Cuarta parte de la serie 'La hora de las brujas'
Traducción del fic de webspinner2
Alguien del pasado de Magnus ha vuelto para perseguirlo, y es alguien a quien siempre quiso mantener lejos de Alec. Puedes elegir a tus amigos...
Fue Shivvy quien vio cómo la magia del portal comenzaba a arremolinarse en la pared de piedra de la parte posterior del jardín del Instituto. Ella corrió por el pasillo y salió del edificio a toda velocidad rezando para que todos regresaran sanos y salvos. Para cuando llegó a la pared, Jace, Clary, Alec y Magnus habían cruzado el portal y estaban en el proceso de sacudirse el polvo.
-"¡Están bien! ¡Están bien!"- chilló Shivvy mientras se arrojaba a los brazos de Alec. Tomó toda la fuerza de Alec y un poco de ayuda de Magnus para evitar que se desequilibraran y terminaran en el suelo.
-"¿Dónde están Catarina y Richelieu?"- preguntó Shivvy una vez que se había calmado lo suficiente como para mirar a su alrededor.
-"Richelieu está muerto"- dijo Alec en voz baja- "Catarina ha llevado su cuerpo a Mont Saint-Michel para su entierro"
-"¡Oh, no!"- exclamó Shivvy sus ojos brillando con lágrimas que se negó a derramar- "Lo siento mucho Magnus, sé que eran viejos amigos"
-"También lo siento demasiado calabacita"- dijo Magnus.
-"¿Calabacita?"- le preguntó Shivvy a su rostro expresando claramente su disgusto por este nuevo sobrenombre.
-"Bueno, no puedo llamarte galletita, eso ya está tomado"- dijo Magnus con una sonrisa extendiéndose por su rostro.
-"Shivvy, ¿dónde está el bebé?"- preguntó Alec, ansioso por abrazar a su hijo, ahora que habían regresado.
-"Oh, está bien, está con Isabelle y tu um... ¿madre?"- dijo Shivvy terminando su frase justo cuando se dio cuenta de que Alec no tenía manera de saber que Maryse estaba en el Instituto.
-"¡Mamá!"
-"¡Maryse!"
Alec y Magnus gritaron al mismo tiempo y tomándose de la mano corrieron hacia el Instituto desesperados por descubrir lo que Maryse sabía sobre el bebé, y lo que iba a decirle a la Clave. Jace y Clary intercambiaron miradas de preocupación mientras veían a Alec y Magnus desaparecer en el oscuro e imponente edificio. Este no era el regreso al hogar que esperaban, Jace sabía que a la Clave tendrían que decir algo, pero esperaba que tendrían unos días para resolver las cosas, decidir un curso de acción. Lanzando un suspiro y esperando que su parabatai fuera capaz de arreglar algo con Maryse, Jace rodeó a cada una de las chicas y se dirigió al Instituto. A pesar de toda la incertidumbre, este era su hogar y parte de él siempre estaría contento de estar aquí.
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