Steve espera lo suficiente para que Ben tenga su primer baño y luego cambien su primer pañal antes de decirle a Billy que vaya y llame a Joyce y a Dustin; "Los quiero aquí. Ellos son mi familia Deberían conocer a Ben primero."
"Está bien, princesa," dice Billy amablemente, agachándose para presionar un beso en la frente de Steve, y luego en la de Ben, que está durmiendo en el pecho de Steve. Billy sale de la habitación de Steve sin decir una palabra más.
"No pude contactar a Dustin, pero conseguí a Joyce. Ella dijo que estarían aquí lo antes posible." Le promete cuando regresa, y efectivamente, Dustin y Joyce llegan solo un par de horas más tarde.
"Tienes que sostener su cabeza. No, Cristo, así no, él no es una maldita muñeca. Más bien así. Aquí tienes-"
Steve se ríe cuando Billy mueve suavemente al bebé en los brazos de Dustin y levanta el codo para que la cabeza de Ben no esté tan inclinada como antes. Dustin se ve aterrorizado pero decidido. Está sentado en silencio, dejando obedientemente que Billy le muestre cómo sostener al bebé correctamente.
"Santa mierda," dice Dustin cuando finalmente Billy retrocede satisfecho. "No puedo creer que lo hayas hecho," le dice a Steve. Él mira al bebé con asombro. "¡Es tan pequeño! Hace solo unos meses, ni siquiera tenía pulmones, ¡y ahora está respirando!"
Steve sonríe, mirando el pecho de su bebé subir y bajar con cada inhalación y exhalación. "Seguro que lo hace."
"Es hermoso, Steve. Y Benjamin es un buen nombre para él." Joyce se inclina sobre el hombro de Dustin para poder acariciar el fino cabello en la frente de Ben. "¡Y sus ojos! ¡Son tan azules!"
"¿No cambiarán?" Pregunta Dustin. "¿No es eso lo que pasa, o algo así? Los ojos de los bebé cambian después del nacimiento."
"A veces, sí," asiente Steve con la cabeza. En su mente, él espera que no lo hagan. Son de un azul tan bonito.
"Eso pasó con mis dos hijos," dice Joyce. "Tenían unos hermosos ojos azul claro, los dos, como mi padre. Creo que cambiaron alrededor de los seis meses, comenzaron a oscurecerse y eventualmente se volvieron marrones."
"No siempre," dice Billy en voz baja. "A veces los ojos no cambian." Sus manos se están apretando a los costados, y Steve sabe que está ansioso por tener a Ben en sus brazos de nuevo. Ha sido extremadamente protector con Ben, casi no deja que nadie más que Steve y la Dr. Lima sostenga al bebé sin mirarlos como un halcón.
Hubo incluso algunos comentarios despectivos en contra de los miembros de la Pandilla cargando a Ben antes de que sepan qué demonios están haciendo. Sobre mi cadaver.
Steve casi se rió y asintió con la cabeza en acuerdo. Pero Dustin parece estar haciéndolo bastante bien; él piensa que el resto de la pandilla, cuando conozcan a Ben por primera vez, también lo harán bien.
Joyce tararea pensativamente. Ella levanta su mirada de Ben para observar a Billy, mirándolo pensativamente. "No," dice lentamente, de acuerdo. "No siempre. A veces los ojos se quedan azules."
Steve parpadea hacia ella, porque eso sonó casi extraño, pero se distrae de pensar en mucho más cuando el bebé comienza a llorar y Dustin le lanza una mirada de pánico.
"¿Qué hice?" Se pone rígido por la incertidumbre, los hombros tensos, y Billy está allí en un instante, cuidadosamente sacando al bebé de los brazos de Dustin y metiéndolo hábilmente entre los suyos. Sin torpeza, sin dudas. Parece que lo ha hecho cientos de veces antes.
"Tiene hambre," dice Billy. "¿No es así, pequeño? Quieres a tu papi, ¿verdad? Él es el que tiene leche, ¿no? Sí, él es. Sí, así es."
Dustin lo mira asombrado, e incluso Joyce parece más que sorprendida por el comportamiento de Billy, pero Steve solo sonríe cuando Billy se acerca a su cama con Ben en sus brazos. Steve ya se está desabrochando los botones superiores de su bata de hospital cuando hace una pausa y mira a Dustin y Joyce.
