Un verano con él

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-Eso estuvo increíble- dijo Kyle emocionado

-Gracias- respondí nerviosa

-Voy a ducharme- dije mientras subía a mi habitación

Al subir a mi cuarto me di cuenta que tenía que limpiar un poco mi cuarto, había muchos residuos de comida ahí.

Lo ignoré diciendo que lo limpiaría después y me bañé.

Terminé de bañarme y también terminé de escuchar todo el álbum de Taylor Swift.

Me enrollé en mi toalla y salí del baño.

Me puse mi ropa interior y empecé a buscar una blusa y shorts para usar, buscaba algo cómodo pero bonito.

Mi mameluco de panda era perfecto, cómodo y lindo.

Al voltear vi a Kyle en la puerta, rápidamente tomé mi mameluco y me tapé el cuerpo.

-¡Lo siento! Pensé que era la habitación de huéspedes ¡debí tocar!- tartamudeó Kyle volteándose

Sus cachetes se tornaron rojos y sentí los míos arder.

Mierda. Me había visto en ropa interior.

Me hubiera gustado que hubiese sido al revés.

Me puse rápido la pijama y entré al baño avisándole a Kyle que ya podía voltear.

-Ah, por cierto. Creo que mañana iremos a la playa, solo para que sepas- me dijo el chico

OMG ¡lo vería sin camisa! "Lisa Robinson va a la playa con Kyle Harris" sería un buen título para el periódico.

Escuché la puerta cerrarse. Me cepillé el cabello y me puse crema para la cara.

Bajé y vi a mi hermano con Kyle viendo una película.

Parque Jurásico, mierda esa era mi película favorita.

-Haz un paquete de palomitas y tienes un pase directo a sentarte con Kyle Harris- dijo el chico con una mirada sexy haciéndome un lugar junto a él

Presumido, no le haría ni un sándwich a ese chico. Cómo si no tuviera manos y pies para hacerlo él mismo.

Me senté junto a Kyle y él alzó una ceja.

-Está reservado- dijo cruzando los brazos

-¿Se podría saber quién es más importante que yo y tiene el valor de quitarme mi lugar?

-No se si la conozcas, se llama Lisa es muy linda y está tan loca por mí que me preparara unas palomitas por sentarse aquí

-Tienes manos y pies, no veo la necesidad de que yo las haga

-Un snack por otro- dijo guiñando un ojo

-Mala oferta

-Shhhh, dejen de discutir- nos calló mi hermano

Kyle se inclinó y me hablo al oído.

-No vas a querer que Gale se entere de tu pequeño amor platónico

Mierda. No me gustaba Kyle, no, no,

-¿Quién dijo que siento algo por ti?- susurré

Se inclinó hasta que hubo unos centímetros de distancia entre nuestros rostros.

-Tú, lo acabas de decir- y después se le formó una sonrisa traviesa

Mierda. Mierda. Mierda. No. No. No podía estar pasando.

¿Me gustaba Kyle y se lo acababa de confesar?

Abrí mi boca para decir algo pero Kyle me cayó poniendo su dedo sobre mis labios y de pronto me puse tan roja como un tomate.

-Finn, vamos a buscar la caja de palomitas- dijo Kyle

Me tomó del brazo y me llevó a la cocina.

-Ya lo sabía no te preocupes- dijo mientras buscaba las palomitas en las repisas

-Están hasta arriba- dije cruzando los brazos

Tomó la bolsa, la abrió y la metió al microondas.

-Se que será difícil pasar el verano con una belleza como yo y encima que te prohíban el amor conmigo, pero...

-Kyle no me gustas

-Hasta crees que no me doy cuenta de que te pongo nerviosa- Kyle miraba ansioso a que se hicieran las palomitas

Kyle me hacía sentir cosas que nunca había sentido.

-Sabes, no porque a medio instituto le gustes significa que me gustas a mí también

Mentira, ese chico era mi amor platónico.

Kyle me miró con una sonrisa de lado a lado y se acercó a mí.

Empezó a acariciar mi cachete con la yema de sus dedo pulgar y de pronto no podía alejar mi vista de sus ojos, sus hermosos y profundos ojos claros.

Quería quitar su mano, pero mi cuerpo no se movía.

Empecé a sentir cosquillas en el estómago y mis mejillas arder.

-Te guste o no, no te prometo que no te vaya a causar problemas este verano- dijo Kyle quitando su mano de mi rostro

Sus ojos coincidieron con los míos y le alcé una ceja a lo que él respondió con una sonrisa traviesa.

Sonó la alarma de las palomitas interrumpiendo y comimos las palomitas junto a mi hermano. Tan pronto la película terminó me fui a dormir.