Capitulo 2

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Al sonar la campana del almuerzo me pare de mi banco y me dirigi a la cafeteria.

Mi Amiga Susan estaba en la mesa donde se sentaban los chicos populares.

Mi amiga me miro desde la mesa y se paró de ella.

-By, cariño- me volvió a dar un beso- me miro por un momento el cabello y se quedo con la cara de curiosa- pero que es eso que traes en el cabello?.
-Que traigo?- me hice la tonta tocándome la cabeza.
-Eso que traes aquí- me aplasto exageradamente la cabeza.
-Ouh- exclamé- no se de qué me hablas no tengo nada.
-Claro que sí, tienes un mechón color azul, pero por que te lo haz pintado?.
-Pues...- no me dejo terminar.
-Espera, en la mañana no tenías eso, como te apareció eso? O te lo escondiste?.
-No se de qué hablas, no me pinte el cabello, no tengo nada- me pare de mi asiento y me dirigí a el baño.
Abrí la puerta y me fije que no ubiera nadie viendo por abajo de las puertas.

Me levanté y me mire en el espejo.

Efectivamente mi amiga tenía razón, tenía un mechón azul en mi cabello.

Este mechón ya me había aparecido antes pero no entendía por que y poco a poco se me iba quitando.

Me moje la cara haciendo que gotas de agua calleran a el cabello que tenía a un lado.

Me volví a mirar y el cabello que me había mojado accidentalmente se me había vuelto azul como el que tenía arriba de la cabeza.

-Mierda, mierda, mierda- repetía una y otra vez- que me pasa?- me pregunte a mi misma viendo mis manos que temblaban.

Respire hondo y lo solté.

Salí del baño y me volví a dirigir a la cafetería.

Me puse en la fila que hacían los estudiantes para comprar.

Cuando llego mi turno compre una botella de agua.

Regrese a los pasillos del colegio y espere a que sonara la campana.
Mire la hora en mi celular y note que faltaban 2 minutos.

Me senté en el suelo y espere a que sonara.

-Abby- me sacudió mi mejor amiga.
...
...
...
-Abby, despierta- me sacudió de un lado a otro.
-Eh?- dije tallando mis ojos.
-Despierta, ya es hora de salir.
-Abrí más los ojos y espere a que mi vista se tornará más clara. Di un salto y mire el pasillo que estaba solo- Que hora es?.
-Apenas son las 3:01- me dijo mi amiga- anda levántate..
-Me levanté del suelo y agarre la mochila- Que paso?.
-Te quedaste dormida y todos te veían dormida.
-Y por que no me levantaste?.
-Lo intente pero me golpeaste y mejor ya no lo hice.

Seguí caminado con sueño en los ojos.

-Ven, yo te llevo- me ofreció mi mejor amiga.
-No, no hay problema, yo camino- bostece.
-Claro que no, aún sigues dormida, te van a atropellar, ven vamos.

Camine con ella asta su carro y me senté en el asiento del copiloto.

Deje caer mi cabeza en el vidrio y serré mis ojos.
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-By, levántate, ya llegamos- me movía mi amiga.

Abrí los ojos y agarre la mochila.

Abrí la puerta y me salí.

-Gracias Susan- le dije por el vidrio.
-No hay de que linda, segura que puedes caminar?.
-Si, no estoy borracha. Bye- le dije como despedida y me voltee para caminar, en ese momento el equilibrio se me fue haciendo que casi callera.

-Estas bien By?- me dijo mi amiga en un grito.
-Si, no es nada.

Volví a caminar asta la puerta de mi casa y la abrí con una mano.

Entre en ella y aventé la mochila a un lado, subí las escaleras y me tire en mi cama.

Volví a serrar mis ojos y me volví a dormir.
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-Cariño, levántate.

Mi mama me despertó de mi sueño.

-Que?.
-Tienes que comer, ven vamos.
-No quiero, estoy cansada.
-Tienes que comer algo Abby, levántate.

Me di por rendida y me levanté de mi cama, me dirigí a la planta baja sentándose en el comedor.

Mi mama me puso el plato con ensalada en la mesa y se sentó enfrente de mi.

-Abby, por que traes el cabello azul?- me dijo mi madre mirándome.
-Si te digo no me creerías.
-Dime- me obligo.

Tarde un momento en decidir si decirle la verdad o mentirle.

-Me pinte el cabello- mi mama soltó un suspiro de alivio.
-Esta bien cariño, sigue comiendo- la mano le temblaba con nerviosísimo, sólo la veía con curiosidad.
-No me vas a regañar?.
-No, ya estas grande para hacer lo que quieras.

Apenas tenía 15 años, aún no cumplía los 16, ya le había pedido permiso para pintarme el cabello y me dijo que estaba loca.

-Se levantó de la mesa y se aserco a mi- ya acabaste?- no me dejo contestar ya que ya había quitado el plato de la mesa.

-Puso los platos en el fregadero y me volteo a ver- Ya puedes irte a dormir.
-Me levanté de la mesa- Buenas noches mama.
-Buenas noches cariño.

Subí las escaleras y me pare en donde no me pudiera ver.

-No tiene que saber, aún no, toda vía no es tiempo- susurraba recargandose con sus manos.

Subí las escaleras asta mi habitación y entre serrando la puerta.

"Saber que?"

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