Dex Darren es el guitarrista principal de la famosa banda The Death Collectors y sabe que lo tiene todo.
Fama, dinero y mujeres son cosas que le sobran y está bien con ello. Disfruta la libertad y el poder ser irresponsable cuando quiera, el compro...
Nunca pensé que tendría la inspiración de nuevo para seguir escribiendo. Al menos no pronto o en varios años, todo ha cambiado tanto que cuando me vino la inspiración me quedé así O.O ¿Qué sta pasando doctor garsiaaa?!! XD Porque debo decir que ya no soy la misma chica que era cuando empecé a escribir esto. Pero sigo siendo la misma en lo de querer terminar todo lo que inicio y hacerlo lo mejor que puedo, so intentaré terminar. A mi ritmo porque escribo para mí así que puede que esto tarde pero vamos a darle final e historia a todos desde Dex hasta Theo. Si alguien sigue por aquí, ¡Gracias! Si alguien aparece ¡Bienvenido! Y si alguien se rindió ¡Lo siento! XD
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Habían pasado más de dos semanas. Dex encerraba con un marcador imaginario los días en su calendario. Dos semanas en las que Mack y él apenas se habían dirigido un par de saludos de cortesía y miradas tensas. Se estaba cansando. Desde ese día no había dormido en la habitación de hotel que compartía con ella, siempre se aseguraba de que ella llegara y después se escondía en la estrecha habitación de su autobús, como un maldito caracol que le temía al mundo Dex tenía miedo de la realidad. De su realidad con Mack, porque después de lo que pasó esa noche no tuvo más dudas de que lo que sentía por ella iba mucho más allá de la amistad. Cuando la besó... todo su cuerpo se iluminó como si cientos de fuegos artificiales se hubieran encendido por todos lados.
Pero la había lastimado.
La había asustado.
Y no podía perdonarse por ello.
Así que como el hombre cobarde que era se encerró en el jodido autobús a escribir canciones para ella. Diciéndole que lo sentía, confesando sus sentimientos, gritando que estaba tan malditamente asustado de perderla, todas esas canciones se acumularon una tras otra. Pero había llegado a su límite, lo supo cuando después de un ensayo Theo, Ray y Jas lo acorralaron dentro de su camerino con miradas molestas en sus rostros.
—Ella tiene que irse, —Ray fue el primero en hablar cruzando sus brazos sobre su amplio pecho. El corazón de Dex se detuvo cuando se dio cuenta sobre que hablaba.
—No, —su voz salió algo ronca, algo se había trabado en su garganta al entender las palabras de Ray. —Ella... no puede irse.
Todos guardaron el silencio por un par de segundos.
—¿Qué fue lo que pasó entre ustedes? —finalmente preguntó Theo suspirando. —Y no intentes decir que no fue nada Dex, porque maldita sea parece que los dos se han estado marchitando estas dos semanas. Mack es mi amiga y tú eres como mi hermano, verlos así es... —Theo sacudió la cabeza y sus hombros se hundieron. —Si algo sucedió, si estar cerca los afecta de forma tan negativa creo que estoy de acuerdo con Ray. Creo que lo mejor para todos es que ella se vaya lejos.
