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6 de octubre de 2017

La lluvia caía mientras Matthew se encontraba en un bar tomando una cerveza, era la primera vez que tomaba y se estaba acostumbrando al sabor de ésta. Había ido al lugar con Katherine pero ya la había perdido de vista, seguramente la pelirroja ya halló a Will como quería.

Observó la hora en el reloj que se encontraba detrás de la barra, 01:10 am. Tenía la vista media borrosa pero no tanto como para no darse cuenta de que ya era tarde, tal vez no debía haber salido hoy y menos tomar sabiendo que volvería a casa solo.

Le dió el último sorbo a la cerveza y la dejó sobre la barra. Comenzó a barrer el lugar con la mirada buscando a su amiga para avisarle que ya se iría pero no la encontró, en su lugar encontró a Kaytlin bailando junto a David y no pudo evitar pensar en Harry, tal vez era el alcohol o la lluvia que lo ponía melancólico pero lágrimas comenzaron a caer lentamente.

¿Por qué Harry no lo amaba? ¿Qué había de malo con amar a un chico? ¿O caso era que no lo podía amar a él solamente?

No se llora en el club, hey hey — rió Katherine abrazando la espalda del chico de ojos verdes.

Matt rió levemente, secó sus lágrimas y dió media vuelta para observar a su amiga quien era más que obvio que se encontraba borracha.

— Si quieres irte puedes hacerlo — Will se acercó a ellos sonriendo de lado y tomando a Katherine de la cintura —, yo me encargo de ella, no te preocupes.

Matt asintió y llamo al barman, pago las tres cervezas que había tomado y pidió otra.

El chico rubio detrás de la barra le tendió la cerveza, tomó el dinero y desapareció de su vista. Matthew tomó la nueva cerveza y salió del lugar, había olvidado su chaqueta de cuero pero luego le mandaría un mensaje a Katherine para que se la llevara hasta su casa.

Poco le importaba estarse mojando, cada cinco pasos tomaba un sorbo de su cerveza y reía solo. Pasó frente a uno de los supermercados de los padres de Harry y sollozo. Era hora de buscar respuestas a todo, terminó de tomar la bebida, tiró la botella en el contenedor del negocio y camino con los pasos más firme que podía dar hasta la casa de su mejor amigo.

Miró la hora en su celular, 02:00 am y tocó la puerta. Luego de un par de minutos ésta fue abierta por un chico de descendencia asiática quien tenía el ceño fruncido y no vestía más que unos pantalones de deportes color negro junto a una remera del mismo color.

— ¿Matt? — pronunció confundido.

El chico de ojos verdes hizo puchero y comenzó a sollozar antes de caer de rodillas.

— ¿Por qué? — dijo abrazándose a las piernas del mayor.

— ¿Porque qué? — Harry se agachó e hizo a Matthew levantarse.

— ¿Por qué no me amas?

— Aquí vamos de nuevo — el chico más bajo rodó los ojos.

— Sólo dímelo y me iré.

— Matthew, no tendremos esa conversación ahora que estás ebrio, ¿qué te sucede? Tú nunca tomas — Harry pasó su brazo derecho por la cintura y comenzó a caminar hasta el cuarto de invitados ya que sospechaba que si lo llevaba a su habitación Matthew podría resbalar por las escaleras.

— Y-yo no lo s-sé — Matt rió por sobre sus lágrimas —, eres tan lindo.

Harry rió y abrió la puerta de la habitación antes de depositar a Matt en cama.

— Hora de dormir, señor Daddario.

El menor rió en voz baja y tomó a Harry del brazo cuando éste buscó separarse.

— ¿Puedes dormir conmigo? Si no me levantaré y daré vueltas por toda la casa.

Shum hizo una mueca parecida a una sonrisa y se acostó al lado de su mejor amigo. Matt apoyo la cabeza en el pecho de Harry y en cuestión de segundos se quedó dormido, no sin antes decir te amo, Harry pero el chico fingió que no lo había escuchado y se limitó a ver como Matthew Daddario babeaba su camiseta.

¿Qué diablos haría mañana?

FRIENDS, shumdario.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora