Misty, Más Allá De Los Sueños: Batalla Arcaica.

Capítulo 1.

Agosto, 2016. Actualidad paralela.

El sol hace acto de presencia, llegandome directamente al rostro. Abro los ojos y me desperezo en la cama estirando todas mis extremidades, odio el colegio. Lo mejor es que es viernes. Cuando me siento, todo me resulta extraño, las paredes en vez de ser rosa son blancas, en el techo hay un sin fin de posters de bandas, equipos de fútbol y fotos mías con muchas personas más. Mi cama ahora es menos colorida y simple, una cama nido. El piso ya no tiene alfombra sino que piso flotante. Que extraño, como pasa el tiempo en un abrir y cerrar de ojos. Lo único que sigue igual es un espejo fuccia largo. Colgado en la pared.

Cuando estoy bañada y vestida con el uniforme bajo a la primera planta. Ahí está mi hermano mayor haciendo el desayuno, él tiene que ir a la universidad.

- ¿Y mamá? - pregunto.

- Está dormida, yo le dije que iba hacer el desayuno por ella - dice mientras revuelve unos huevos.

- Bueno, ¿tienes un cigarro?

- Encima de la mesa.

Me doy la vuelta y ahí están, saco uno y voy al patio de atrás. Lo prendo y doy una gran calada.

Llegando del colegio me desnudo y me quedo sólo con la ropa interior. Me miro al espejo y admirando mi plano vientre mientras me como un super8. Esto de comer y no engordar me encanta.

La mujer con pelo negro, ojos verdes y piel blanca me devuelve la mirada, casi que burlándose de mí. Mi mirada se extiende y casi puedo ver a través del espejo... como si se escondiera algo detrás de el...

¡Brurrrrrrr!

El crujido de mi estómago indicándome que tengo mucha hambre interrumpe mis pensamientos analíticos.

Como mi hermano y mi mamá no están voy a bajar así nomas a buscar algo de comer a la cocina.

- ¡Mmm! Que rico - exclamo mientras abro una olla con unos sabrosos fideos con carne molida.

Me los echo en un plato y los meto al microondas. Cuando está listo le echo queso rallado, pesco tenedor y cuchillo y un gran jarrón de café con crema de vainilla. ¡Ooh un manjar! Me voy a mi habitación y pongo a tope la canción 10am de Pxndx mientras canturreo:

Jamás te rompería el corazón, a menos que me dés una razón.

Comienza a sonar Party Animal, miro mi celular y hay una llamada entrante. Es Alen.

- ¡Hola linda! - saludo un poco emocionada.

- Hola amor.

- ¿Cómo estas?

- Bien, ¿y tú? - su voz suena rara, es seria.

- Muy bien, pero parece que me estas mintiendo, tu voz suena rara ¿seguro que estas bien? - no contesta.

- Sí - dice después de un silencio sepulcral -. ¿Estas en tu casa?

- Sí, precisamente almorzando ¿pasa algo?

- No. Voy en camino.

- Bueno, te espero. Te amo.

- Yo igual.

Una vez que cuelgo ataco mi plato de fideos. Que por cierto, están de muerte. Cuando voy a dejar el plato y el tazón a la cocina el timbre de la puerta suena, voy así tal cual, con ropa interior.