XIV

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No tenía sentido que me haga sentir así de celoso. Por ejemplo, Taehyung y Hoseok son mis amigos, y Namjoon  también es alguien que me gustaría llamar amigo. Y Jaeri y  Nabi también son mis amigas, me gusta cuidarlas y ayudarlas. Me gusta proteger a Jaeri y aconsejarle algunas cosas o enseñarle, me gusta salir a comer con ella porque le molestan los ruidos que hago al comer, o que no le preste atención o porque no le llevo las frituras que le gustan y que Namjoon le ha prohibido. Y con Nabi me gusta hablar, escuchar su voz y su risa contagiosa, me gusta ver cómo juega o cómo se enfurruña cuando las matemáticas se le hacen demasiado difíciles, o cuando iba a su casa y le daba toda mi atención. 

Pero no debería sentirme así de celoso al ver que Nabi volvía a tener contacto con Cha Seowoo, porque por mucho que ella me guste yo soy sólo su amigo, y por ahora no puedo hacer nada por ello. Y aun así no puedo dejar de sentirme muy celoso porque el maldito se había conseguido mi número de teléfono y quería juntarse conmigo para tomar unos tragos y hablar de lo único que teníamos en común.

Y por estar tan molesto fue que no noté la carta que había en mi casillero, oliendo a bergamota y a mango, hasta que Taehyung la tomó y me la entregó.

  - ¿Y esto que es? ¿Una nueva carta de amor, Chimchim? ¿Se la piensas entregar a Na--? - Tapé su boca antes que dijera su nombre porque Yeeun estaba cambiando de salón en ese momento y el idiota alegre de Taehyung era demasiado ruidoso para este mundo, así que me mordió la mano.

  - ¡Agh! Idiota...- Me quejé al notar mi mano ahora llena de baba de alien y la sequé contra su playera de Under The Rose.- No sé de quién será

  - Hombree, ya es la cuarta en lo que va de junio... - Dijo mientras esperaba que sacara mis cuadernos y saludaba con una sonrisa a quien pasara a su lado.- ¿Cómo es que tú tienes tantas confesiones y a mí apenas los reportes de mis calificaciones?

  - No es como si quisieras muchas cartas... - Solté, riendome de él, y Taehyung enrojeció, riendo y cubriéndose el rostro con sus manos gigantes.- Sólo te interesan las de...

  - ¿¡Y piensas leerla?! - Me interrumpió, y seguimos hablando entre risas y bromas hasta que leí la carta. 

  - ¿Y? ¿De quién es?

  - ... Ni idea - Respondí, y luego miré a Taehyung.- Quiere que la vea en el paseo de los gingkos del Instituto, ¿Sabes dónde queda?

  - ¿Planeas ir a verla? - Preguntó Taehyung mientras seguía saludando a las personas que pasaban a su lado y que también le saludaban, y la verdad estoy tan mosqueado por lo de Cha Seowoo que pienso decirle a Taetae que sacará esa maldita sonrisa de su rostro porque miles de niños en África mueren cada día, pero luego pensé "Hey, no es la culpa de este chico que es un Rayito de Sol" y me fui calmando.

  - Sí, sería de mala educación dejarla esperando

  - ¿Quién crees que será?

  - No lo sé, pero se supone que quiere juntarse conmigo a la hora de almuerzo

  - Es para ahora entonces

  - ¿Qué? No, apenas sí son las once de la mañana... - Fruncí el ceño ante el error del Rayito de Sol, y él me miró confundido.- Ahora tienes Ensayo de Vientos y yo tengo Literatura Universal...

  - Amigo, ya son la una de la tarde y acabas de volver de literatura

Miré la hora en mi teléfono y luego la hora de la carta.

  - Oh, mierdaaa... ¡Taetae de mi vida! Mi dulce corazón de melocotón - Cerré mi casillero y luego intenté verme tierno para Taehyung haciendo aegyo, y conseguí que él se riera y luego apretó mis mejillas sin mucho cuidado. Ugh, eso duele como el infierno.

Bullied [[ ~ Park Jimin ]]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora