A cosmic child. «Yoonmin» [EDITANDO]

VII. Cantándole a la Luna🌙

“Tus ojos buscan la misma libertad que yo”

[Años antes]

Min Hye había sido la flamante esposa trofeo de un tipo sencillo. Min Taeyang era un hombre que se había hecho de abajo; forjado con los valores que le había administrado su madre cálidamente durante toda su niñez. A pesar de estar completamente enamorado de Hye, por dentro llevaba un espíritu salvaje e indomable. Amaba la vida sencilla que llevaba de lustrador de zapatos, de mirar las estrellas del cielo. Estar enamorado de Hye lo había metido en una cárcel invisible con barrotes inoxidables.

Pasó de bailar en las calles de Daegu a gastar todo su dinero en una pequeña casa, porque Hye quería echar raíces; dejar herederos. Tener una familia grande y prospera.

Nunca notó el terror en los ojos de Taeyang.

La libertad tenía su lugar designado desde mucho más antes que Hye llegara con sus ojos felinos a engatusarlo en aquella tan contradictoria falacia amorosa. Por eso, cuando Hye quedó embarazada, presa del miedo y sin tener ánimos de estar de esclavo de familia, decidió huir dejando a Hye con una carta que no decía porque se iba ni a donde y con el dinero que había ganado en la última semana lustrando zapatos.

Con seis meses de embarazo, Hye no tuvo tiempo de llorar la partida de aquel hombre que amó más que nadie y que se convirtió en el primero en romperle el corazón. Volvió a casa de sus padres y con el dinero que ganó veniendo la casa que un día iba a ser para criar hijos, se compró una máquina de escribir.

Y fue cuando la Hye enamoradiza murió. Y nació la escritora soberbia que tiempo después, se hizo acreedora de una cantidad inimaginable de fans, dinero y popularidad.

Min Yoongi nació el día que finalizaba su primer libro, al que llamó Las controversias del amor  inspirado en ese romance que no pudo ser.

A Yoongi lo criaron sus abuelos.

Y creció toda su vida viendo a su mamá entre papeles y la máquina de escribir porque odiaba la tecnología. Decía que aquello la desconcertaba; que encontraba mucho mas practico e íntimo una máquina de escribir. O quizás, sencillamente se deba al primer libro que escribió en ella, gracias a este, se hizo la escritora tan famosamente reconocida en toda Corea y parte del mundo.

Cuando Yoongi aprendió a leer a la edad de seis años, Las controversias del amor  fue el primer libro que acabó y por el que supo cosas de su padre que su madre nunca hablaba. Lo describía como alguien salvaje e indomable, amante de la noche nocturna, la música callejera y los placeres sencillos; cobarde del compromiso, casado sin saber con el libertinaje.

A Yoongi le atrajo ese mundo. O quizás sea por la poca atención que le daba su madre. Al crecer, se armó de valor para presentarle el primer libro que había escrito; algo sencillo sobre un niño que soñaba con grandes cosas y hacia lo imposible para cumplirlo.

Su madre había cogido el libro con desdén, le dió un par de hojeadas. Tanta fama le había corroído las buenas actitudes. Era soberbia, seria. Nunca se sabía si estaba feliz o triste. Era un tempano de hielo que no se ablandaba ni con su único hijo.

La trama es predecible, no tienes ingenio ¿A esto le llamas una historia? El final está escrito en la primer página ¡Definitivamente heredaste esto de tu padre! El se la daba de poeta y no sabía nada.

Yoongi tenía doce, pero mientras recogía el libro que su madre había botado a la basura, se propuso algo; le demostraría que a él, el talento le sobraba.

— 🌟 —

[Tiempo actual]

— ¿Es tu primera vez en Daegu? -preguntó Yoongi, harto del silencio.