¿El elegido?

¿El elegido?- 43

Tom seguía despertando en el medio de la noche. Tal vez fue la idea de que encontraría a Harry mirando inexpresivamente otra vez o tal vez tenía miedo de que Harry desapareciera.

De cualquier manera, el insomnio que lo había plagado desde la infancia estaba volviendo a allanar lentamente.

Harry aún no había dibujado nada, cada vez que cerraba los ojos se sentía como si estuviera de vuelta en ese armario. Harry sabía lógicamente que debería hablar y buscar ayuda, pero eso fue más fácil decirlo que hacerlo. Cada vez que intentaba hablar sentía que se estaba sofocando, pero tenía un deseo abrumador de decirle a alguien.

El dibujo ayudó, fue como decirle a alguien pero sin hablar. Harry podía decirle a su hermana y Hermione quería ver, pero la idea lo asustó. Tom lo sabía, así que era más fácil hacerle saber, pero aún así lo asustaba. Siempre lo asustaría.

Harry no sabía cómo eran los demás, no parecía poder enfocarse. Pequeñas cosas parecían llevarlo de vuelta a tiempos en los que no podía controlar a los Dursley. Era como los años que había pasado haciendo que los mecanismos de defensa y enterrar el abuso fueran arrastrados por un solo hechizo.

Harry sintió que se estaba muriendo lentamente.