Capitulo 22

5 1 0
                                    

Maneje hasta llegar a casa de mi mejor y única amiga, ella abrió la puerta y sin preguntar me lance a sus brazos, estaba destruida esta no preguntó nada y solo me abrazo muy fuerte, al paso de unos minutos cuando ya estaba un poco más calmada nos sentamos en la sala

- a ver te escucho, dijo mi amiga cruzando las piernas

- David, respondí sin poder mirarla

Le conté todo lo sucedido, esta solo me miraba intrigada con la concentración de alguien que lee su novela favorita, al terminar de hablar ya no tenía más lágrimas que derramar mi mente quedó en blanco

-Azul, ¿de verdad lo amas? Pregunto con total calma

-Amar creo que eso es poco a lo que realmente siento por el, no te diré que es el amor de mi vida ni tampoco que sin el moriré por que se que no es así, pero si algo le sucede si llegamos a terminar con el se irá parte de mi vida y yo tendré que andar en esta vida incompleta

El silencio reino, mostré una parte de mi que ni yo conocía, pero ¿que podía hacer? Este hombre desordenaba mis pensamientos aceleraba mi corazón me hacia actuar de otra manera una que hasta a mi me llegaba a asombrar

-entonces ¿es tu medio limón?, dijo mi amiga rompiendo el silencio

-no, respondí mirando por la ventana - nací completa, el solo ha venido a desordenar mi vida, osea escucha todo lo que estoy diciendo esta no soy yo

- si eres tu, solamente no eres la desalmada sanguinaria, te estás comportando como una chica normal, por primera vez te escucho hablar como una persona no como un robot, estás expresando lo que sientes antes no sentías nada, el te cambio azul

- no hables tan fuerte, si te escuchan soy mujer muerta, dije para evadir el tema

Salí de casa de mi amiga, ya me sentía bien o bueno eso quería creerme, al llegar a mi casa solo fui hasta mi habitación y solo me tire en mi cama a llorar hasta que me dormí

-¡azul! Grito cristhian

-¡que quieres! Grite con notable enfado

- te están buscando

- dile que no estoy, no quiero hablar con nadie, dije poniendo la almohada en mi cara

No resibi respuesta, solo escuche el sonido de la puerta al abrirse, rápidamente tome la navaja de la mesa de noche y me prepare a atacar a el desconocido, en la oscuridad de mi cuarto pude reconocerlo se trataba de David

-¿que quieres? Dije dándole la espalda

-perdóname

Pasaron un par de minutos en silencio, hasta que sentí sus brazos a mi alrededor, sus lágrimas empaparon mi espalda, y también empecé a llorar ¿por que no podía odiarlo? El me había traicionado me había fallado pero yo no podía dejar de amarlo.

Las cosas terminaron bien ese día, hasta que llegó la noche, carvajal me cito en la sala, al llegar ya todos estaban allí, sus miradas delataban lo preocupados que estaban, yo no entendia nada

Al llegar al centro de la sala me encontré con la peor escoria del mundo...

-¿que esta haciendo ese maldito aquí? Pregunte con total calma

- tranquila muñeca vengo en son de paz, respondió como si nada

-azul, hablo carvajal - siéntate, la noticia que te daré no te va a agradar

Hice casi omiso a lo que me decía, no me senté, me quedé de pie esperando a que soltara esa noticia

-la familia londoño trabajará con nosotros hasta destruir a un enemigo en común, luego de eso puedes volver a ese juego macabro que ustedes tienen

-¡ni loca! Grite con total enfado - jamás trabajaré con el

-¡¿acaso crees que yo quiero trabajar con una niñita mimada como tu?! Respondió londoño a la defensiva

-¡ya basta los dos! Grito carvajal irritado por nuestro comportamiento

Todos miraban asombrados no se sabía que podía suceder, ese hombre y yo en el mismo lugar solo traería caos y destrucción, pero no tenía más opción, tenía que adaptarme a la situación y escuchar las razones por las cuales íbamos a trabajar juntos

En la pantalla plana empezaron a pasar fotografías haciendo que la tensión disminuyera un poco, habían muchos hombres ninguno se me hacía familiar bueno solo algunos que tenían una X de color rojo

-¿que vamos hacer? Pregunte

-no te impacientes, ya pronto tendrás la respuesta a todas tus dudas, respondió una voz a mi espalda

Asesina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora