Decisiones

Capítulo VII

- Entonces, me estáis diciendo que habéis realizado un duelo, sabiendo que están prohibidos entre los alumnos en Hogwart sin autorización y habéis acabado así...

Estaban en el despacho de la profesora McGonagall y esta estaba hablando seriamente con ellos. Madame Pomfrey ya había curado a Severus pero James estaba aún en enfermería. McGonagall no se podía creer lo que le contaban. Es decir, Severus era un poco rarito, sí, pero nunca se había metido en una pelea tan grande. No era la primera vez que hacía un duelo con James, pero eran peleas pequeñas, sin importancia, aquí se habían pasado los dos. A su vez, no podía creerse que el pequeño Potter fuera el causante de todo, le tenía mucho cariño, y a lo mejor tenía que expulsarle...

- Profesora McGonagall, no debes echarle todas las culpas, si yo no hubiera discutido con Severus no habría pasado nada...

- ¡¿Qué?! Sabes perfectamente que no tienes culpa de nada. - la protegió Sirius - es mi culpa por decirles a los chicos de ir a molestar a Quej... dijo Snape. Si no hubiera sido por eso, James estaría bien ahora...

- No... Black, sabes que nos llevamos mal pero... si yo no le hubiera lanzado ese primer expulso... no hubiera habido duelo.

- Venga ya, Snape - se metió Remus - sabes perfectamente que te estaban provocando. La culpa es mía por no pararles los pies a Sirius y James. Es mi deber como prefecto. 

- Lupin...

- Está claro que la culpa ha sido de todos. Estaréis todos castigados durante dos semanas, todos los días en mi despacho a las 4 pm. Y encuanto a ti, Snape... has causado mucho daño a James, al igual que él a ti... Estoy pensando en expulsaros.

- ¡Qué! ¡No puedes expulsarme! Hogwart es mi segundo hogar... - entonces se le escapó una lágrima - Por favor...

- Lo siento Snape, lo tengo que pensar. Hasta que lo decida, estarás castigado con los demás.