Misty, Más Allá De Los Sueños: Batalla Arcaica.

Capítulo 7: Parte I.

45 minutos después...

- ¿Lista? - me pregunta Marcus, yo me pongo las gafas de protección.

- Lista - le aseguro.

Marcus esta al fondo de la habitación, Pocker está al otro lado y yo al medio. Ellos me dijeron que querían hacer una demostración de sus poderes y que me pusiera en la zona de seguridad.

Que es el medio, hay como una habitación pero abierta, como un hueco: sólo tiene tres paredes sólidas. A cada lado hay una puerta: una es el baño y otra es un camarín. Hay una tercera puerta al medio pero no sé de qué va.

Entre el baño y el camarín hay una pared de energía – por lo que entendí – que me protege. Pero sólo las personas de carne y hueso pueden entrar o salir.

A Marcus y a Pocker se les ilumina las venas –cada uno con su color correspondiente– para así posar en sus manos una bola de energía. En el rostro de mi hermano sólo se muestra frialdad, mientras que en el de su amigo hay paz.

Éste último me mira de reojo para así ser el primero en disparar mientras que mi hermano lo resive –a leguas se le nota que no se lo veía venir–. Marcus prosigue a atacar pero Pocker se la pone difícil.

- Esto es igualito a Harry Potter -murmuro para mí misma.

Lord Voldemort vs Harry Potter.

Está caga'o sí Harry Potter.

Me río internamente ante esa idea.

Marcus se logra recuperar atacando a Pocker por la retaguardia...

¿¡Qué mierda!?

No me puedo explicar cómo lo hizo pero Pocker por el impacto no esperado cae al suelo, siendo Marcus el ganador.

- ¿Qué te pareció eso hermanita? ¿te lo esperabas? - dice, una vez que está al frente mío pero sin haber pasado la pared de energía.

En su rostro tiene una sonrisa de oreja a oreja y sus ojos verdes sólo demuestran superioridad.

- Claro que no me lo esperaba - salgo de la zona de seguridad para acercarme a Pocker -. Oye, ¿estas bien? - lo pincho un poco con la punta del pie para verificar que sigue vivo.

Se mueve un poco, como haciendo un taldo. Marcus se acerca y lo toma en brazos a lo princesa.

- Estará bien, sólo necesita descansar - me asegura, con su mirada dulce. Cuando se trata de mí, siempre me mira así.

- Tú también necesitas descansar - me preocupo.

- No hermana, yo estoy bien - me sonríe, pero al instante le comienza a salir un hilito de sangre.

- Marcus, no seas porfiado. Te está saliendo sangre - él se toca de bajo de la nariz y al ver su mano ensangrentada no se sorprende para nada.

- Esto es nuevo - dice tranquilamente.

Marcus suelta las piernas de Pocker e hizo un movimiento con la mano y en el centro apareció un pedazo de algodón ya enrolladito para metérselo en el agujero izquierdo de su nariz.

- Vaya, eso sí fue rápido - hago una observación.

- Ayudame a llevarlo a la enfermería - me pide con un movimiento de cabeza para volver a tomar al Brujo desmayado a lo princesa.

- ¿A donde está la enfermería? - indago.

- La puerta del centro - dice simplemente.

Yo me adelanto y abro la puerta del centro, al entrar los tres cierro la puerta detrás de mí. Debo admitir que para ser una enfermería para los que entrenan con la Magia es muy moderna, luminosa y amplia. Hay seis camillas del año, la habitación es octagenal –o sea que tiene ocho caras– con mosaicos en cada pared, el techo parece haber sido hecho con una fina madera de cahoba barnizado con un color oscuro, en el suelo hay un precioso piso flotatente también oscuro y por todas partes hay muebles de cristal con medicinas, implementos varios de enfermería y una televisión de pantalla grande colgada frente a las camillas en la pared.

- ¡Vaya, vaya! - exclamo, con la boca abierta y totalmente anonadada.

Esto es mejor que cualquier hospital o clínica de cuhicos.

- Hay que dejarlo descansar - de la impresión, no me había dado cuenta de que Marcus dejó a Pocker en una de las camillas del medio y lo tapó con una manta.

Marcus haciendo un último movimiento de manos hizo aparecer un ramo de flores dentro de un florero con agua junto con un chocolate que lo amarraba una rosita de regalo.

Ésto último me causa dudas.

- ¿De donde sale todo, Marcus? - lo interrogo. Él me mira como si le hubiera preguntado algo muy obvio.

- Las cosas las pienso y sólo aparecen - mira para un lado y para el otro antes de mirarme -. De algún lado tienen que salir.

- O sea que la robas - finalizo.

- No, no me ofendas... digamos que las tomo prestadas - se defiende.

Yo me río internamente.

¡Sí tú, como no!

- Descuida, cada quien con sus cosas - intento empatizar -. ¿Y cómo hiciste el ataque sorpresa en la demostración?

- Me dupliqué, como Naruto - y al ver mi expresión de incredulidad levanta las dos cejas y dice: -. Algún día lo podrás hacer, Mys.

- ¿Cuando me vas a enseñar? - pregunto, un poquito impaciente.

- Iba a enseñarte con Pocker, pero veo que no se podrá - Marcus hace un movimiento con la cabeza -. Ven, acompañame.

Lo sigo hasta el Salón de Entrenamiento.

Debo admitir que tengo un poquis de miedo.

- Muy bien, primero practicaremos como crear energía - nos colocamos en medio de la "cancha".

- ¿Hay que decir algo en Latín?

- Maoma - dice moviendo la cabeza, como diciendo "adivina".

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Holaaaaaaa lectores!!

Quiero pedir disculpas por no subir capítulos últimamente es que tengo un blokeo mental horrible, así que lo dividiré en dos partes.

Eso amores, hasta luego 🙋🙋

Buen remar ❤🚣