Me quedo parada mirando a Brad, todavía no he asimilado la magnitud de sus palabras. Estoy desando ser su novia, chillaría los cuatro vientos que sí, que cómo me iba a negar a Bradley Simpson, y más sabiendo su pasado.
Pero por extraño que parezca no reacciono y me mantengo mirando a Brad que el pobre parece que se desespera. Me sigue mirando, pero sus ojos ya muestran tristeza por el miedo de ser rechazado.
-Brad, yo...-consigo decir.
-Si no quieres no tienes que decir nada.-me dice Brad a la vez que suelta mis manos.-Lo entiendo, que no quieras estar con una persona como yo, te mereces más, en serio.-termina diciendo.
-No, no es eso.-le contesto.-Es que no me esperaba que llegaras a pedirmelo.-le digo, y continúo.-Brad, para mí tu eres mi todo, me levanto por las mañanas pensando en tí, en porqué no me llamas o no me has dejado un mensaje. Me preocupo cuando no sé nada de tí, e incluso cuando tú te has portado fatal conmigo y no te lo mereces.
Eres la primera persona a la que he besado, el primer chico que he dejado que entre en mi habitación, y el único al que le perdonaría casi cualquier cosa con tal de verlo sonreir y tenerlo a mi lado.-sigo diciendo ya con lágrimas en los ojos.-Lo que pasa es que no me considero lo suficiente para ti.
Tu siempre vas con chicas guapas, con tipazos increibles, y yo... Yo no soy así, y no sé si... Cuando veas a las chicas y luego me veas a mí, te arrepientas de salir conmigo y eligas irte con ellas; porque Bradley, si haces eso, yo no sé lo que va a pasar conmigo.-termino diciendo en apenas un susurro con los ojos colmatados de lágrimas.
-Entonces.-dice Bradley temeroso.-¿Tú me quieres?
-Más de lo que podría soportar.-le contesto a la vez que siento que vuelve a cogerme las manos.
-Con eso me basta.-termina diciendo a la vez que coge delicadamente mi rostro para poder verlo.
Lentamente, sube las manos a mi cuello y con una de sus manos acaricia mi mejilla, yo elevo mis brazos a su cuello y acorto la distancia entre nosotros.
Muy poco a poco, nuestras bocas se acercan hasta que al final culminan en un tierno beso, propio más de unos niños que de unos adolescentes necesitados.
El tiempo parece pararse, solo estamos Bradley y yo, y no necesitamos a nadie más. Sin darme cuenta, Brad baja una de sus manos a mi cadera para que me acerque más a él.
Como instinto doy unos pasos hacia atrás, tirando del cuello de la camisa de Brad para que me siga. Unos pasos después doy con el filo de la cama y caigo de espaldas a ella.
Brad me sigue y se coloca encima mío haciendo que suba la temperatura de lo que en principio eran unos tiernos besos.
En uno de estos besos Brad deja de besar mis labios y comienza a dármelos por la mandíbula bajando lentamente. Me pongo alerta porque no quiero sobrepasar mi límite pero ahora no puedo reaccionar.
Brad continúa bajando y con una de sus manos sostiene el bajo de mi vestido haciendo ademán de subirlo. Mi alerta se enciende y rápidamente cojo su mano para desviarla.
-Lo siento princesa.-me susurra en un medio gemido todavía a unos centímetros de mi cara y encima mío.
Tras decirlo Brad se separa y se sienta al lado mío y comienza a tocarme el pelo, ahora sin el sombrero que yace en el suelo debido a nuestro repentino calentón.
Yo todavía estoy bocarriba, respirando por la boca un poco exausta, miro a Brad y me comienzo a sonrojar lo que hace que me sienta tonta.
-No tienes por que pedirme perdón.-digo un poco avergonzada mientras me giro para ponerme de lado de espaldas a Brad.
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Con miedo a equivocarme (Bradley Simpson/ THE VAMPS)
FanficDesde que Brad apareció esa mañana en la playa nada ha vuelto a ser lo mismo, una vida que da un giro de 180 grados no puede acabar bien, y menos si nunca has vivido grandes emociones.