Jungkook miró a Jin quien se encontraba extremadamente curioso escuchando la historia de como había conocido a un chico que parecía ser fisicamente su antónimo pero a la hora de hablar ser exactamente iguales.
¿Era asi el amor? Se sentía como una fusión entre el bien y el mal, ambos habian pasado la semana entera hablando y aquellos sentimientos de soledad habían salido desde lo mas profundo de su corazón a travez de la red social por la cual hablaban todo el día y aunque sonara extraño parecia sanar sus heridas dejando solo cicatrices viejas.
Park Jimin también se sentia solo, marginado. Park Jimin también escapaba de la realidad con la música clasica. Park Jimin tenía una sonrisa angelical y sufria por pecados ajenos, por la avaricia de sus padres, por la maldad de sus compañeros y por lo mala que había sido la vida con Jungkook. Park Jimin era un ángel caido del cielo y Jungkook no había mas que lamentar su caída y principalmente haber caído frente a él, no se consideraba una buena persona, estaba roto y con marcas en sus muñecas, pero Park parecía ser ciego a estas y se esforzaba en reconstruir cada parte de Jungkook como si hubiera nacido para ello.
Jeon nunca era tomado en serio por sus parejas, estaba en un punto donde era consciente de eso y solo se dejaba usar. Se acostaban un tiempo y se iban llevándose con ellos parte de la esperanza que Kook albergaba, dejando en su lugar solo las mentiras y las falsas promesas plasmadas en su corazón que poco a poco se hacía pedazos. Estaba cansado de ser un puto ave fénix. Ya no quería renacer más.
No había pasado mucho tiempo cuando Jungkook se sentó mucho mas ansioso que de costumbre en el divan.
—Jin, estoy asustado.— El mencionado alzó la ceja indicando que continuará hablando viendo como este se tensaba y sus pies golpeaban cada vez más rápido el suelo.—No quiero enamorarme.
—Estar asustado por amar... ¿No se trata de eso estar vivo Kook? La decisión es tuya después de todo... Podrías alejarlo y suicidarte como siempre indicaron tus planes o puedes arriesgarte y probar un poco más lo dulce que puede ser la vida.— Dijo sonriendo con nostalgia alentándolo, Jeon pensó que la sonrisa de Jiminie era dulce. Ya no habían planes desde que él había aparecido de la forma mas inhóspita, todo se había ido a la mierda, incluso su fría personalidad amenazaba con desaparecer cuando se encontraba sonriendo pensando en él o tratando de mejor forma a las personas que lo rodeaban.
Esto no pasaba desapercibido por las personas que felicitaban a los padres de Kook como si hicieran un buen trabajo. "Idiotas" pensó Kook, cualquiera sería incapaz de no sonreír teniendo a su Jiminie adelante o escribiéndole.
¿Su Jiminie? No se cuando fue que había adoptado ese apodo para referirse a Park, sabía que este era gay y que no tenia pareja, pero desde que una vez que estaban hablando por teléfono y Kook dijo algo gracioso el mayor dijo "Sos tan lindo, mi Kookie." y nuevamente esa sensación le dio ganas de llorar.
¿Era Kook realmente merecedor de aquellos labios? ¿Podía llegar a darle la felicidad que Jimin merecía? Ese tipo de preguntas lo abrumaban, si era un sueño no quería despertar jamás. Jeon sabía que era atractivo pero también sabia que era un completo idiota y que tenía la costumbre de alejar a las personas por miedo a volver a ser lastimado, menos a Park que parecía adherirse más y más a él como una goma de mascar en su corazón. Jimin por su lado se preguntaba porque no había viajado antes a la capital a conocer a Kook, porque el destino había hecho sufrir tanto a alguien que tenía tanto futuro por delante, pero por otro lado se preguntaba como era que alguien tan hermoso fuera gay y se demostrara tan interesado en él, quien antes de conocerlo no podía mirarse al espejo sin llorar al punto de odiar sus curvas, sus cachetes, sus labios, todo su físico.
Físico que Kook contemplaba como si fuera una obra de arte que no podría tocar en su vida.
"Jamás se fijaría en alguien como yo... pero quiero intentarlo." pensaron ambos adolescentes al mismo tiempo.
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Efímero [KookMin]
Fanfiction¿Puede una sonrisa cambiar tu vida de un momento a otro? ¿Puede esa misma sonrisa llevarte del cielo al mismo infierno? Las almas gemelas existen y Jungkook estará dispuesto a todo una vez que la encuentre.