(Fanfic)Cazadores de Sombras: Ciudad de la Magia Demoníaca

Prólogo: Descubriendo al Sujeto

─El sujeto aún no se ha identificado como conocedor, esperaremos un poco de tiempo para proceder a la identificación.

─El sujeto sigue sin saber su identidad. Se monitoreará sus actividades para sacar a relucir algo sospechoso de él… o de ella.

─El sujeto parece tener noción del tipo de mundo en el que vive, pero no de que forma parte de él. Esperaremos instrucciones para saber que….

Clary le interrumpió.

─Simon, no es necesario todo este embrollo del detective. Y deja de llamarla “sujeto”─ le regaño. Aunque, a decir verdad, ella también estaba algo emocionada por lo que iba a suceder. Recordó la primera vez que había descubierto el mundo de los Cazadores de Sombras y como todo le había parecido irreal; y se preguntó si esta vez sería semejante o diferente.

─No te angusties─ la calmó Isabelle─ Magnus está investigando lo que más pueda de ella y nos dirá el tiempo exacto en el que debemos intervenir.

Alec estaba sentado en el viejo sillón del apartamento de su prometido. Ya hacia una semana de la propuesta que el propio Alec le había hecho a Magnus, y se veían como Clary diría, “empalagosamente enamorados”. Todos estaban felices por ellos, después de ver cuán mal se habían puesto luego de su ruptura.

Había que admitirlo, estaban hechos el uno para el otro.

El salto de Presidente Miau a sus brazos la sacó de sus pensamientos. El gato se acunó en su regazo, ronroneando con pereza. Desde pequeña le habían gustado los gatos, pasando por la compañía de Yossarian cuando Simon recién lo había comprado, siendo solo un gatito bebé. Al único gato que parecía no agradarle era a Iglesia.

La puerta chirrió con gran estruendo, dejando ver a Magnus y a Jace detrás de ella. Jace vestía con su atuendo normal, mientras que Magnus tenía un traje gris, con una gabardina de otoño. Sostenía una lupa en su mano y una pipa en la otra, que recordaba a Sherlock Holmes.

─La próxima vez, recuérdenme por qué debía ir con la arrogancia en persona…─dijo Magnus, apartando la pipa de su mano. A Clary le parecía que de la pipa no salía humo, sino chispas azules y purpurina, pero no dijo nada.

─Porque necesitas protección. Y soy el más capacitado para ello─ dijo Jace─ Y porque si hubieses ido con Alec, habrían hecho otras cosas─ agregó, mirándose las uñas.

Alec le miró, horrorizado, mientras sus mejillas se teñían de rojo. Magnus solo sonrió, tímido. Algo muy raro, pues Magnus no era tímido en absoluto, pero Clary pensó que el amor te cambia. Solo hacía falta ver a Jace en su compañía para darse cuenta como alguien muy seguro de sí mismo podía explotar de nerviosismo.

Aunque Clary sabía que Jace solo había acompañado a Magnus, porque sentía que esta era la única conexión con su pasado. Con su padre, con su familia.

─ ¿Para qué la lupa y la pipa? ─preguntó Simon, apresando a Presidente Miau en sus manos, haciéndole gruñir. Al gato no le gustaba él por alguna razón.

─Solo son de utilería─ respondió Magnus, aplaudiendo, cambiando su ropa por un conjunto rayado de cebra, de algodón y terciopelo. Su cabello caía sobre sus ojos felinos, haciendo que brillaran más de lo normal. Su aspecto era interesante e intrigante.

─ ¿Cómo les fue? ¿Ella sabe algo? ─inquirió Clary. Le preocupaba este caso en sí, pues tenía que ver mucho con su pasado y su futuro.

─No. El sujeto aún no se ha identificado como CdS─ dijo Jace, mientras tomaba su estela y la utilizaba como lima de uñas, del mismo modo en que lo hizo cuando se conocieron.

Clary lo miró, rodando los ojos.

─ ¿Y cuándo podremos ir por ella? ─dijo Alec.

Magnus y Jace compartieron una mirada que cualquiera hubiese calificado como perturbadora. Pero para Clary fue una mezcla de hermosura y consentimiento.

El brujo sonrió mostrando todos sus dientes, parecidos a los de su padre. Su queridísimo padre.

─Mañana…─agregó─ O si desean, en este mismo instante.