El amor mas fuerte

El primer golpe

La jornada había sido agotadora, Maria llegaba siempre exhausta a casa, en el mercado las cosas mejoraron, aquella pobre mujer obtenía un poco de estabilidad, Carlos por otro lado se esforzaba mucho, era normal verlo siempre con una sonrisa, este buen hombre había sabido ganarse el aprecio de toda la gente de la plaza donde trabajaba como un humilde obrero, y mientras tanto Luis disfrutaba de ir a la escuela, le encantaban mucho las matemáticas e incluso para tan corta edad consiguió aprender ya algunas mañas.

Mientras la mujer empezaba a preparar algunas cosas en su pequeño puesto, sintió de repente un pequeño dolor en su cabeza -Quizás el calor, quizás el cansancio- se dijo a si misma, ante ella se poso su pequeño hijo, cubierto de polvo con las marcas de varios golpes en su rostro.

¿Que paso? -Pregunto ella, muy sorprendida porque nunca antes había visto a su hijo así.

Santibañez me dijo que mi uniforme lo saque de la basura -Respondió el pequeño con lagrimas en sus ojos.

La madre sintió un poco de ternura por aquel chiquillo, después de todo los niños a esa edad son sensibles para todo, quizás olvide esto al rato, pensaba mientras trataba de disimular una sonrisa en su rostro.

Déjalo que diga lo que quiera, el es un bruto -Dijo María con un gesto inocente, tomo una manzana de la canasta y se la dio, pero Luis no quiso tomarla.

!Quiero un uniforme que no este roto, todos los niños se ríen de mi, estoy cansado de ti mama Ya no te quiero!

Aquellas palabras quedaron marcadas en su mente y en su corazón, Maria no supo que hacer, se quedo completamente quieta, la ternura que haba sentido al inicio se volvió una preocupación abundante, era cierto que el dinero casi no alcanzaba pero ¿que podía hacer ella?. Su único aliado aquel día fue el silencio, no comento nada a su marido y prefirió lidiar con aquel problema sola.

Se volvió habitual que aquel niño empezara a renegar de la situación que vivía, pasaban los meses y por momentos la tranquilidad se hacia presente, alguna que otra rabieta, Maria y Carlos podían controlar a aquel niño que de vez en cuando se ganaba un golpe a pulso, ninguno de ellos sospechaba que el resentimiento por la pobreza en la que vivía Luis, se convertiría en rebeldía y despreocupación por superarse.

¿Que pasara con cada uno de ellos en el próximo capitulo?

Agradecimientos: Y.P.