¿El elegido?

¿El elegido?-25

"¡¿Desde cuando?!" Tom se quedó mirando con los ojos abiertos a Luna y a Harry.

"Hemos conocido la ocupación desde hace años". Luna sonrió.

Harry y Luna habían estado enseñando a Eva y Hermione occulemencia ese fin de semana. Tom había entrado en sus "sesiones", como lo llamó Luna, varias veces porque había estado usando la chimenea en la sala de requisitos para ir a las reuniones del Mortífago.

Hasta el momento solo estaba planeando una escapada de Azkaban con Remus, Sirius y lo que quedaba de su Élite. Básicamente solo Severus y Lucius. Mientras que otros en círculos inferiores lentamente obtuvieron trabajos importantes en el ministerio ya que Harry lo había convencido de derrocar a Fudge y Dumbledore políticamente en lugar de violentamente.

"¿A dónde vas a decirme cuándo?" Tom preguntó, era tarde el domingo y ambos adolescentes estaban mentalmente agotados por sus lecciones de obsesión.

"Cuando recordamos". Harry bostezó.

"Es tarde, me voy a la cama". Luna se puso de pie y abrazó a Harry y luego a Tom antes de irse.

"¿Por qué estás sorprendido?" Harry miró a Tom confundido.

"No es como si mis reuniones de Mortífagos fueran una fiesta de abrazo de Hufflepuff". Tom levantó una ceja y luego entrecerró los ojos ante la sonrisa de Harry.

Harry se levantó abrazó a Tom, sintiendo los brazos alrededor de su cintura, "¿vas a seguir abrazándome hasta que esté acostumbrado a ellos?" Tom susurró en el cabello de Harry.

Harry asintió y accidentalmente cerró sus ojos. Tom solo se dio cuenta de que estaba dormido cuando la respiración de Harry se estabilizó. No queriendo llevar a Harry al infierno rojo y dorado que era la torre de Gryffindor, le pidió a la habitación una cama y se acostó al lado del adolescente de pelo blanco.

Cayó en los brazos de Morpheus casi al instante.

*

Eva se levantó temprano y muy alegre a la mañana siguiente, a pesar de que ella y Hermione habían quedado destrozadas después de sus lecciones de obsesión. Hermione parecía lista para alzar el infierno si alguien se le acercaba.

Su expresión asesina ayudó a protegerse de cualquier idiota desafortunado dispuesto a molestarla, como dos pelirrojas que se aferraban a los Potter Twins. Harry los recibió en el desayuno y medio sonrió. Luna se sentó junto a ella con los otros dos frente a ellos.

"Alguien está feliz esta mañana". Harry comentó cuando Eva y Luna comenzaron a charlar sobre las clases.

"No me hagas comenzar. Me sacó de la cama y llegamos temprano". Hermione refunfuñó.

"Sí, quería dormir más pero alguien tenía otras ideas". Harry dejó que su cabeza golpeara la mesa.

"¿Alguien?" Hermione sonrió al adolescente.

"Lo descubrirás más tarde, hogsmeade este fin de semana debería ser divertido". Harry cambió el tema pero Hermione solo rodó los ojos.

"Solo quiero dormir, ¿son los búhos?" Hermione miró a su alrededor cuando los escuchó.

Por saber la mayoría de los estudiantes donde desayunar. La única casa con todos sus estudiantes allí era Ravenclaw, la mayoría con libros abiertos sobre la mesa.

Luna se volvió para señalar a un búho, "esos para ti".

Eva frunció el ceño al igual que Hermione, pero la lechuza aterrizó frente a Harry y sacó una pierna.

"No sabría si son buenas noticias, ¿verdad?" Harry lo tomó y miró a Luna.

"Te gustará." Luna sonrió con una taza de café.

"No puedes saber eso". Hermione dijo, mientras Harry leía la carta.

Eva le dio un codazo a Hermione y ambos se volvieron para mirar a Harry, cuya sonrisa creció mientras leía. La carta era corta y cuando terminó, Harry se veía mareado. Abrazó a Luna y corrió a buscar al remitente.

"¿Qué fue eso?" Eva preguntó.

"Le preguntaron en una cita, él va a decir que sí". Luna sonrió feliz, contenta de que Dumbledore no hubiera aparecido en el desayuno.

"¿Por quién?" Hermione se inclinó hacia adelante.

"Alguien." Luna sonrió.

Hermione puso los ojos en blanco pero cambiaron de tema. Luna notó que Tom no estaba presente también.