Resistance

Capítulo 11

-En verdad me alegro de que todo allá salido bien- Dice cargando la pava de agua -Debo confesarte que no estaba muy convencido de lo de Resistance-

-¿Por qué me ayudaste entonces?- Cuestiona Barbi frunciendo el ceño sin entender.

-No me gusta mucho la forma en la que nos tratan- Responde suspirando resignada -No somos niñas, todavía recuerdo como todo el mundo perdió la cabeza cuando descubrieron que pase la noche fuera de mi departamento con un macho, fue casi indignante la verdad, aunque hubiese pasado algo entre nosotros esa noche soy lo bastante grande para decidir por mí misma-

-Tienes razón- Admite Barbi haciendo una mueca -¿Puedes creer que Breeze me dijo que necesitaba la aprobación de Justice para ver a Resistance de nuevo?-

-Lo sé- Dice ella riendo ante eso -Es una suerte que todo allá salido bien en tu visita de hoy, porque si algo hubiese pasado todos enloquecerían al saber que estuviste a solas con mucho macho en la zona salvaje-

-Si- Dice ella suspirando -Y no entiendo por qué-

-Solo quieren protegernos- Responde ella haciendo una mueca -Aunque sus métodos no siempre son los adecuados. Como sea, continúa contándome como te fue-

-Creo que ya te conté todo- Dice Barbi frunciendo el ceño intentando saber si se le había olvidado decirle algo más.

-No lo más importante- Dice pasándole una taza de té recién hecha -¿Qué te pareció estar a solas con ese macho? A ti siempre te han asustado y ahora resulta que estuviste a solas con uno dos veces-

-No me asustan los machos- Responde Barbi frunciendo el ceño -Me asustan los humanos solamente, hay una diferencia en eso-

-Cómo sea- Dice chasqueando la lengua -A lo que voy es que algo debió cambiar para que esto sucediera ¿Por qué ahora? ¿Por qué Resistance?-

-No creo que algo cambiara- Dice ella pensando como expresarse -Solo sentía curiosidad, siempre has hablado de la zona salvaje con tanta alegría, supongo que quería ver en primera persona lo que decías-

-Si tenías curiosidad por la zona salvaje lo hubieses dicho- Dice Bella sonríe de forma rara -No salir a buscar tu propio guía privado para que te la muestre-

-Yo...- Dice Barbi sin saber que contestar a eso.

-Solo estoy bromeando contigo- Dice la otra hembra tomando otro sorbo del caliente y dulce liquido -Aunque debo admitir que ese macho esta como quiere, creo que en esta época del año no debería andar tan descubierto, seguramente pasa frio-

-No creo que pase frío- Dice ella recordando como en algunas ocasiones el calor corporal del macho parecía filtrarse hasta ella cuando se aproximaban lo suficiente como sentirlo.

-¿Por qué lo dices?- Pregunta mirando a la otra hembra con los ojos entrecerrados.

-Es que...- Comienza a decir sonrojándose sin atreverse a decirle la verdad -Simplemente no creo que pase frío a propósito, si de verdad tuviera frío se abrigaría-

-¿Te gusta?- Cuestiona Bella poniendo los ojos enormes por su repentino descubrimiento.

-No me gusta- Dice rápidamente Barbi negando con la cabeza -Eso es una locura-

-No puede ser, te gusta- Insiste la otra hembra -Por eso no saliste huyendo la primera vez que lo viste y luego insiste en volver a verlo-

-Eso no es cierto- Exclama la hembra con los ojos enormes -Resistance no me gusta-

-Solo mira lo sonrojada que estas- Dice Bella intentando contener la risa ante la cara de la otra hembra.

-No estoy sonrojada- Dice Barbi cruzando los brazos mientras intentaba controlar el calor que sentía en su cara.

Mierda, piensa la hembra enojada, si estoy sonrojada. Pero eso no significa que me guste Resistance ¿Verdad? Piensa asustada ante la idea. No, no me puede gustar ese macho, decreta firmemente, si hasta me intimida un poco su imponente figura.

-Lo siento- Dice Bella al ver la cara contrariada de la otra hembra -No debí reírme, está bien si te gusta, es algo normal, tienes derecho a reconstruir tu vida-

-El me asusta un poco- Admite Barbi finalmente -No me gusta, solo tengo curiosidad-

-Creo que será mejor que vallamos a dormir- Dice Bella mirando el reloj que estaba colgado en la pared.

-Ve tu si quieres- Dice Barbi caminando hacia la pileta para colocar su taza vacía dentro -Yo lavare las cosas del té y después subiré-

-Ya sabes cuál es tu habitación- Dice la otra hembra dándole un beso antes de dejar su propia taza vacía junto a la de ella -Nos vemos mañana, que descanses-

-Hasta mañana- Dice Barbi enfrentando la pileta para comenzar a lavar.

-Y Barbi- Llama la hembra cuando se encontraba en la puerta de la cocina -Puedes decirme lo que quieras a mí, pero no puedes engañarte a ti misma-

-¿A qué te refieres?- Cuestiona la hembra frunciendo el ceño.

-A que hay una razón por la cual quisiste volviste a ver a ese macho- Dice sonriendo suavemente -Y solo tú sabes verdaderamente cual es-

Ella tiene razón, piensa desanimada la hembra, no puedo ocultarme la verdad. Desde el primer momento en que Resistance apareció y la salvo de ese temible oso ella se sintió impresionada con el macho. Era extraño la verdad, todo en él le gritaba peligro y a la vez sabía que jamás le haría daño.

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Resistance golpea el árbol con toda su furia, estaba tan enojado consigo mismo. Por más que lo intentara, no podía sacar la imagen de la pequeña hembra de su mente, ni borrar el delicioso aroma de su nariz.

Todavía no podía creer lo que estuvo a punto de hacer, piensa negando con la cabeza. La sensación de esa hembra entre sus brazos cuando la atrapo lo cegó momentáneamente, se sintió abrumado con el cálido cuerpo entre sus brazos y ese delicioso aroma entrando por sus fosas nasales. No podía mentirse a sí mismo, piensa recordando lo cerca que estuvo de echarse la hembra al hombro y volver a su territorio.

Y lo que más le perturbaba es que no sabía que habría hecho una vez que llegara con la hembra a su territorio. Él estaba seguro que no quería una compañera, piensa estremeciéndose ante los recuerdos que llegan a su mente. Él no quería a Barbi como su compañera, se dice intentando convencerse.

Eres un buen macho, cualquier hembra te querría de compañero. Las palabras de Barbi se repitieron en su mente. No, se dice negando con la cabeza, ella no lo conocía, él no era un buen macho y estaba seguro que la hembra no lo querría de compañero una vez que en verdad lo conociera.

No importaba lo bien que ella se haya sentido con su cálido cuerpo femenino apretado contra el suyo, eso era algo que jamás pasaría, concluye corriendo por la zona salvaje, pues en este momento no quería ir a su territorio, quería correr, dejar que la naturaleza lo rodeara y acallara sus pensamientos.

O - - - O - - - O - - - O

Bueno, aquí un nuevo capí, así que si les gusto no se olviden de dejarme su voto y comentario para saber que opinan de mi historia. También pueden seguirme para estar al pendiente de las ultimas actualizaciones.

Es una lastima que no pudiéramos llegar a los 200 votos en el capítulo pasado, pero les daré otra oportunidad para conseguir el próximo capí, así que ya saben que hacer!

Nos leemos pronto. Besos.

-Nefilimrusa