Prólogo

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Desde hace 2 semanas estoy sumida en una depresión terrible post-relación. Estuve 2 años y 3 meses con Mauro, mi exnovio. Después de engañarme tantas veces pudo, lo descubrí.

Estoy tan acostumbrada a sus besos, abrazos, cuando me cantaba al oído... esto me llena de pesadez el alma. Pero es lo más sano.

Diario nos vemos en el colegio. No nos dirigimos la palabra, yo lo decidí y el tuvo que aceptar. (Aunque no confío en su palabra)

A veces lo sorprendo mirándome con añoro, que lástima. No me digno ni a mirarlo.

Natalia, mi mejor amiga, me dice que debo dejar de lamentarme, que debo salir a distraerme, hacer deporte, en general, superar mis sentimientos hacia él.

Quizá tenga razón,  y sí me va bien, encuentre a alguien para amar. Sí, sé que suena mal, hace tan sólo 2 semanas que estoy soltera luego de tanto tiempo juntos... ¿Por qué querría enamorarme de nuevo?

La razón es que creo en el amor verdadero,  sé que existe y que allá afuera está el amor de mi vida.

¡Y lo voy a encontrar!

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