No todos los cielos dicen bésame

X

Luz; dorada. Se mi caliente rosa mi piel. Una rafaga de aromas inundan mi apetito.  Y una suave voz que  llama mi nombre.

-Luna. Despierta- Besa mi frente- No querrás llegar tarde.-Sacude mi hombro lo suficientemente suave como para despertarme aún más.-Ya está el desayuno.

-Noooo. Cinco minutos mas porfavor- Me acurruco aun más en la suave tela.-Por Favor mamá, ven, acuéstate conmigo. Mira que tengo mucho campo- Di palmaditas a  la  cama. Nisiquiera habia abierto mis ojos pero sentía la cama y sabía cuánto espacio había. 

Sabía que no lograria ganar pero no perdía nada con intentarlo. 

-Ah, ¿no te vas a levantar?-  Sentí como un rasgueo invade mi calma, empece a reir.

-No, JAJAJA,  no no. Cosquillas no. JAJAJAJAJ. Esta bien- suspire-... Esta bien- Bufe.- Luego de 5 minutos.- Me cubrí por completo, dejando todo mi cuerpo protegido por la manta.

-¡No!, Luna, levántate ahora mismo- Me quita la manta de un solo movimiento y se retira.-Si no te levantas te quedas sin desayunar y mira que hice algo rico.

-Aaaaaahhh...¿Que cosa hiciste?- Limpie mis dormidos ojos.

-Algo rico-Cierra la puerta.- Y vamos a tener visitas después de tus clases. Así Que alista ropa bonita.- casi que lo grito.

Sentía que estaba adherida a mi cama, mi cuerpo estaba aún más pesado de lo que esperaba, mi cabello, bueno...

 Coloque un pie después del otro. El piso estaba congelado, mis vellos se pusieron de punta. Agarre mi manta, me cubri y salí hacia la sala. Iba con pasos lentos pero perezosos, mis ojos entre abiertos y mi cuerpo ni hablar.

Me senté en la silla y dejé caer mi cabeza provocando un sonido fuerte pero un golpe débil sobre mi frente.

-¡Luna que te he dicho sobre eso!..- ni siquiera me miró.

Me levante rápido-¿que hiciste de comer?

-Pan con mantequilla y jalea.

No me sorprendí, supuse que era algo así.-¿está caliente?

-Si- coloca una porcelana fina, ya algo dañada frente a mi luego encima coloca el pan.

-¿A Qué hora van a bajar tus hermanos?, ¡Thomas!, ¡Sofía!-Ya se iba a poner a gritar,agarre mi pan y me fui hacia el sofá y encendí el televisor.

De un pronto a otro mi madre guarda silencio. No preste atención. Pasaron unos minutos cuando alguien toca la puerta bruscamente, me asuste.

Thomas y Sofía venían llegando a la sala. Mi madre abrió la puerta, una cegadora luz cubre por completo la sala, observe con atención la figura humana que asomaba en la casa. Me enfade un poco, no tenía que haber tocado tan fuerte. Quien sabe que ha de estar haciendo uno, con un sonido así, a cualquiera molesta.

-Buenos días hermosa, espero no haber llegado tan pronto.- Besa a mi madre en la boca. Me confundi un poco. Quería ver quien era pero el brazo de mi madre sobre el marco de la puerta no me permitia descubrirlo.

-No tranquilo.-Le devuelve el beso.- Pasa- Ahora no era el marco lo que no me dejaba ver, era la abundante luz que venía de afuera, tuve que cubrirme un mi rostro.

Sofía tropezó con mi pierna dejándose caer.- Perdón Sofía- Si apenas la vi. Queria saber quien era, estaba seguro que no era mi padre, la voz de él es un poco más grave.

Sofía da un puñetazo en mi estómago dejándome sin aire, haciéndome mirarla rápidamente. Me sorprendi,  ella nunca me había pegado así.

Thomas me mira, retrocede un poco y se desmaya, o al menos eso parece. Yo aun no recuperaba el aliento cuando Sofía me volvió a dar otro golpe cerca del mismo lugar pero aún más fuerte.

Mi madre hablaba con el sujeto, ni siquiera nos prestaba atención. Thomas aun seguía en el suelo y Sofía solo me miraba fijamente. Sofia tenia mucha fuerza, suele hacer ejercicio. Ahora veo que si ha dado frutos.

Mis pulmones empezaban a transportar aire. Miro de reojo a Thomas,  no se veía esperanzas que despertara. Me empezaba a enfadar .

Aún no podía hablar, no me salían palabras, vi a mi madre, note que el hombre venía hacia donde mi. 

Al fin vi su cara. Yo le conocía...

 No entiendo, qué hace el aqui... Se acerca a Sofía a su oído, susurrando algo, yo no me podía mover. Me ardia el abdomen.

Sofia se veia algo rara. Su expresión era de enojo. estaba muy furiosa.-...¡ Te dije lo siento!- Intenté gritarle pero no pude. Seguido de mis palabras Sofía me da una bofetada que genera un eco. Me quedé mirando hacia la izquierda por la bofetada, plasmada. Me dolio, me dolio mucho...Quería llorar, quería golpearla. Quería gritarle.

Pero el hombre, agarra mi mejilla con su mano y me hace verle a los ojos.

-Ay Luna...

-No... No entiendo- apenas se escuchó- Que haces aqui Thiago...

-Te are sufrir, no sabes cuanto dolor te voy a provocar.- Esos ojos... 

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