Óleo [Yoonmin] ~ |TERMINADA|

PARTE VI

Suga departo desorientado, no recordaba mucho de lo que había hecho en la noche y lo peor era que no recordaba como había llegado hasta su casa, mucho menos a su cama. YoonGi no entendía nada, su cuerpo se sentía pesado y su pecho dolía demasiado, tenía la impresión de haber sido golpeado con un bat de baseball.

Su habitación por lo general siempre se encontraba en completa oscuridad y le era muy difícil adivinar la hora, las cortinas  de su habitación eran tan gruesas que ningún rayo de luz las podía atravesar, lo único que llamo su atención, fue el destello de su celular avisándole junto a un vibrado (desesperante, según YoonGi) que tenía una llamada entrante. No quiso contestar, su cuerpo se sentía destrozado y lo único que podía hacer era ver el techo de su habitación, eso, y los ojos acuosos de Min Holly. Su amado saco de pulgas, lo miraba desde la almohada de al lado. La bola peluda se había adueñado desde ya hace años del lado derecho de la cama de YoonGi, hasta el momento no había podido hacer nada más que ceder a los caprichos de su adorable bola de pulgas.

Era estresante para Suga no recordar nada de lo que había hecho en la madrugada. Solo recordaba haber salido a pasear con Holly, luego de eso, recordar era como tratar de excavar en cemento seco con una pala de plástico. Su cabeza dolió mucho cuando trato de profundizar en sus memorias, se sentó en la cama y miro con recelo su celular, el maldito aparato no había parado de vibrar desde que despertó. Cuando furioso, se puso en pie, su pecho ardió y sus piernas flaquearon haciéndolo caer de rodillas al piso, tomo su pecho en la zona de su corazón con ambas manos y trato de calmarse. Min Holly de inmediato entro en estado de alerta y salto al lado de su amo caído en un intento de darle apoyo. 

Por otro lado Suga no es que estuviera convaleciendo o algo por el estilo, simplemente estaba teniendo una reacción extraña en su cuerpo, él no se sentía enfermo o a punto de desfallecer, para nada; el pelinegro solo tenía un vacío muy pesado en su pecho, irónico, ¿no?

Al estar seguro de tener el control de su cuerpo, palmo con cuidado la cabeza del can y se reincorporo tomando el móvil entre sus manos.

¿Quién carajos en su sano juicio se atrevería a intervenir de ese modo en el descanso de YoonGi?

¡Ahh sí, claro!, solo habían cuatro personas en el planeta que tenían los huevos bien puestos como para hacerlo.

-Espero que sea por algo bueno, estaba durmiendo. ¡Idiota!- Suga era muy lindo con sus amigos.

- ¡¿Pero que coña pasa contigo?! Sabes lo preocupados que nos tenías.

No

¿Preocupados? ¿Por qué?

Definitivamente YoonGi no entendía a que se refería su amigo, reviso su móvil con la llamada aun en línea. Eran las 12:30 PM; nada fuera de lo común- Jin, no es para nada extraño que duerma por mucho tiempo y lo sabes- se quejó desganado (como casi todo en su vida), aun le dolía un poco la cabeza- También faltan un par de horas para que llegue al museo.

-¿Pero que pasa contigo? Llevas sin dar señales de vida por dos días- ¡¿dos días?! Oficialmente, YoonGi estaba consternado...Claro que no llevaba tanto tiempo sin verlos.

-No juegues así conmigo Jin, no estoy de humor.

-¡No lo hago!, no intentes mentirme.

-Es que no entiendo...

-Hoy es jueves, la última vez que te vimos fue un lunes.

¿Jueves? Era imposible porque... No podía haber entrado en una especie de trance por tres días, ¿o sí?

-Te hablo luego- Suga colgó la llamada antes de que su amigo pudiera darle una respuesta (o que lo regañara), camino hacia la ventana y de un manotazo arranco las cortinas de su habitación. Un resplandor cegador se coló por la ventana, quemando sus retinas y aturdiéndolo, tapo sus ojos con ambas manos mientras maldecía. A tientas logro encontrar la cama y se sentó otra vez en ella, cuando sintió que sus ojos se acostumbraban a la luz, los abrió de a poco. Lo que vio fue lo último que pudo haberse imaginado en toda su vida.

Sintió sus ojos escocer y no necesariamente por la luz, era por lo que posiblemente sus manos crearon sin siquiera saberlo. Ahí estaba, su "chico perfecto" plasmado en un lienzo que, recordaba haberlo dejado en blanco por varios días. Por su confusión no había notado el fuerte olor de las pinturas mezcladas con aceite de linaza. A pesar de haberse hecho con pintura de óleo, el cuadro estaba seco. No podía creer lo que sus ojos le mostraban, era el retrato más hermoso que había hecho en toda su vida (claro, haciendo de cuenta que él lo había hecho en una especie de trance o algo parecido)

Suga tenía miedo de ir al museo, pero... Tenía que hacerlo. Tomo otra vez su móvil y busco entre sus contactos a Jin, estuvo a punto de llamar cuando su teléfono vibro y la pantalla dejo ver una llamada entrante del mismo.

¡Que coincidencia! ¡Ha!

-Hola- susurro.

-YoonGi- y ahí venia de nuevo- Porqué me cuelgas de esa forma, ¿acaso no te importa cómo nos sentimos? Estábamos muy preocupados y...- ok, Suga no tenía ganas de escuchar nada y menos sus sermones. Le dolía la cabeza, el pecho y no podía dejar de pensar que se estaba volviendo loco porque... ¡Rayos!, acababa de perder las memorias de 2 días, y el retrato de su chico había aparecido en su habitación como por arte de magia.

-Jin, por favor- le rogó- No entiendo nada de lo que está pasando, estoy igual de perdido que tú, así que, si podrías dejar de reprocharme mierda con ese acento de viejo amargado, te lo agradecería mucho.

-¡¿Ooh?! ¿Cómo? ¿No sabes lo que está pasando?

-No, y no tengo porque mentirte.

-YoonGi, tu pintura a desaparecido.

-¿Cuál?- ¡por qué alguien se robaría un pedazo de tela con garabatos hechos con pintura cuando se podía llevar otras cosas con más valor dentro del museo, era absurdo- Es ridículo.

-Lo sé, lo más extraño es que tuvo que haber sido alguien que trabaja en el museo como para saber el código de la alarma.

- Pero... Carajo, ¿Cuál pintura fue?

-Emm... Fue el retrato del chico, el que agregaste a ultimo minuto.

-¿El retrato? ¡¿De toda la colección que vale mucho dinero, prefirió llevarse un retrato hecho con acrílico?! – Suga toco su cabello un poco sacado de onda- ¡Vayaaa! Sí que era un maldito desesperado.

¡Ha! Y sí que lo era.

-Eso mismo pensamos con TaeTae, no le encontramos sentido, había mucho material como para llevarse solo un cuadro y justamente ese.

- A lo mejor solo fue una travesura

-Travesura o no, tienes que venir y verificar el reporte del robo. Nosotros levantamos uno pero, no quisimos darle mucha importancia ya que no dabas señales de vida...Estuvimos a poco de reportarte como desaparecido.

-Calma, llegare más tarde a ver lo del robo, necesito un poco de tiempo, ¿está bien?

-No lo hagas de nuevo- lo reprendido, como toda una madre resignada al describir a su hijo cometer un error – Nos preocupaste mucho

-Lo prometo

YoonGi definitivamente, debería dejar de hacer promesas.

¡Min YoonGi!

Que comience el juego...