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Empezamos a hablar por Whatsapp todos los días, se me hizo un vicio sus "Buenos días" es atento y muy lindo.

Ya no veía el colegio como algo aburrido, ya yo tenia un motivo por el cual ir, pero lo malo es que ya estamos en examen y ya se esta acabando el colegio, lo que significa que no lo veré mas hasta dentro de tres meses, En las vacaciones nos escribimos todos los dias y cuando no llegaba un "Buenos días" de él me sentía incompleta, cada vez que llega un mensaje de él, yo me emociono no sé por qué, Siempre pienso en él, si él estaba mal yo tambien lo estaba, ESPERA BETHANY, DANIEL TE ESTÁ EMPEZANDO A GUSTAR. Una noche me escribió y me dijo:
—Me gustas— -esa noche fue la mas feliz, nunca pensé que le gustaría, nunca pensé que me llegaría a gustar alguien despues de lo que pasó con Alex, fue muy duro de superar pero, Daniel se ve que es diferente sé que no me va a lastimar y sin pensarlo dos veces le envie- —tu tambien Me gustas—.

Cursamos el noveno grado y llegó el día mas esperado para los noveno, nuestra graduación 21 de diciembre, yo formé la fila para entrar al gimnacio y tomar mi diploma cuando miro para atras y alli esta él, con su sonrisa radiante y despreocupada esa hermosa sonrisa que daria todo por verla todos los dias, sin dudarlo fui decidida a abrazarlo y él me correspondió.
Al salir del gimnacio quise verlo por ultima vez pero no fue así, lo busqué pero nunca lo encontré.
Formé otra fila para tomarme unas fotos con mi familia —¿esta es la fila?— -una voz preguntó detrás de mí, me di la vuelta y es un chico de color piel como el papel, su cabello es de color chocolate oscuro, sus ojos son chocolates oscuro y bueno su aspecto no es muy atractivo que digamos- —Sí— -respondí dandome la vuelta- — yo ni queria venir a tomarme fotos, solo lo hice porque mi mama ya pago solo por eso— - solo me reí pero no me voltié a mirar- —Estamos hablando y no me e presentado,  mi nombre es Alexander— -Me extendió la mano y la estreche con la mia- — Mi nombre es Bethany—

Daniel y yo nos mandabamos cosas muy bonitas todos los días hasta que llegó el primer dia de febrero... No supe nada de él, eso fue muy desesperante, pasaron tres días y él no estaba.

4 de febrero, 2018
Hicieron una actividad de jovenes en la iglesia y fue muy divertido, me senté con chicas y chicos que no conocia, pero algo no estaba bien, hasta que vi al chico que una vez conocí en una librería...
Todos los recuerdos vinieron a mi mente. Yo iba entrando a una libreria de un centro comercial con mi hermana y su novio, miré todos los libros asi como un niño mira una juguetería todo era precioso, caminé hacia una mesa que tenia libros juveniles y encontré el libro que tanto buscaba se llama La Seleccion de Kiera cass, tomé el libro y una mano se puso encima de la mía, miré hacia arriba y me encontré con unos par de ojos miel mirandome, era un chico, su piel es de un tono blanco, su cabello desordenado de color castaño que por cierto se le ve muy bien, su cara con pocas imperfecciones y delicada sus labios de un color rosado palido —¿puedo agarrar el libro? Necesito mi mano tambien— —oh, si claro, disculpa— -agarré el libro y leí en la sinopsis, estaba impresionada porque pensé que este libro no llegaría aquí- —¿De qué se trata el libro? — me dijo aquel chico de ojos miel —Pues, toma leelo — le di el libro en sus manos y me dirijí a los estantes de libros y encontré la saga de hush hush, chille de la emoción y todas las personas se me quedaron mirando, agarré el libro pero para mi mala suerte estaba en ingles pero ya lo habia leido.

—Ese libro es fantástico ¿Ya lo leiste?— -me dí la vuelta y de nuevo era el mismo chico, tantos libros que estan aqui y quiere venir otra vez donde mi, no lo entiendo- — Si, ya lo leí ¿y tu? — — Si, yo tambien lo leí es muy bueno, me gustaría encontrar o conocer a una Nora— — oh, bueno, los nephilim no existen— — No hablo de un nephilim, yo hablo de una chica que sea como Nora en su forma de ser— — Espero que la puedas encontrar pronto — -dije devolviendo el libro a su lugar- —Pero creo que la acabo de conocer y la estoy mirando en este momento a los ojos— -tragué saliva y fruncí el ceño, esto de hablar con un extraño por mas atractivo que se vea no es muy bueno yo le ponia como 18 años, di dos paso atras- —Que tengas suerte con eso... Cipriano, adios— y me fuí casi corriendo donde mi hermana, esa noche repacé en mi mente todo lo acontecido y desde aquel día nunca lo olvide y quedó como mi amor platónico.

UN GIRO TOTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora