capitulo 8

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El silencio era demasiado incómodo así que decidí romperlo

-¿dije algo malo?

-no, es solo que nunca pensé verte así azul, dijo Carvajal mientras se acercaba a mi

-no le hagas nada a el, dije mientras sentía un nudo en mi garganta, si decía una sola palabra mas rompería en llanto

-tranquila nadie lo tocara, lo prometo

Carvajal me abrazo y en ese instante supe que me decía la verdad

-¿como te pagare este favor? Pregunte

-mata a el jefe de tu novio y llega con su cabeza esta misma noche

-de inmediato, dije con emoción

Me puse ropa cómoda, y salí ya habían 100 hombres esperando mis indicaciones, decidí enviar 30 que entraran por atrás, 30 francotiradores ubicados en todo el perímetro y 40 que entrarían a mi lado por la puerta principal

No tardamos mucho en llegar a el lugar, nos distribuimos, ya solo faltaba que diera la orden de atacar, calculaba que debían haber unos 70 hombres o al menos eso dijo David

Di la señal y en cuestión de segundos se escucharon tiros que procedían de todas partes, doy de nuevo la señal y uno de mis hombres tira la puerta permitiéndonos entrar, no tuve que esperar mucho para comenzar a disparar contra todo aquello que se moviera, mate 5 que venían bajando las escalas, al estar arriba empiezo a abrir cada pieza y matar a todos los que estuvieran allí, terminado el segundo piso decido bajar encontrando toda una masacre, algunos de mis hombre tenían heridas poco letales así que no me preocupe, camino hasta la sala y me encuentro con el jefe

-¿pero que esta pasando aquí? Pregunto enojado

-llego tu hora de morir, le respondí con una macabra sonrisa -¡llévenlo a mi bodega! Grito y de inmediato obedecen

Salimos de la hacienda y nos dirigimos a mi bodega, estando allí decidió interrogarlo

-creo que te he visto antes, dice el mientras me repara de pies a cabeza

-lo dudo mucho, pero bueno como toda una niña bien educada me presentaré

-¿estas segura?

-mucho gusto soy azul, dije ignorando su pregunta

-¿que te he hecho para que me tengas aquí?

-que mal educado, pero ya que igual morirás, y respondiendo a tu pregunta pues veras te metiste en mi terreno, dije tomando unas pinzas

-¿para quien trabajas?

-que poco inteligente eres dije riendo -trabajo para Carvajal ¿nunca has escuchado sobre mi?

-¿azul? No, la verdad es la primera vez que lo escucho

-la hija del diablo, ¿ese te suena?

Aquel hombre abrió la boca y los ojos como platos, al parecer ya sabia quien era yo

-¿como no me di cuenta? Eres la hija de puta que pica los cuerpos en pedacitos, es mas se rumora que pactaste con el diablo

-vaya que bien informado estas, ahora ya sabes lo que te sucedera

Corte sus extremidades, arranque su cuero cabelludo, corte por todas partes, el dolor debió haber sido algo insoportable, cuando estaba casi muerto saque sus entrañas, las partes grandes como las piernas las tuve que cortar con una motosierra, al terminar el trabajo me encargue personalmente de enterrar los pedazos en distintas partes, ya casi terminaba la noche así que decidí ir a casa

Al llegar me encuentro con un Carvajal muy alegre, pero al verme su expresión cambio, y no lo culpo pues tenia sangre de pies a cabeza, y para completar tenia una cabeza sin cabello que debió horrotizarlo demasiado

-aquí esta lo que me pediste, dije alzando la cabeza despellejada

-azul, ¿que te sucedió? Pregunto el asustado

-puede que me halla dejado llevar un poco, pero estoy bien

-felicitaciones, pero ya sube a cambiarte que verte así me produce náuseas

Subí a mi cuarto me bañe y luego bote la ropa ensangrentada que llevaba puesta, lo primero que hice antes de ir a dormir fue escribirle a David

Hola

¿como estas?

Súper bien ¿y tu?

Algo pensativo

¿que tienes amor?

Me contaron algo
sobre ti

¿que te contaron?
¿quien te lo contó?

Ven a mi casa mañana
te contaré todo mejor,
adiós, que descanses

Asesina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora