Keila River
Aria no había llegado a casa en toda la tarde, Roxbie se encontraba resolviendo un problema de álgebra sobre mi cama mientras yo veía una serie que según Aria y Roxbie era buena.
-Creo que tengo un flechazo con Bellamy.
-Aria y yo también, solo no lo mires tanto se desgasta y eso es malo.- dijo Roxbie mientras colocaba su lápiz en sus dientes.
Alguien tocó la puerta principal, y viendo a la enana tan concentrada en resolver su problema de álgebra, me levanté de la cama y caminé a la puerta de mi cuarto, posteriormente bajé las escaleras llegando a la sala y luego a la puerta principal.
Abrí la puerta, dejándome ver a Isaac, mi cara se puso más seria de lo normal y en cierto punto estaba molesta de que el estuviera afuera de mi casa con tanta naturalidad.
-Isaac, ¿Qué rayos haces aquí? Sabes que no eres bienvenido aquí, nadie te quiere. Solo las putas con las que te acues...
-Hola Keila- Aria salió de los arbustos, le sonreí y después volteé a ver a Isaac con cara de enfado.
-Isaac me trajo aquí y también nos llevara a casa de mi hermano.
-¿Desde cuándo le hablas a éste imbécil?- la interrogue, mientras veía a Isaac sonriendo egocentricamente observando a Aria. Algo anda mal.
- Desde hace una hora, es amigable y estúpido, pero al fin y al cabo amigable.
-Pasa- le dije a Aria, al ver que Isaac estaba apunto de entrar lo paré en seco- Aria, tú no.
-No seas inmadura y dejame pasar a tu casa.- me dijo Isaac, observó a Aria quien me observaba con ojos amenazantes, y solo por Aria, accedí a que esa bola de basura pasara a mi casa.
-Pasa.
Subí las escaleras dejando solos a Ari y a Isaac, entré a mi cuarto y encontré a Roxbie rayando frenéticamente una hoja de su cuaderno de álgebra mientras maldecía a todo lo que tenía escrito.
-Para. Aria acaba de llegar y con un invitado sorpresa.
-Que no sea mujeriego o le daré un sermón en la noche. Jesucristo ilumina a Aria.
-Es Isaac.
La enana salió disparada del cuarto, corrí para incorporarme a ella y después bajamos las escaleras rápido.
-¡Aria!- exclamó Roxbie y Aria le sonrió.
Salimos de mi casa, y me di cuenta de que había un auto negro estacionado enfrente la casa. Isaac y Aria fueron hacia el coche.
-Suban o llegaremos tarde a la casa de Leo, y no quiero que haya intrusos en ella.- dijo Aria mientras abrochaba su cinturón.
-Ok- dijo Roxbie y subió a la parte de atrás.
-Esto va a ser desagradable- dije mientras subía al coche.
Y después de todo arrancó.
°°°°°
Llegamos a una casa de paredes color arena, un lindo jardín bien cuidado y dos autos estacionados a un lado de la casa, era la casa de Leo. Pero definitivamente había un código azul.
Bajamos del auto en silencio. Isaac le dijo algo a Aria y solo logré ver la sonrisa egocéntrica de Isaac y los ojos amenazantes de Aria. No se despidieron y solo se fue mientras que Aria iba hacia nosotras. Caminamos hacia la puerta y tocamos, nos abrieron la puerta, dejando ver a Bill, un compañero y amigo de Leo.
-Hola chicas.
-Mi hermano me dijo que no había código azul ¡Carajo!- maldijo Aria y observé a Roxbie quien se encontraba en su celular desde que subimos al auto, me incliné un poco para ver lo que hacía.
La pantalla mostraba la cuenta de facebook de Jack. Acomodé mi cuerpo y giré mi cabeza en otra dirección ignorando eso.
Entramos a la casa y estaba muy desordenada. Había camisas y cervezas tiradas en el piso, también unos cuantos calzoncillos sucios y playeras de fútbol americano sobre los sillones y estanterías.
Solo había un lugar limpio ahí y era el rincón de Jeff, estaba todo acomodado y perfectamente organizado.-¡Que asco!- exclamó Aria. Vi que Roxbie guardaba su celular y hacía una cara de asco.- Leo, te dije claramente en "no código azul". Ahora mismo ese código azul es más falso que un futuro a su lado.
-En primer lugar, no eres mi mamá, y no tienes derecho a juzgarme cuando tu eres la que me visitas.- le gritó Leo. Todos los presentes nos quedamos callados mirando la escena de los dos hermanos mellizos.— ¡Yo nací primero!
-Por un maldito minuto. Eso no implica que tengas más derecho que yo.
-Dios, ya cállate- le ordenó Leo a Aria.
-El primero que se va a callar aquí eres tú. Todos tus amiguitos te van a ayudar a acomodar esta casa y ¡Tu no vas a replicar!
Todos se callaron y comenzaron a ayudar a acomodar la casa, incluyendo Roxbie y yo.
Alguien entró por la puerta. Era Cameron.
°°°°°
Después de terminar de recoger la casa, todo el ambiente se torno rosa y todos platicaban y reían.
Cameron llegó a mi lado y se sentó junto a mí.
-Después de la tormenta viene la paz.
-Ojalá la paz viniera sin que haya tormentas.
Y así platicamos durante tres horas, hasta que todos partieron a sus respectivas casas.
°°°°°
Idra💕
ESTÁS LEYENDO
Love and Friends©
Teen Fiction-La persona más alegre puede resultar ser la más lastimada. La persona más destrozada puede ser la más fuerte. Aquella que parece inquebrantable puede ser tan débil como cualquiera. Una sonrisa puede ocultar noches llenas de llanto y una lágri...