Capítulo 12

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Una advertencia...

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Cuando Magnus entró en el callejón sin salida, encendió una llama azul en la palma de su mano para alumbrar el camino. Al final había una puerta de madera vieja y pesada con un letrero encima que decía 'Mortero & Pistilo. Dispensario de Pociones' Este era el único lugar donde Magnus estaba seguro de que tendrían los ingredientes raros y especiales que necesitaba para cumplir su parte de la terrible negociación con Lucía. Era el único lugar que podía ayudarlo a recuperar a Alexander de manera segura.

Una pequeña campana sobre la puerta tintineó ruidosamente cuando Magnus entró en la tienda. Era un lugar fascinante, dos de las paredes de piedra estaban cubiertas de piso a techo con estantes oscuros, interrumpidos sólo una vez por una pequeña puerta que conducía a la habitación de atrás. Los estantes estaban repletos de libros, botellas de vidrio con diversos líquidos de colores, frascos de muestras, cráneos y otras curiosidades macabras. Colgando del techo había restos de hierbas secas y viejas jaulas de pájaros, algunas de las cuales contenían grandes cuervos negros que graznaban y se agitaban agresivamente cuando Magnus se acercó al mostrador.

-"Tranquilícense pájaros tontos, muestren respeto por el Gran Brujo de Brooklyn"- dijo un anciano mientras salía de la habitación de atrás- "Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que ensombreciste mi puerta Magnus Bane, desde que la tienda estaba en París, creo"

-"Janus Dark, no has cambiado un poco"- dijo Magnus mientras observaba el cabello largo y blanco del hombre, sus ojos oscuros y centelleantes se posaban profundamente en un rostro que mostraba los estragos de la edad avanzada. Magnus había sido un joven brujo cuando se había encontrado con Dark por primera vez, y se había preguntado por qué el brujo había elegido presentarse como un anciano. No había tenido el valor de preguntar entonces, porque Janus Dark tenía la reputación de ser un alguien muy entendido y muy poderoso que no soportaba tontos a la ligera.

-"Todavía no lo entiendes, Magnus"- el viejo rio suavemente- "Esta"- dijo indicando su apariencia con un ligero movimiento de su mano izquierda- "Es mi forma de esconderme a plena vista. Todos se dan cuenta de que alguien es joven y nunca parece envejecer, pero los viejos son invisibles, especialmente en este siglo obsesionado con la juventud. Ahora, ¿cómo puedo ayudarte?"

Magnus le entregó la lista de los ingredientes que necesitaba para el hechizo. Janus Dark se movió hacia una vela encendida en el mostrador antes de volver su atención a los artículos escritos con la elegante letra cursiva de Magnus- "Hmmm"- el viejo fabricante de pociones dijo frunciendo el ceño levemente- "Espero que sepas lo que estás haciendo Magnus. Sólo he visto una lista como esta una vez, hace siglos, y terminó muy mal"

-"Esto es lo que requiero Janus, y si no puedes proporcionarlo, iré a otro lado"- respondió Magnus con severidad. Ambos sabían que estaba fanfarroneando, que no había otro lugar que tuviera lo que se necesitaba, pero Magnus tenía que dejar que Dark supiera que estaba hablando en serio.

-"No hay necesidad de eso"- dijo el pocionista- "Tomará unos treinta minutos preparar tu pedido, por favor toma asiento"- Dark señaló al otro lado de la tienda, donde había una pequeña mesa redonda y cuatro sillas junto a una antigua chimenea de hierro. Frente a una de las sillas apareció un servicio de té de porcelana y una taza- "Sírvete un poco de té mientras esperas"

Danza Macabra - Danse MacabreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora