Capitulo XXVIII

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Tal y como lo había dicho Taka, a la mañana siguiente lo primero que hizo fue ver su teléfono, en el cual ya se encontraba un mensaje de su pareja.

-Akira.
"Perdón, pero apenas pude ver tu mensaje ayer, de seguro estás leyendo esto tarde, te conozco mi pequeño flojo.

Tan equivocado no estaba, lo cual hizo reír a Taka.

...cuando leas esto llámame, estoy ansioso por escucharte, te extraño".

Era cierto que a Taka aún le parecía extraño está clase de sentimentalismo, o como el le llamaba, "cursilerías", por lo cual cada que el mayor lo hacía, Takanori se sonrojaba demasiado.

Marco al teléfono de Akira, y lo puso en altavoz, dejando el teléfono aún lado en la almohada.

-buenos días flojito- respondió Akira

-aun no es tan tarde, apenas as son las 11-.

-aja claro-.

Se escuchó una carcajada por parte de ambos. Conversaron por un gran rato, en tanto Takanori se tomaba el tiempo necesario de contarle lo sucedido a Akira y este le diera sus mejores palabras en forma de consejos para su amor.

[...]

Las dos semanas de vacaciones habían pasado con total normalidad, Takanori pudo ver que enserio la relación con sus padres había mejorado, por ambas partes trataban de entenderse, aunque el trabajo de sus padres aún los separaban ahora lo comprendía mejor, sabiendo que al menos ellos también hacían el esfuerzo de pasar más tiempo en familia.

...

Sábado por la noche, pasado mañana las clases iniciarían de nuevo, esta vez, en su último curso.

Ninguno de los dos jóvenes estaba seguro de querer volver, esta última semana las veces que podían se quedaban en la casa de alguno, aunque en una ocasión, en casa de Akira, unieron sus cuerpos una vez más, ninguno diría que fue como la primera vez, sería una mentira, esta vez la vergüenza no se encontraba en ninguno de los dos, haciéndolos disfrutar en demasía el momento.

Pero debido a la escuela eso sería prácticamente imposible, siendo ya el último curso de la preparatoria, sería más pesado, en tanto a trabajos, deberes y clases, pues Takanori quería asistir a clases particulares nocturnas.*

Pero estas serían tan sólo los viernes, a pesar de sus horarios normales, -8am a 4pm- ellos se quedarían a hacer sus tareas en las bibliotecas.*

Tan solo Takanori quería ser mejor en tanto lo académicamente respecta, y claro que Akira lo no dejaría solo.

Esa noche, después de despedirse de Akira por mensajes el estaba dispuesto a dormir. Aunque sentía cierto peso en su cabeza quería descansar mientras aún tuviera sus dos días libres, pero no esperaba... Un ataque de ansiedad.

Esta nervioso por el hecho de pronto tener que ver a tanta gente, sus compañeros.

Así que en su sueño, el se encontraba en su salón, sus compañeros igual, cada uno en sus respectivas actividades. Pero le extrañó no ver a Akira, lo cual lo mantuvo preocupado. Hasta que se levantó, sintió las miradas de todos sobre el.

Y la bulla comenzó a hacerse, ensordecedoras voces lo llamaban en burla.

"Puto".

"Fácil".

"Idiota".

"Flacucho depresivo".

"Suicida".

Eran algunos de los apodos que lo hicieron caer, tapándose los oídos, suplicando que se detuvieran.

Perfect {Reituki}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora