Misty, Más Allá De Los Sueños: Batalla Arcaica.

Capítulo 14

*Piola: pasar desapercibido.
*Perseguirse o perseguirme: inquetarse con ansiedad. Es como estar en un estado constante de alerta.

Las notas de la canción Numb de Linkin Park a todo volumen invaden mis oídos, amortiguando mis pensamientos. Estoy meditando sentada en mi balcón, afianzando mi fe en el Budismo.

No me quejo de ésta situación, sin embargo, admito que me gustaría mucho conocer a alguien que estuviera pasando por lo mismo que yo, ya que es difícil sobrellevar ésta carga en los hombros. No sé por qué lado debo tomar ventaja.

Por una parte, está la idea de seguir siento lesbiana. Es con lo que más me siento identificada y cómoda. He tenido cuatro parejas mujeres y nunca había dudas con respecto a eso.

Más, por otra parte... no me siento cómoda ni contenta, y mucho menos entusiasmada con el concepto "bisexual" o "hetero". Así mismo, es contradictorio todo lo que está pasando con Pocker; me atrae, me confunde a rabiar, no hace nada y ya le quiero tirar los calzones...

Creo que eso último es completamente excesivo.

En fin, ni que estuviera tan bueno...

¿Por qué ese hombre tiene que ser tan guapo?

No soy una interesada por el físico ni mucho menos pero... es que es la verdad, además no me atrevo a decir nada más que no sea un comentario sobre su belleza. Prefiero que se quede en mi cabeza como un Crush.

Aunque... si soy sincera conmigo misma, diría que...

- Oye, tonta - Marcus aparece de la nada, quitandome mis hermosos audífonos del rapero Porta -. Te he estado llamando a la puerta como loco - mi hermano me ayuda a pararme.

- Sabes qué hora es y que éste momento es mío - a esta hora siempre medito, debería darse por aludido, ¡pero ya!

- Necesito hacer una reunión familiar - le quito mis audífonos y los guardo en mi mini Buró con una puertecita.

- Ya, al tiro bajo - le informo.

- No, necesito hacerlo aquí... ya que tú eres la guardiana del portal... - ¿me está pidiendo permiso?

- Bueno... - él se larga, cuando vuelve entra con Pocker y mi madre.

- ¿Haces los honores? - me pregunta Marcus.

Voy hacia el espejo fucsia largo que está en mi habitación. Hago todos los protocolos necesarios para abrir el Salón del Portal y entramos todos.

Frente a nosotros hay una gran cortina roja en donde está la ventana que sería nuestro portal.

- Sin mayor preámbulo - anuncia mi hermano -, les presento el nuevo y renovado portal.

Él abre las cortinas y un gran ventanal se insinúa frente a nosotros, mostrando la absoluta oscuridad. Es rara la sensación que te da al estar frente a ti; roto y sin vida no me daba ni cosquillas pero ahora... cuando sé que está reparado, me causa un raro cosquilleo en el cuerpo. Como si su fuerza me fuera a absorber si me descuido.

- No sé en qué mundo vamos a parar, pero el que salga tendremos que tomar - mi hermano sube la tarima y toma un libro de la biblioteca -. Hermana, tú eres la única que no ha recorrido el universo, y es mi deber entregarte éste libro.

Marcus me entrega el objeto pesado, es de todos los colores, como la bandera de la homosexualidad, con letras plateadas.

¡Que lindo! Voy a llorar.