Quiero abrir los ojos pero están tan pesados que me esfuerzo en separar mis parpados. No tengo que verme en un espejo para saber que están hinchados por todas las lágrimas que expulsaron anoche. No recuerdo a qué hora caí dormida, solo siento el extremo cansancio y las bolsas debajo de mis ojos.
—Artie, dice mami que te levantes a prepararle una sopa de pollo. —dice Robert del otro lado de la puerta.
Inmediatamente, busco mi celular para mirar la hora. Debe ser súper mega híper tarde si Robert está despierto.
7:00 A.M.
— ¿Robert? ¿Estás bien? —digo estrujando mis ojos. — ¿Qué haces despierto tan temprano?
—Los quejidos de mamá me despertaron. Levanta tu flácido trasero y prepárale la sopa. Haz que se mejore pronto, no soporto más.
Su voz ronca solo destila fastidio y desprecio.
— ¿Qué es lo que tiene la doña? —digo buscando mi toalla entre la pila de ropa sobre la silla del escritorio.
—Le cayó mal el pan con jamón que traje ayer... Seguro se comió el que se me cayó de camino aquí...
Al oír tal barbaridad, inmediatamente dejo de hacer lo que estoy haciendo y corro hasta la puerta. La abro y encuentro a mi obeso hermano mayor, recostado en la pared frente a mí. Tiene la cabeza rapada y sus labios están todos resecos. Tiene su camisa favorita, que por cierto, le queda demasiado pequeña. Puedo ver su barriga llena de pelos y es simplemente horrible.
— ¿Cómo pudiste siquiera recogerlo del piso, asqueroso?
—No iba a desperdiciar. No hagas tanto drama.
—Claro que hago drama, estúpido inepto. —comienzo a golpearlo en la cabeza. —Sabes que mamá no puede enfermarse por sus problemas de hipertensión y esas cosas...
— ¿Qué tiene que ver la hipertensión con el estomago? —dice defendiéndose de mis nudillos.
—Da igual, estúpido. Sal de mi vista.
Corro al cuarto de mi mama y ella está en ropa interior con el ventilador de techo a máxima potencia y el portátil a sus pies, a máxima potencia también. Esta cantando la palabra "Ay" en todas las melodías que su mente le permite recordar.
—Mami, ¿qué te pasa?
—Ay mi hija, tengo un dolor terrible en el estómago y calor insoportable. Tuve que quitarle el abanico a tu hermano.
—Wau ma'. Seguro estás intoxicada. Te traeré la sopita y algo para hidratarte.
—Si Artie, por favor. Te lo agradeceré.
Vestí el robusto cuerpo de mi madre con sus prendas más holgadas y frescas. Su pecho pecoso no paraba de sudar y de subir y bajar de manera exagerada. Mi mamá cuando se enferma tiende a fingir que esta moribunda. La alimente de sopa y la hidraté. En el proceso me han dado las 9:00AM. Lo que significa que estoy tarde para trabajar. Tardaré otros veinte minutos en arreglarme y llegar.
Me baño lo más rápido posible, me visto con un Tshirt rosa y unos shorts desteñidos. Arreglo mi pelo en una prominente cola de caballo y salgo a la calle sin una sola gota de maquillaje.
En mi camino al local, suena mi celular. Estoy buscándolo exasperada, estoy casi corriendo para intentar llegar a las 9:30.
— ¿Hola?
—Enana, soy yo. Discúlpame por lo de anoche en serio. No debí beber antes de verte.
Me detengo en seco, haciendo que las personas que vienen caminando tras de mi deban detenerse también.
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LA TRIVIAL HISTORIA DE LA VENDEDORA DE POLLO FRITO {Lee Jong Suk} ♥
FanficArtemisa, una joven de 18 años obligada por su situación a trabajar en un restaurante de pollo frito, acarreando los problemas de su hogar con ella. Su vida toma un poquito de emoción cuando conoce al sobrino de su jefe, Jong Suk. Un joven carismáti...