los ojos ojerosos clavados en él.

Pero pese a todo lo que había pasado, pese a saber que podrían expulsarlo de Yuuei, no sentía todo el arrepentimiento que debería. Porque no se arrepentía de haber rescatado a Bakugo, aunque hubiese causado tantos problemas. Podría haber sido una catástrofe. Podrían haber muerto todos. No lo volvería a hacer.

La próxima sería más cuidadoso, más sutil y más listo.

.-.

-¿Acaso querían matarse?

-No, sensei.

-¿Pensaron que podrían hacer mejor lo que héroes profesionales ya estaban haciendo?

-No, sensei.

-¿Consideraron lo que había pasado si les capturaban, herían o asesinaban? Y podía incluirse uno con lo otro.

-Sí, sensei. Iida nos lo dijo- fue la voz de Yayorozu, y él la miró.

-El único motivo por el que no les expulsamos es porque se necesitan héroes. All Migth se retira- vio la mirada en esos ojos verdes y supo que entendía por qué. ¿Qué demonios estaba pensando Toshinori? ¿Por qué le había dado una carga tan pesada a este muchacho, más sabiendo que algo como esto podría pasar? Y detestaba causarles dolor innecesario a sus alumnos, pero tenían que entnder ahora, aunque le doliese a él mismo -Algunos de los profesionales murieron allí, ¿lo sabían? Si algo hubiese salido mal, y podrían haber salido muy mal, muchas cosas, ahora estarían dentro del conteo de cuerpos.

-Debe ser la suerte de héroe- Aizawa movió, muy lentamente, su cabeza hacia Kirishima, quien palideció y bajó la cabeza -¡Sensei! ¡La culpa es compartida! Midoriya intentó hacer algo para dejarles libre el campo a los profesionales, sin entrar en combate. Todos estuvimos de acuerdo y colaboramos en eso. In-incluso nos disfrazamos p-para que no nos reconociesen.

-¿Y se les pasó por la cabeza que hay particularidades que podrían identificarles, estén o no con el mejor disfraz de la historia?

-N-no... Por eso, sensei- dijo, apenas levantando la cabeza, viendo que seguía mirándolo y volviéndose a esconder bajo los mechones pelirrojos -P-por eso, fue algo colectivo.

-Y por eso se han salvado, pequeños... - se detuvo, sin saber si quería decir "demonios" o "inconscientes". Ninguna encajaba -...más les vale que empiecen a actuar como profesionales, o no me importará que se necesiten o no héroes. Y si llego a saber que están acuando como vigilantes, iré personalmente a detenerlos, ¿ha quedado claro?

-Sí, sensei- la respuesta fue grupal.

-Ahora, ya que no tienen heridas ni nada parecido, se van al dormitorio y de allí no salen, ¿entendido? Duerman, coman algo, dense una ducha o jueguen al ajedrez, pero no se metan en más problemas, ¿entendido?

-Sí sensei.

.-.

Después de que saliesen del hospital se dieron cuenta que "dormitorio" no se refería a los de sus respectivas casas.

Izuku se dijo que no se sentía decepcionado cuando Aizawa-sensei no fue a la casa de su madre para pedirle que le dejase continuar en Yuuei. O vivir en los dormitorios nuevos. Pese a los lógicos reparos de su madre, al final logró que le dejase ir a reunirse con sus colegas. Sólo cuando se retiró a dormir miró de nuevo su marca, sin entender por qué seguía allí. ¿Para qué servía, entonces?