CAPÍTULO CINCO: LA ACEPTACIÓN
___________________
Sus labios eran suaves y desprendían cierta calidez tranquilizadora, eso fue lo primero que noté.
Tomó mi rostro entre sus manos y ejerció presión en mis labios. No me moví ni un centímetro. Creo que porque estaba muy conmocionado, o eso había necesitado creer.
Luego de unos segundos, se alejó casi tan rápido como se había acercado a mí y en su rostro pude detectar pánico.
Su pecho subía y bajaba y parecía a punto de tener una crisis.
—Tú... —murmuré.
Yuta comenzó a retroceder y chocándose con todo, salió disparado de la habitación.
Quise seguirlo, pero no podía moverme. Aún sentía el calor de sus labios sobre los míos y mis rodillas temblaban.
— ¿Has peleado con onisan? Lo vi salir corriendo —apareció en el umbral de la puerta el mayor de los mellizos.
—No estoy seguro... —me obligué a sonreír.
—Ya lo arreglarán, onisan no sabe estar enojado contigo —se encogió de hombros Renjun.
Desee que fuera cierto, que Yuta no se alejara de mí, que nada cambiara, aunque sabía que todo había cambiado ya.
Las horas pasaban y seguía inmóvil.
Cuando la aguja marcó las cuatro de la tarde, me dispuse a salir de aquella casa y desistiendo cortésmente el ofrecimiento a quedarme a cenar, me alejé.
Lo vi dar vueltas a un par de calles de su casa.
— ¿Yuta?
Él pareció no oírme así que toqué su brazo. Tan pronto como me observó, se alejó de mí, como si mi tacto le quemase.
—Y-yo... tú... —era la primera vez que lo veía titubear, Yuta nunca dudaba. Era el tipo de persona que caminaba con el rostro en alto y pisando con firmeza porque sabía lo que valía y lo que debía hacer a cada segundo.
Suspiró lentamente y me encaró.
—No quise besarte, sólo quería que te callaras —habló con firmeza y me sentí dolido de alguna forma. —, espero que esto no cambie las cosas entre nosotros, eres mi mejor amigo y no querría perderte por un error.
Mejor amigo, error.
Le sonreí con incomodidad, no creía lo que estaba diciendo.
— ¿Tú podrás olvidar lo que acaba de pasar? —pregunté con acidez.
Yuya tragó y luego de unos segundos contestó con convicción.
—Sí.
—Bien, entonces no hay nada más que decir —comencé a caminar pero me sostuvo.
— ¿Cambiará algo? —lo noté nervioso.
—No ha pasado nada, no veo porqué debería cambiar algo —me encogí de hombros y me alejé.
Yuta no me detuvo y se lo agradecí mentalmente; no podría haberlo visto a los ojos sin largarme a llorar.
Me encontré angustiado por alguna razón los siguientes días y preferí alejarme de mi mejor amigo hasta que pudiera entender qué me estaba pasando.
Comencé a pasar más tiempo con JungWoo, un estudiante de intercambio con el que compartía clases.
—He notado que no estás pasando tiempo con Yuta, ¿se pelearon? —preguntó JungWoo con mala pronunciación del japonés.
No respondí pero me encogí de hombros y removí mi arroz sin interés.
—Vaya, debe haber sido una pelea grande para que no se dirijan la palabra.
—Da igual, no importa —susurré.
Lo siguiente que pasó, sorprendió a toda la congregación estudiantil.
Harumi se elevó en puntas de pie a la altura de Yuta y sacó de su cabello una hoja seca, pero eso no fue lo peor, sino la sonrisa de ternura con la que él le agradeció lo que terminó de ponerme de pésimo humor.
— ¡Yuta y Harumi están saliendo! —susurró JungWoo, dejándose caer a mi lado cierto viernes.
Yuta no me había buscado más luego de aquella escena y yo tampoco lo había hecho. Parecíamos de acuerdo en que nos venía bien un tiempo distanciados.
—Da igual, no importa —solté y me hundí en mi asiento.
—No pareces muy contento con que tu mejor amigo esté de novio, ¿eso es algo normal? —elevó su ceja, interrogante.
— ¿Acaso es la gran cosa que tenga novia? —me dolía la cabeza y estaba irritado.
—Tranquilo, hombre, que no es para tanto —me palmeó en la espalda.
La siguiente vez que vi a Yuta fue un miércoles por la mañana, ambos compartíamos clase de gimnasia y nos cruzamos en los vestidores.
Fue incómodo porque ninguno supo muy bien cómo reaccionar.
Agachó su cabeza en señal de saludo y continuó caminando.
—Parece que lo estás haciendo bien, me alegro —susurré pero él lo oyó. Lo supe porque se detuvo, más no me miró.
—Gracias —me respondió y siguió.
Sólo gracias.
Un dolor se apoderó de mí al darme cuenta de que todo había cambiado, Yuta solía tratarme con cariño y ya no lo hacía. Su voz era gélida y cada palabra que emitía la sentía como un puñal en el corazón.
Yo parecía ser el único de los dos que estaba sufriendo el distanciamiento y en cierto punto, me entristeció mucho más.
Yuta era difícil de leer para mí, siempre elegía sus palabras con precisión y nunca podía entender qué pasaba por su cabeza.
—Sicheng, ¿me estás escuchando? —preguntó JungWoo y negué.
—Mi madre dice que cuando un adolescente está tan distraído, suele ser porque el amor ha tocado su puerta. Dime, ¿tocó tu puerta?
Si lo pensaba un poco, no sólo parecía haber tocado mi puerta, sino que había entrado por la ventana sin pedir permiso y se había instalado como si fuera su propia casa.
—Me has dicho todo —rió él.
—No sé qué hacer, estoy tan confundido y aterrado —tomé mi rostro en mis manos.
—Está bien, nadie nace sabiendo qué hacer cuando se trata de amor.
Japón era extremadamente conservador con respecto a la homosexualidad y a pesar de que apreciaba a JungWoo, no podía simplemente decirle "hey, sabes, creo que me gusta mi mejor amigo. La verdad es que no lo había notado hasta hace un tiempo, cuando me besó y luego me dijo que había sido un error"
— ¿Cómo se llama la afortunada? —me alentó a hablar y yo quise huir.
Yuta pasó por delante mío, con ese porte seguro y firme que siempre lo acompañaba. Me quedé asombrado por lo bien que se veía, había peinado su cabello para atrás y podía ver gran parte de su frente. Sonreí instintivamente y entonces lo oí.
—Vaya, estás en un problema —silbó por lo bajo, JungWoo.
Y le di la razón.

ESTÁS LEYENDO
Star blossom↝ yuwin
Romance》;Entre miles de estrellas iluminando mi noche y tú sonriendo, elijo sin dudar embriagarme en ti;《 ♡Fluff ♡Historia corta ♡070618 🎀GANADORA DE LOS KPOP AWARDS SEXTA EDICIÓN🎀