Anestesia✝

Capitulo 2: "Me llamo Kellan Luther."

Primer día de la semana.

Hoy es el infierno mismo. ¿Saben por que? Fácil. Es lunes.

LUNES.

Jodidos lunes.

No odio los lunes en específico. Sólo esta semana. Y también los otros lunes. Tengo que organizar todo para los estúpidos estudiantes que ingresan este año. Urgh.

Digo si vas a mostrar la universidad ah los nuevos estudiantes hay que verse bien, ¿Cierto? Pues me vestí con un atuendo que me hiciera ver bonita. Bonita en el sentido de tierna y guapa no con el atuendo de "Ven y follame" lo siento pero yo no soy así.

Me veía bien, es genial.

Baje y me encontré con Adrianne, se veía hermosa. Maldita perra. Pero no es ninguna puta, es casi mi hermana así que es hermosa.

-Adrianne, te ves genial -Le dije.

-Aileen, ¿Piensas conquistar aún chico nuevo hoy? Te ves genial. -Me sonroje, si, me sonroje por lo que me dijo mi mejor amiga y no, no soy lesbiana.

-Gracias, es hora de irnos. -Suspiro.

-Vámonos.- dijimos ambas mientras cerrábamos la puerta del departamento.

Mientras caminamos al instituto todas las miradas estaban puestas en ambas. Si, odio ese tipo de atención.

Al llegar me sorprendí al ver gran cantidad de nuevos alumnos. Ese día venían los nuevos alumnos de Sistemas computacionales y lengua.

El martes los de química.

El miércoles las perras de belleza.

El jueves los chef.

Y los viernes los de Mecadotecnia. Si, los mejores universitarios. Siento que me caerán bien y ni crean que me caerán genial por ser del mismo taller que yo.

Luego entro Calvo. Si, el director de la universidad. Calvo. Que cool.

-Bueno, bienvenidos sean todos nuestros nuevos alumnos. Espero y se sientan bien, hoy todos ustedes son los alumnos que ingresarán al taller de Sistemas computacionales y los de Lengua. En el transcurso de esta semana todos los nuevos alumnos estarán aquí. Mañana llegan los de química. El miércoles las chicas de belleza. El jueves los chef y el viernes los de Mecadotecnia. -Dijo señalando a cada alumno según su respectivo taller.- Así que probablemente ustedes serán compañeros. Espero y se lleven bien. Ahora los alumnos de tercer curso les mostrarán la estancia de esta institución. Unos llevarán a los nuevos de primero, otros a los de segundo y otros a los de tercero. Bienvenidos. -Dijo, mientras el aula se llenaba de aplausos.

Bufe. Era hora de mostrar la universidad a los chulos. Urgh.

A Adrianne y a mi nos toco un grupo de chicos, si todos eran hombres.

Y ni siquiera me dejaban explicar ya que todos hablaban que si no quería salir con uno de ellos. Estúpidos hijos de la fruta. Luego de terminar todos se fueron a sus respectivas aulas.

Ya era la hora de la salida. ¡Wu! Estaba que brincaba de felicidad pero luego me acorde que mañana había más alumnos y uf. Que infierno. Adrianne me aviso que se fue con Josh a una fiesta y tal vez llegará tarde y la vería el día siguiente, típico. Me urgía un novio. Justo cuando emprendía un nuevo camino a casa alguien me toco el hombro, haciendo que esta persona quedará justo enfrente de mi. Era un chico nuevo. ¿Qué no veía que no quería ver a nadie?

-Hola. -Me dijo con una gran sonrisa. -Me llamo Kellan Luther. Un gusto -Dijo dándome la mano, lo cual acepte.

Era lindo.

-Hola, Aileen Benson. -Sonreí.

-Hum, así que ¿Eres del tercer curso, eh? -asentí- ¿En qué taller vas? -me pregunto con curiosidad,

-Mecadotecnia. -Dije orgullosa.

-Es genial, yo quede en sistemas computacionales, es patético. Trato de convencer a mi padre de que me cambie a Mecadotecnia. -Me sonrió- Quiero inventar cosas nuevas. -Sonreí.

-Yo inventare la cama-baño. Sería un nuevo invento que cambiara al mundo y a la ciencia. -Río a carcajadas, si que era lindo. -¿Que te parece gracioso?

-Tú. - lo mire confusa.

-¿Te parezco graciosa? -Negó con la cabeza. -¿Entonces?

-Me haces reír. Eres genial. Y linda. -Wow esto ya era coqueteo.

-¿Intentas coquetear conmigo Luther?-Río.

-Sólo si usted me lo permite señorita Benson. -Reí.

-No, no se lo permito. Ahora debo irme. -me detuvo.

-¿Y si te acompaño? Soy nuevo, y me mude a un nuevo vecindario. -Negué.

-Por mi puedes perderte. -Ambos reímos.

-Eres mala. Pero esta bien puedes irte, ya conseguiré salir contigo y llevarte a casa. -Me guiñó el ojo.

-Ni en tus mas salvajes sueños. -Me miró pícaramente.

-Tal vez seas tu la que los protagonice. -Me sonroje.

-Tal vez deberías alejarte de mi. -Le dije mientras corría, y el intento alcanzarme pero no lo logro, ya que se tropezó y callo al suelo. No pude evitar reírme. ¿Así o más pendejo? Será estúpido.

-¡Suerte con eso, Aileen Benson! ¡Ya no podrás separarte de mi! -Grito, mientras intentaba levantarse. No pude evitar sonreír.

Cuando llegue a casa lo único que hice fue pensar en Luther. Mierda y más mierda. No.

No podía enamorarme de el.

Pero, ¿Cómo no fijarse en semejante preciosura?

Tenía el cabello negro obscuro, un cuerpo tremendo, una sonrisa que uf, si fuera paleta estuviera echa agua y ojos marrones cautivadores. Sí marrones, no todos los príncipes tienen ojos de color señores.

Todo un galán.

Pero no, no podía enamorarme.

Pero no es un imbécil. Un jodido imbécil.

¿Primer día y intentando coquetear con una desconocida? Piensa, joder.

Esté de seguro quiere darme duro contra el muro, no se lo permitiré.

Estúpido.

Imbécil.

No te saldrás con la tuya Luther.

No soy otra típica chica a la cual puedes abrirle las piernas. No soy otra chica más.