Una última semana, una más, y ésto se termina.
me lo repetí mil veces al espejo, pero no me lo creía.
El timbre estaba apunto de sonar y debía entrar a clases. Arreglé mi cabello, me sequé las mejillas y respiré profundo. La ansiedad me estaba comiendo viva.
Crucé por todo el patio, desde el baño hasta mi salón, rogando no tener que cruzarme con indeseados.
Los últimos meses éste lugar se convirtió en mi infierno materializado. Perdí la cabeza totalmente.
Estaba enamorada, pasamos años juntos, viéndonos todos los días en clases, pero de a poco todo se fue rompiendo.Hasta que un día, todo a la mierda.
Desde entonces, no logré recomponerme.
Terminó el día, salí del colegio aguantandome las lágrimas. Corrí hacia el parque más cercano y saqué la cámara.
Era la única forma de ver algo lindo en todo el día, por más que al llegar a casa me arrepentía y borraba todas las fotos, porque sentía que no eran para nada buenas.
Estaba muy frustrada. Había perdido el rumbo.
Pero pronto, todo terminó.
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Dancing's not a crime ; Brendon Urie -
General FictionBailar no es un crimen, enamorarse tampoco, a menos que lo hagas sin mí.