Capítulo 10°

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               Llegué del baño, no ví a Eric en la mesa - Debió ir al baño - pensé.
              Entonces un piano comenzó a escucharse y una gran luz lo iluminó ¡ahí se encontraba Eric tocando el piano!.
         Estaba muy sorprendida y también algo nerviosa, después que comprendí aquella situación. Eric se acercó, me regaló un ramo de rosas y después confesó sus sentimientos hacia mí.
- ¡Oh por Dios! - pensé - ¿Ahora que hago?.
            Hace unas semanas pensé en este momento, idealicé como sería y que respondería. Tomando en cuenta que nunca supe lo que Kyuhyun sentía por mí, yo tampoco nunca se lo dije y pues ahora, ahora el ¡se va a casar!...
- Eric - respondí - sé que eres una gran persona, aún no te amo pero por eso, con el tiempo lo lograré... - Entonces - interrumpió - eso significa que ¿me aceptas?.
- Sí, tontito. Acepto tus sentimientos.
Entonces hizo que me levantara y fuertemente me abrazó.
- Me haces muy feliz Jisoo, me encargaré ahora de hacerte muy feliz. Gracias por darme esta oportunidad.
- Está bien - susurré - pero ya suéltame, que me está comenzando a faltar el aire.
- ¡Oh! Lo siento - sonreímos los dos.
            No es que estuviese jugando con él o con sus sentimientos, en esos momentos realmente pensé que llegaría a amarlo tanto como a Kyuhyun.
          Llegué a casa y le comenté a mamá lo sucedido ;
- ¡Mamá!- exclamé - adivina ¿Quién ya tiene novio?.
- ¡¿Quién?! - sorprendidamente - ¡¿Tú?! - asentí tímidamente - ¡Oh mi niña! Que bueno, me alegro por tí. Ya era hora que me dieras esa buena noticia.
- Gracias mami, yo también espero que esto sea algo bueno.
- Verás que sí...
Será muy bueno, además ¡Tú y Kyuhyun hacen muy bonita pareja!.
- No, este...
¿Como te explico?...
Kyuhyun no es mi novio.
-¡Ah! ¿No?. Entonces ¿Quién es?.
- Se llama Eric, Eric Nam. Y es un compañero de trabajo, me a demostrado lo mucho que me quiere... - Y ¿tú - interrumpió mi mamá - ¿Qué sientes por él?.
Callé unos segundos - Bueno, es muy guapo - respondí - y hasta ahora se ha ganado mi cariño.
- Entiendo hija, pero...
¿Lo amas?.
- Con el tiempo lo haré.
- Y ¿si no lo logras?.
- ¡Claro que sí! Lo lograré.
- Bueno, espero y tengas la razón. Ojalá hayas tomado una buena decisión hija.
- No te preocupes mamá, confía en mí.
- Confío en ti, es solo que no quiero que salgas lastimada.
         Me quedé sin palabras ¡mamá tenía razón!, yo no quería salir lastima y mucho menos quería que alguien más sufriera por mi culpa.
         El tiempo siguió transcurriendo, cada vez parecía pasar más rápido. Los días para la boda de Kyuhyun se acortaban y mi noviazgo con Eric se extendía.
          Hoy, la tienda en la que suelo trabajar, cumplirá su 7° aniversario. Así que Kyuhyun ha organizado una gran fiesta en la noche para todos los empleados, todos saldrán temprano del trabajo y disfrutaremos de una gran velada.
       El reloj marca las 4 en punto, la tienda comienza   a cerrar y los empleados comienzan a salir. Cada uno irá a casa para descansar un rato y después cambiarse, para el gran evento.
        Aún quiero resolver algo antes de irme de la oficina, por eso me quedo un rato más. Me concentré tanto en lo que estaba haciendo, que no me percaté de la hora que era:
- ¡Oh por Dios! - dije sorprendida al ver el reloj - ¡Ya son casi las 7! ¡Quedé de ver a Eric a  las 7:30! Estoy justa de tiempo.
          Guardé todo lo que estaba utilizando, apagué la computadora y abandoné la oficina lo más rápido que pude. Al llegar al elevador me percaté que no llevaba el teléfono - seguro lo dejé en la oficina - pensé - por lo apurada que estoy, no me di cuenta.
            Regresé, abrí la puerta y busqué por toda la mesa, ¡ahí estaba!. Lo tomé, lo guarde en mi bolso y otra vez me dispuse a salir. Justo cuando cerré la puerta, Kyuhyun, quién tenía su oficina frente a la mía, ¡también estaba saliendo!. Estábamos frente a frente
- ¡OH! - exclamamos los dos al mismo tiempo - ¿Qué hace aquí? - sonreímos al darnos cuenta que habíamos pensado lo mismo.
- Tenía algunos pendientes - respondió él - Y ¿usted?.
- Yo también, necesitaba resolver algo.
- Oh, ya veo...
- Sí, bueno...
Me voy, ya se me hizo tarde.
- ¡Cierto! Hoy es la fiesta. La acompaño, también ya me iba.
- Está bien, vamos entonces.
      Comenzamos a caminar, llegamos frente al elevador y esperamos a que las puertas se abrieran. Cuando esto sucedió, nos subimos y comenzamos a  descender.
- ¿Irá a su casa? - preguntó Kyuhyun - Ó ¿De una vez irá al evento?.
- No, de hecho quedé con... - el elevador se paró de repente y la luz que alumbraba comenzó a parpadear, hasta que dejó de iluminar por completo - ¡Oh por Dios! ¿Qué está pasando?.
- Tranquila - tomó mi mano - el elevador se detuvo, algo quizá se descompuso. Pero todo estará bien - apretó el botón de emergencia - pronto vendrán por nosotros.
         Comenzaba a sofocarme, mi corazón latía muy rápidamente, tenía miedo de desmayarme. Sufro de un severo trauma a los espacios pequeños y muy encerrados, por eso estaba muy desesperada, el aire comenzaba a faltarme.
        Kyuhyun vió lo que pasaba, así que hizo que me sentara, sacó una carpeta de su bolso y comenzó a hechar aire.
- Tranquila Jisoo, todo está bien. Por favor no temas, aquí estoy yo, no dejaré que nada te pase - me abrazo y recosté mi cabeza sobre sus hombros.
Tomó mi bolsa y comenzó a buscar algo -Tus pastillas ¿Dónde están? - preguntó.
- En la bolsita pequeña.
- ¡Sí, ya las vi! - sacó dos y me las dio - ten, tómalas.
     Después de tomarlas, comencé a tranquilizarme. También, el hecho de que Kyuhyun estuviera a mi lado, me hacía estar más segura...
(Jisoo se tranquilizó)
- ¡Por cierto! - exclamó Jisoo muy sorprendida - ¿cómo sabías que pastillas debía tomar?.
- ¡OH!...
Este...
Porque...   [°°°]

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