Quedan 3 días, ¡3 Días! Para el viaje a Londres y no puedo dejar de pensar en eso, iba caminando por los pasillos de la Universidad, tranquila sin molestar a nadie, hasta que un horrendo chillido en mi oreja me sobresaltó.
-¡Browning!
-¡Rewecca! – Digo fingiendo una sonrisa – ¿Donde están tus amiperras?, perdón digo tus amigas.
-Pero que boquita tienes eh, no sé cómo te criaron tus padres.
-No hablemos de educación aquí vaca.
-Hmm bien contigo no hay remedio mujer… en fin, leí en tu twitter que iras a Londres… ¿Por qué mientes? El dinero no te alcanza ni para caerte muerta querida – Ríe, mientras me mira de manera “autoritaria” y desafiante.
-Eso tú no lo sabes, ahora aléjate de mí y deja de mirarme de esa manera si no quieres que te agarre de tus horrendas extensiones y arrastre por el pasillo.
-A mi tus amenazas no me asustan Ariel, supéralo.
-Solo te digo que no juegues con fuego porque te quemaras rubia mal teñida – giré sobre mis talones dejando a una Rebecca molesta, quien hizo lo mismo que yo, pero de lado puesto, haciendo rechinar sus tacones por todo el pasillo.
Por mucho que odie a Rebecca no dejaría que arruine mi felicidad, es decir ¡3dias!, llame a Alice y Jody, y ambas tienen sus maletas listas, contrario a mí, tal vez podría saltarme esta clase, nadie lo notará, y bueno tan importante no es.
Con mis audífonos puestos, impongo todo el ritmo y sabrosura por las calles de la cuidad, ¿me envidian cierto? Naaa mentira, lo único que impongo es ternura… si claro, estoy en la universidad y le gente piensa que estoy en primaria.
No sé exactamente que llevar, seguramente Alice no tiene nada que hacer, podrá venir a casa y ayudarme… o tal vez no. La vibración de mi celular me saca de mi mundo.
-Hey Ariel ¿Cómo estás?
-Bien…gracias ¿Quién es?
-¡Maldita! ¡No me reconoces, soy Jody! – Carcajea desde el otro lado de la línea.
-¿Qué le paso a tu voz?
-Estoy ronca, solo eso, ¿estás ocupada?
-No, me salte una clases ¿quieres ir a mi casa? Yo voy de camino y necesito ayuda de alguien.
-Bien iré, nos vemos en un rato.
-¿Enserio es todo lo piensas llevar? ¿Esta es tu idea de “voy a brillar por las calles de Londres”?, me sorprendes, deberías seguir al pie de la letra la oración, si dices brillar, pues brilla, ¡pero no con esto!, ¡es Londres! No puedes llevar cualquier cosa, muévete yo revisaré tu armario y elegiré algunas prendas – Jody es fanática de la moda, de la apariencia y todo lo que involucre estilo, yo por otro lado no me preocupo mucho de esos detalles a no ser que deba salir a un escenario, siempre visto con buzos, ropa deportiva, son mis prendas favoritas – Ah y llevaré un par de vestidos, zapatos altos, por supuesto mi maquillaje y tam... ¡Oh por Dios! ¡¿De dónde sacaste este vestido?! – Un vestido negro semi-campana, sin mangas, muy ajustado a la cintura y ligeramente corto, pero dejando para la imaginación algunas cosas, nunca antes lo usado, creo que muestra demasiado, no es mi estilo.
-Me lo regaló mi hermana en navidad ¿Por qué?, es decir, sé que es algo provocador, por eso no lo uso pero no esta tan mal – Hice una mueca, pues Jody no borraba su cara de asombro en su rostro, debe pensar que soy alguna especia de zorra encubierto.
