Andrew.
Estoy en la mierda, se llevaron a Ali. Mis padres no han hablado de nada conmigo. Peter esta en la esquina de mi habitación comiendo un paquete de Doritos.
La cabeza me da vueltas y no se que rayos voy a hacer. Me paro de la cama con brusquedad y me pasó la mano por el pelo en un intento de desestresarme.
—Hermano tienes que calmarte—musita Peter.
—¡¿Como quieres que me calme!?—grito y jalo mi cabello.
—¡Se llevaron a Alice!—Es mi imaginación o te gusta Alice.—me mira burlón y se ríe mientras termina sus Doritos.
Ruedo los ojos y el hace una bola la envoltura de los Doritos. La tira en el cesto y se lame los dedos. Peter es mi hermanastro, mi padre tuvo una relación previa y de ella nació Peter. Siempre me consideró su hermano propio y yo igual.
Entonces escucho ruidos en la sala y decido salir a buscar a mis padres.
Cuando llegué a la sala mis padres discutían ambos de pie.
—¡¿Que sucede!?
Ambos se miran indecisos y veo sus respiraciones agitadas y profundas.
—Tu madre y yo discutiamos sobre lo sucedido con Alice—dice papá
Mis ojos se abrieron sorpresivamente y de inmediato digo:
—¿Y que decidieron? Vamos a ir por ella ¿verdad?
Ambos comparten una mirada y cerré mis ojos un instante.
—No exactamente...
—¡¿Que!?
—¿Te importa?—dise mi madre finalmente.—Es una bruja y esta con los suyos ahora.
—¡Tara Mikaelson!— le reprende mi papá.— ¡Ese no es tu asunto!
— No puedes culparme por decir la verdad Aarón.
— Escucha hijo, es arriesgado que nos pongamos en riesgo por ella, esta por su cuenta.
—No podemos dejarla ahí, pueden hacerle mucho daño. Y no lo permitiré. Ustedes pueden irse al demonio.
Mis padres abren los ojos con sorpresa y mi madre contiene las ganas de golpearme.
—¡Andrew!
Sin más que decir me alejo a la calle y Peter se va detrás de mi.
°•~*~•°
Pateo un árbol y jalo las hojas de los árboles, estoy furioso por la actitud de mis padres. Ellos deben ayudarla.
...
Tal vez Peter tenía razón, tal vez lo que siento por Ali es más fuerte. Debí saberlo desde que la bese en el santuario.
—¿Que piensas hacer hermano?
—No lo sé, pero no dejaré que Ali muera. Es una promesa.
Peter se ríe y muerde su manzana verde. ¿Que el no piensa en otra cosa que no sea comer?
Agito la cabeza y Peter me da una idea.
—Puedes hablar con los chicos.
—¿Quienes?
—Ya sabes tus amigos.
—Estas loco, ellos jamás aceptarían.
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Luna ©
FantasyHay un mundo oculto dentro del nuestro. Historia en fantasía y magia . Derechos de autor reservados prohíbe la copia y distribución parcial o total de la historia. Escrita por la autora : Sofía Quiroz