Fu*k you... ¿i love you? (Jacob Elordi)

8

Mentirle a Jacob sobre qué "Elle se había ido de viaje" fue demasiado estupido era demasiado obvio que lo estaba esperando y su aliento a helado y alcohol no me daban nada de confianza, los días y semanas seguían avanzando y Jacob había renunciado a su puesto de capitán en el equipo, empezó a pasar tiempo en la biblioteca y no entendía el porque, es decir, ¿Sabe leer?

Por otro lado, el chico random que bese me seguía escribiendo todos los días, aunque ya habíamos desmentido el hecho de que "fuimos pareja" las personas seguían pensando que lo éramos, me aburrí de imaginar qué demonios hacía Jacobo ahí  así que fui entrar a espiarlo porque desde esa noche dejo de hablarme como antes lo hacía, pero para mi gran suerte el estaba con una chica... ¡UNA MUY HERMOSA CHICA!

— Lamentó interrumpir. — Dije con una sonrisa en el rostro y la chica me miró feliz, ya la odiaba.

— ¿Que haces aquí? — Respondió Jacob confundido.

— Soy Mía. — Extendió su mano y me sonrió.

— No me importa. — Conteste y la dejé con el saludo extendido.

— ¿Que mierda te ocurre Hannah? Deberías estar en tus clases. — La expresión de Jacob me ponía mal, sabía que estaba molesto.

— ¿Que mierda me ocurre a mi? Deberías preguntarte qué es lo que a ti te pasa, dejaste de hablarme de un día para otro y ahora ¿LEES? Claro que me sorprendió pero ahora que lo confirmo, vienes a estar con una más de tus zorras.

— Ignórala Mía es mi  hermanastra y es algo irritante. — Miro a Mia y me rodeó los ojos.

— Claro que lo soy y como dato curioso los hermanastros se besan oh Jacob ¿Ya le contaste que me besaste? — Conteste.

— ES SUFICIENTE HANNAH, Deja tus celos ya mismo. — Jacob se paró de su silla y me grito.

— ¡VETE A LA MIERDA IMBÉCIL! ¿CELOS? SUEÑAS! Y TÚ! — mire a Mía—  ¡SE ABURRIRÁ DE TI!— Todos escucharon y no dejaban de mirarme, incluso me di cuenta que uno estaba filmando todo.

Salí de la biblioteca y después de dos aburridas horas de clases sonó el timbre, mi salvación, caminando por el pasillo me encontré con Alex y mi día fue mejorando de un segundo a otro.

— ¿Como te va Hannah? — Dijo Alex con algo de curiosidad, sabía que sacaría al tema lo del estupido video si es que ya lo había visto.

— Peor de lo que parece pero, intento sobrellevarlo.

— Si, vi tu ligera discusión con...

— Ni lo menciones, me da muchísima pena que alguien haya publicado el video en el blog del colegio.

— En el video no se escucha que se besaron Hannah, puedes agradecer a quien lo grabó.

— ¿Como sabes que...? — Mis ojos se abrieron como platos y mi corazón se aceleró.

— Yo también fui a tu fiesta.

— ¿QUE? — Mi corazón se detuvo de nuevo, a este paso iba a enfermarme de algo por tanto maldito susto.

— Tranquila, lo decía en broma... pero los rumores se corren rápido acá, alguien los escucho.

— Gracias pero, estaba bajo los efectos del alcohol, no besaría a ese idiota ni en sueños! — Alex sonrió al escuchar esto.

— ¿Te parece si voy a tu casa hoy?

— ¡Me encantaría! — Le sonreí.

— Genial, a las 7:30 estoy ahí, ahora iré a entrenar. — Se alejó de mí. — Adiós linda.