(Fanfic)Cazadores de Sombras: Ciudad de la Magia Demoníaca

18-¿Preparados?

Después de equiparse hasta los dientes, se reunieron en la Biblioteca. Hodge, Emma, Jem y Tessa les esperaban allí. A la pequeña Carstairs todo esto le parecía maravilloso, y, a pesar de los constantes golpes que Jules había dado en su puerta esa noche, ella no había abierto la puerta. Sabía lo que él le habría dicho de haberle contado lo que sucedía.

"Eso es lo bastante peligroso como para informarlo a la Clave" pensó ella. Rió amargamente.

-Bien. Clary ¿sabes con seguridad a dónde vamos? -preguntó Alec, poniendo una runa de Sin Sonido sobre el brazo de Jace.

-Si. Sé exactamente como llegar- dijo ella, poniendo otra runa, de Sin Miedo, sobre el pecho de Simon.

Clary no quería admitir que tenía miedo. Pero no por ella ni por Jace, sino por Simon. Era la primera vez que él los acompañaba en calidad de Cazador de Sombras, lo cual hacía que todos sus cabellos se encrisparan. Lo miró de reojo, mientras él estaba sonriéndole a Emma, y conversando animadamente sobre algo. El traje de Cazador de Sombras lo hacía ver mayor, más tosco y peligroso, su cabello caía en rizos sobre sus orejas, y sus dedos, doblados y chuecos por la guitarra, sostenían su estela de forma decidida.

"Quizá Simon si había nacido para ser Cazador"

-Hey... Tranquila, va a estar bien. Ya sabes que Simon es más valiente de lo que a mi me gustaría admitir- dijo Jace a su espalda.

Clary se giró para mirarlo, pero pudo notar el nerviosismo en su rostro.

Jace estaba preocupado por Juliette.

-Clary, deseo pedirte un favor-le dijo éste, balbuceando-Alec y yo siempre estaremos pendientes del grupo, en caso de que tengamos que protegerlos.  Pero confío en ti la vida de mi hermana. Ella es para mi lo que Simon es para ti.

Clary se asombró de la sinceridad de las palabras de Jace.

Asintió lentamente.

-Tessa, no olvides que con esta estela que hechicé, podremos hablar tu y yo. Te mantendré al tanto de todas las novedades que nos podamos encontrar allá.

-¿Recuerdas el lugar? -preguntó Jem, mientras Emma se afirmaba a su cintura.

-Tengo recuerdos lejanos. Estuve allí hace más que 500 años, pero sé muy bien como llegar hasta Sebastián.

Alec suspiró. No quería admitirlo pero estaba aterrado. Lo que iban a hacer era una completa locura. El Infierno era gigantesco ¿ cómo iban a encontrar a Sebastián? Y aunque lo encontraran, ¿qué certeza tendrían de que Sebastián no intentaría matarlos? Secó sus sudorosas manos en la chaqueta.

¿ Y si no podían volver?

-Juliette, creo que deberías aprender a controlar tu mente para estar lista - le aconsejó Tessa, llevándola a un lugar apartado - La mente puede hacer cosas inimaginables con entrenamiento. Por si se complican las cosas, deberías estar consciente de que tu mente puede dar vida y quitar vida. Es el precio de ser la fuente de energía vital.

A Juliette se le encogió el estómago. ¿Matar con la mente? Su cuerpo se estremeció por completo.

Clary, con su estela, se acercó al borde del inmenso ventanal de la biblioteca. Recordó el brillante cabello plateado de su hermano, esas manos toscas y ásperas, llenas de marcas desvanecidas. Su porte y actitud desafiante. Y el portal se abrió.

Jia recorrió el Instituto de arriba a abajo, buscando a los jovenes Lightwood. No tenía un buen presentimiento de eso. Pero, al pasar por fuera de la sala de entrenamiento, vio al joven Julian Blackthorn.

-Jules- le llamó con cariño- ¿Sabes dónde están todos?

-Están en la biblioteca. Emma no ha querido decirme nada, a sí que sé que es algo peligroso- resopló el chico, extrañado.

Emma jamás se había comportado de esa manera, al menos no con él.

Jia mostró una sonrisa agradecida y dio grandes zancadas hacia la biblioteca, con Jules siguiéndole los talones.

El Portal estaba listo. Decidieron que Clary lo haría antes que Magnus, pues era un completo misterio si los poderes de Magnus tenían la misma intensidad en el Inframundo.

-Tu... Yo... y un millón de almas malvadas e inicuas... ¿No te parece romántico? - preguntó Simon, tomando la mano de Isabelle.

Ésta le sonrió.

-Me parece muy tentador, Lord Montgomery.

Magnus y Alec cruzaron el Portal, justo en el momento en que Jia abría la puerta.

-¿¡Qué es esto?! -dijo indignada.

Jace tomó a Clary y a Juliette de la mano y las arrastró por el portal.

-Jia, déjame explicarte- dijo Tessa, interponiéndose entre ella y el Portal.

-Somos completamente responsables de ellos, pues viajan con nuestro consentimiento.

E Isabelle y Simon fueron los últimos en cruzar.

Y el Portal se cerró tras ellos.

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Hola!... Perdón, sé que me he demorado mucho en subir, pero estaba 0 inspiración... sabía lo que tenía que escribir pero no sabía cómo hacerlo... en fin, si quedó un poco vago.. lo lamento...

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Zuperizzy fuera, paz y Carpe Diem!