-Mi Dulce Tanatofobia- [MinYoongi]

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Un niño de no más de 6 años se acercaba a su madre, la cual estaba cocinando demasiado metida en lo que hacua, en cuanto escuchó el llanto de su hijo, dejó todo y volteó hacia el pequeño.

— Yoongi, cariño que sucede ¿por qué estas llorando?— Su dulce tono no habia logrado calmar del todo al menor, sus sollozos se escuchaban más fuertes.

— Mamá, y-yo... Yo no me quiero.. morir, no quiero, ¡no quiero!— Yoongi había comenzado a caer en llanto abrazándose a sí mismo con fuerza, su madre lo rodeó fuertemente con sus brazos intentando calmar sus ahora gritos, el padre de Yoongi y su hermano mayor habían ingresado a la cocina al escuchar el grito del pálido

—¿Yoongi esta bien?— Preguntó el papá del niño que se agachaba a la altura de su pareja e hijo acariciando la cabeza de este.

—Si, es solo un miedo pasajero, se le pasará cuando crezca...— susurró aquella mujer cargando a su hijo en brazos para poder llevarlo a su habitación. Debía descansar, después de llorar y gritar lo que pudo, cayó rendido en aquella cama.

Diez años después

— ¡NO! — sobresaltando a todo el salón, el pálido se levantó de la banca en donde estaba posicionado tirando sus cuadernos, lápices y cuanto tuviera en aquella mesa.

— YoonGi ¿Qué sucede?.— la maestra sabia que su alumno siempre estaba perdido en su clase, casi nunca prestaba atención o simplemente su vista se fjaba en la pared sin articular gestos o palabras, sus manos temblando al jugar con los lapices, sin embargo siempre fue un alumno destacable, no entendía el porqué de su comportamiento ahora.

— Me voy a morir... voy a morir, no quiero crecer, ¡no quiero llegar a mi muerte, no quiero!— Gritaba a todo pulmón el chico mientras comenzaba a sudar frío y su respiración era dificultosa, NamJoon se habia levantado de su lugar para abrazar fuertemente a YoonGi, no era la primera vez que él presenciaba sus ataques, pero esta era la primera vez que Yoongi había comenzado a rascarse tan fuertemente en sus brazos que le habían quedado rojos, se podía ver en su rostro la ansiedad y temor que tenia, eso ya no era normal. Lo cual no debería ser lo.

Mientras la maestra les indicaba a los alumnos quedarse en el aula, Namjoon llevó a Yoongi hacia la enfermería con el profesor detrás. El pálido se encontraba recostado en una camilla, en su rostro habían pequeñas lágrimas secas.

—Namjoon... Yo no quiero morir...— dijo en un débil susurro

—Tranquilo Hyung, usted no va a morir... Lo prometo— le habló de igual forma mientras veia que sus ojos se cerraban cayendo en un profundo sueño, no debí prometer cosas que no estaban a su alcance, por más que él deseara proteger a su Hyung de se terrible abismo al cual se sumerge día tras día, no puede.

El único capaz de salvarlo de su destrucción. Es él mismo.

Nueve años después

Yoongi se removía entre las sábanas de su cama, en su mente solo estaba el constante repetimiento de él mismo en su funeral, se veia sin vida, sus ojos cerrados y manos frias.

Despertó bastante agitado, su cuerpo temblaba, había comenzado a llorar, el brusco sonido que hizo al levantarse despertó a Jungkook, quien era su compañero de habitación en el departamento de los chicos

—¿Hyung? ¡Hyung!— saltó de su cama con rapidez al escuchar el ligero llanto de su mayor, se sentó en la cama del rapero atrayéndolo a su cuerpo acariciándo su espalda suavemente—  Tranquilo Hyung, solo fue una pesadilla, nada le va a pasar, nosotros lo cuidáremos, todo estará bien.

— No Jungkookie, nada estará bien, jamás lo estará, no con este absurdo temor.... Nunca.—  un lastimero gemido salio de sus labios hinchados por tanto morderlos al querer retener su llanto, estaba cansado de su miedo, estaba cansado que ese miedo le limitase todo, no podía llevar su vida normal, estaba cansado de tener que soportar sus ataques cuando estaba en una presentación o en un concierto, no podía hacerle saber a ARMY su problema, no podía

— Deje de pensar Hyung, sólo duermase, yo me quedare con usted para cuidarlo— las suaves caricias del menor hicieron dormir al pálido, a pesar de sentirse cómodo, no podía quitarse esa pequeña ansiedad que se instalaba en su pecho, y tampoco podia desaparecer aquella vocecilla que siempre lo había atormentado.

Oh si... Su dulce Tanatofobia

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—Antes de comentar algo, aquí YoonGi y NamJoon de conocieron desde la escuela y pese a ser YoonGi un año mayor que NamJoon, este cursaba su mismo grado.

— Varias cosas se verán modificadas y no serán tal cual en la vida real, por lo que por favor, abstenerse de comentar cosas relacionadas a sus personalidades, edades, cosas del grupo, etc.
 
Gracias.

‡JanetJany‡