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— ¿A dónde me llevarás?

— Mm, al centro comercial escuche que abrieron un nuevo local donde tienen juegos realmente buenos.

— Esta bien ... Llevame a donde quieras.

Jungkook realmente se dejo llevar por mi, lo cual hacia las cosas mas fáciles, estoy segura que se dejo llevar porque le agrado la idea.

—¿Sabes jugar?

— No...

— Entonces ... ¿por qué me invitaste?

— ¿Es malo querer aprender? — Trate de desifrar el rostro de Jungkook pero ... Realmente era difícil, era una cara entre confusión y enojo.

— Yo no te voy a enseñar, solo me hiciste perder el tiempo.

— No seas malo — Trate de hacer un puchero ridículo el cual termino por hacer enojar más a Jungkook.

— Con eso me convences menos ¿sabes que? Me voy a casa.

—¡Nooo!

— ¿Por qué no? sera bastante fácil ganarte y asi no es divertido.

— Claro que lo es .... Quiero aprender Jungkook.

— Kook.

— ¿Qué?.

— Dime Kook, me molesta que me digas bastante mi nombre, te escuchas como mi mamá.

— Esta bien te dire Kook — El me sonrió de una tan dulce que casi hizo que mis piernas flaquearan.

— Vamonos — jaló de mi muñeca y me llevo hacia ese lugar.

Bastantes cosas pasaban por mi cabeza pero ninguna de ellas tenían sentido alguno, solo una de ellas era la que más me convencia, no hay que  entender o tratar de desifrar a una persona con el simple hecho de estar a su lado era suficiente para que entrara a tu mundo,  para mi las personas forman un pequeño mundo interior y funciona dependiendo de como enfrentan las adversidades.
Yo no tengo el conocimiento ni el tiempo suficiente (eso es por que apenas lo estoy conociendo) de conocer para ayudar a Kook, lo único que puedo hacer es quedarme a su lado.

“Solo puedo brindarle mi compañia”.

¿Qué quieres que te enseñe a jugar?

—¿Qué?

— Aún no empezamos y ya te distraes de verdad que eres todo un caso.

— Lo siento... ¿empezamos?

— Sientate.

Le obedecí y comence ahora si a prestarle atención, el de vez en cuando se frustraba por que no podía pero era obvio que no lo haría a la primera esto requiere tiempo para que al menos puedas controlar bien la maquina.

— Eres muy torpe y lo estas haciendo mal, deja te muestro — tenia los nervios de punta, el tenía su mano encima de la mia y ni siquiera lo notaba con una pizca de nerviosismo el solo se movia y ya, mientras tanto yo estaba teniendo una tercera guerra mundial en mi interior.

Ya había admitido que el me gustaba pero ¿que era esta sensación? Sabía que el amor aumentaba tus niveles de exitocina y dopamina lo cual no te hacia estar del todo conciente de tua actos, pero a mi si que me llego fuerte, no podia prestarle mucha atención que digamos, ya solo me la pasaba contemplandolo solo ruego y no se de cuenta porque si llegara a enterarse estaria totalmente perdida.

— Intentalo hacer tu sola.

— Esta bien Kook — Lo intente no lo niego lo hice pero simplemente era bastante difícil, y se veia que Kook disfrutaba de mi sufrimiento ya que reprimia su risa cada vez que yo me equivocaba.

— Kook si te quieres reir solo hazlo pero no lo reprimas te puede hacer daño — Al parecer eso le causo aún más gracia porque comenzo a reir a carcajadas, no lo niego verlo reir me dio años de vida y no pude evitar reir con el a pesar de que segun yo estaba molesta.

De verdad que deseaba que estos momentos nunca acabaran pero le prometí algo a Seok Jin y tenia que cumplirlo.

— Kook vamos a otro lugar ¿si?.

— Tan pronto te rindes ¿donde esta honor basura?

— No me rendí ¿si? Es solo que tenia más planes para tu y yo.

—¿Que tipo de planes?.

— Es una sorpresa.

— Odio las sorpresas.

— Pero yo no y se que te gustara (realmente no lo sabia).

                              🌈🌈🌈

El camino a su casa fue agotador en todo sentido físico y psicológico, físico porque me cansa caminar tanto, psicológico porque Kook hizo todo el recorrido incomodo con su cara de maton y no respondiendo a lo que le preguntaba o decia.

— Tu jodida sorpresa ¿fue llevarme a mi casa?.

— No es lo que tu crees — En cuanto escucharon nuestras voces Seok Jin y su madre lo recibieron con un pastel y globos, la cara de Kook cambio repentinamente a una de confusión.

— Feliz Cumpleaños Kookie — Dijo su hermano alegremente mientras sostenia el pastel en sus manos.

— Lo hice especialmente para ti.

— Jin no era necesario tu sabes que yo no celebro mi cumpleaños.

— Lo se pero este año puede ser diferente ¿no lo crees?.

— No, no puede ser diferente por el simple hecho de que no hay nada que celebrar.

— Kookie no digas eso ademas este año si tienes con quien celebrarlo junto con nosotros.

— Tu amiga esta contigo, ya no estas tan solo como antes — Escuche un suspiro pesado por parte de el.

— Solo hay que partir el pastel y me dejan en paz — El rostro de Seok Jin cambio con tal rapidez que ahora la habitación parecia estar más iluminada.

Todos juntos cantamos feliz cumpleaños a Kook y el se veia normal ya saben la tipica cara que haces cuando todos te cantan feliz cumpleaños.

—Kook feliz cumpleaños — Le entregue su regalo muy apenada.

— Tu me comparaste un regalo ¿por qué?.

— Bueno eso se hace en los cumpleaños ademas ahora somos amigos ¿no?.

— No hacia falta que me regalaras algo SoHee como lo dije no hay nada que celebrar.

—Pero son años mas de vida, estas vivo es motivo suficiente.

— No lo es, como tu lo dijiste ahora tengo veinte años pero para mi solo son veinte años de ser un completo idiota egoista sin aspiraciones a nada más que a morir, otro maldito año de vivir solo y preocupar a mi familia ... SoHee no hay nada que celebrar.

— Pero al menos este año diste la cara ¿no?.

— Si lo hice porque la unica razón que encontre fuiste tu.

Mi Chica Perfecta JK.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora