Vania
Lo siento Mike, lo siento cielo, de nuevo...No me cansaré de pedir disculpas.
-No me miren como bicho raro y pónganse a recoger la base- Ordene tirando el arma a la mesa de centro.
Todos se dispersaron murmurando lo mucho que me odian.
Tome un trapo y empecé a limpiar toda la sangre que había en el piso.
-¿Qué haremos con todos los cuerpos? -Pregunto Nicolás
-Son demasiados para sacarlos- Contesto Monserrat.
-Saben...El camión que Isaac ocupo cuando nos rescató está en la parte trasera de la base...Podemos traerlo hasta acá y después subir a todos los cuerpos ahí.- Comenté mientras me sentaba en un sillón.
-Esa sería buena idea, y podríamos tirar los cuerpos en el mar.- Siguio Newt.
-Yo digo que los chicos se encarguen de los trabajos pesados y nosotras hacemos la limpieza y mantenimiento de la base- Dijo Alexa con su celular en mano- Los chicos lleven los cuerpos y si los necesitamos les hablamos.
-De acuerdo- Dijimos todos.
Está sería una larga noche.
Me acerqué a la cocina y vi que la mayoría de las cosas estaban rotas, incluido el refrigerador.
-Creo que necesitaremos ir a la ciudad.- Dije viendo los vidrios de la puerta del refrigerador de cristal.
Todo en la base estaba roto, absolutamente todo.
Isaac llegó con él bebe en brazos y Andrea estaba algo roja.
-¿Qué tienes Andrea?- Pregunto Nicolás preocupado.
-Nada- Respondió secamente
Isaac la miró con algo de molestia y luego le entrego el bebé a Monserrat. Isaac sabía que le pasaba a Andrea, eso era obvio pero no nos diría y tampoco era algo que me interesará.
-Esta base ya no tiene arreglo- Dijo Isaac mientras miraba molesto a Andrea.- No hay nada más que hacer aquí.
-Pero entonces...¿Donde pasaremos la noche?- Pregunté confundida.
-Hay un hotel por aquí cerca, ese hotel está completamente limpio y vacío, pasaremos la noche ahí y después nos iremos a otra base ubicada en Veracruz.- Comentó Andrea
-Asi que todos suban agarren sus cosas y suban al camión.- Ordenó Isaac.
Me dirigí a mi habitación y tome una mochila.
-Esto es increíble- Dijo Newt cerrando la puerta detrás suyo.
-¿Qué sucede? -Pregunto evitando verlo
-Trabajamos muy duro en esta base y ahora debemos dejarla.
-Lo siento...-Dije al borde de las lágrimas
-¿Por qué?- Pregunto confundido.
-Por todo, por herir tus sentimientos, por lastimar a todos, por dios todo lo que ha pasado en la base ha sido mi culpa, la muerte de cielo, el incidente de los zombies, la muerte de amara, casi morimos todos por mi culpa, porque yo dejé la maldita puerta de la base abierta. -Digo comenzando a llorar.
El me abraza y besa mi frente.
-Esta bien, por mi estás perdonada.
Los demás tenían razón, todos tenían razón cuando decían que no debía ni de estar en esta base. Yo solo se causar problemas.
Comencé a guardar mis cosas y fui a la sala, ya todos estaban ahí, comenzamos a subir al camión y nos acomodamos como pudimos ya que era algo incómodo.
Al llegar al hotel cerramos las puertas colocando varios muebles en estas para evitar el paso a los zombies.
-Solo será una noche, mañana en la mañana nos iremos de aquí-Aclaro Isaac.
Me senté en la sala de recepción y puse Bob esponja.
-¡ya madura! -Grito Luis en mi oido- Esos son programas de niños chiquitos
-¡¿Acabas de gritarme en el odio?!
-Ops...¡Run Bitch, Run!
Luis salió corriendo y yo detrás de él
Monserrat
Lo único que quería era descansar, ya no aguantaba nada, creo que ya era hora fe aceptar que nada seria como antes, el mundo se fue a la mierda y todo es una maldita porquería.
¿Que fue lo que comenzó con el virus? Había algo extraño en todo lo que estaba pasando, incluyendo el porque sabemos tanto sobre zombies para tan pocos días.
Es como si hubiéramos sido entrenadas desde pequeñas y ahora solo tuviéramos ese vago recuerdo de lo que nos enseñaban.
Era demasiado extraño todo esto, pero esto solo es una de mis teorías, aun no se la realidad y quien sabe si la llegue a conocer.
—¿En que piensas?— Preguntó Agni acostándose junto a mi.
—En nada, simplemente me estoy relajando, creo que...
El sonido de la panza de Agni me interrumpe
—Perdon, tengo hambre.
—¿Hambre? Parece que te tragaste un gato y ahora lo vas a defecar pendeja
Agni me mira molesta.
—Babosa, tiene un buen rato que no comemos.
—Lo se, yo también tengo hambre, ¿crees que haya algo de comer en la cafetería del hotel?— Digo tocando mi panza.
—No lo se, pero vayamos a ver
Ambas nos dirigimos a la cafetería del hotel y al entrar vemos a Alexa y Christopher besándose.
—¡¿Pero que mierda?!—Grita Agni boquiabierta.
—Ya nada tiene sentido para mi en esta vida.—Digo con una mueca.
—Ver esto me ha asqueado— Contesta Agni.
—Hay callate, no fueras tu con Jackson porque a su madre, pinches besotes que se dieron. —Habló recordándole la vez que ella y Jackson se besaron.
—¡Solo somos amigos!
—Esos besotes que te metiste con Jackson dicen lo contrario.
Pronto de me di cuenta de que Alexa y Christopher ya no estaban.
—¿Ya viste lo que hiciste pendeja? Los espantaste— Digo golpeando a Agni.
—¡¿Yo?! Pero si tu empezaste a hablar de mis besos con Jackson.
—Pues porque te estabas quejando de ellos idiota.
—Uy pues perdón señorita perfecta, pero vas a ver, cuando Nicolás te de tus besotes ni me digas nada.
—¡¿Que?!— Grito molesta.
—Nada...
—¡Ya valiste verga pendeja!
Comienzo a pellizcar a Agni.

ESTÁS LEYENDO
El Escuadrón
Ngẫu nhiênUn extraño virus había invadido al mundo, aquel extraño virus convertía a las personas a un ser muerto-vivo.