My Little Pony: Fricciones entre 2 mundos.

Capítulo 7: Procesamientos.

A la mañana siguiente.

Ha pasado un dia desde que toda esta inestable y algo turbulenta situación con Daniel comenzara, pero ahora eso quedo atrás o al menos se está intentando quedar atrás a petición del Mapa Cutie, el cual como ya sabemos, le encomendó a todo el pueblo de Ponyville mostrarle a Daniel la magia de la amistad, en este último aspecto Twilight y Rainbow ya daban por hecho y esto les fue confirmado por el mismo Daniel, que ahora son amigas de este joven adulto humano que llego a su colorido y mágico mundo hace ya casi una semana, y tras haber visto ayer con él en el Everfree que en el fondo solo es alguien herido que quiere evitar seguir sufriendo y seguramente en parte por eso es frio y sumamente severo, están más que decididas al igual como seguramente creen que estarán el resto de sus amigas, de ayudarlo de cualquier manera, si Discord y Starlight pudieron cambiar para mejor el sin lugar a dudas no será la excepción, aunque están conscientes que no será tan fácil como ocurrió con ellos pues ellos no se parecen en nada a Daniel.

En estos momentos, Spike se encuentra caminando por las calles de Ponyville, sin la compañía de Twilight, Daniel, Starlight, las Crusaders o algún otro de sus amigos.

"Uff, muy bien Spike; recuerda, se fuerte, respira hondo y no te acobardes, como tú mismo le dijiste a Twilight es hora de que Rarity al fin sepa lo que sientes por ella, tú y ella han estado conociéndose por años así que es ahora o nunca, además podrías perderla ante alguien más que le guste si sigues retrasándolo, tu puedes hacerlo".-Pensó Spike como si estuviera hablando consigo mismo dentro de su cabeza y yendo en dirección a la boutique de la unicornio, tal y como vimos, el finalmente está decidido a decirle a Rarity sobre sus verdaderos sentimientos hacia ella, a decir verdad él tenía pensado decirle hace 2 días, pero decidió postergarlo pues se enteró que ella fue testigo de lo Daniel había hecho con ese otro grupo de humanos que llego a Ponyville, y supuso que lo más seguro es que ella también necesitaría tiempo para procesar y asimilar todo lo que sucedió con respecto a eso y fue una decisión muy sabia de su parte.

Todo el camino hacia la boutique estuvo preparándose mentalmente para lo que está por pasar ya que este seguramente será uno de los momentos más importantes de su vida, pues dependiendo lo que ocurra, el podrá seguir por un determinado camino en compañía de ese alguien especial para él o no, el hizo un trabajo de lo más magnifico y soberbio en cuanto a lo anterior, pues en ni un solo momento ni siquiera por una milésima de segundo le paso por la cabeza algo pensamiento negativo o pesimista en cuanto a lo que está por hacer, que le dijera que no, que la reacción de ella fuera peor de lo que se podría esperar, nada, es como si tuviera alguna especie de barrera impenetrable dentro de su cabeza que solo dejaba pasar los mejores pensamientos y dejaba afuera a los peores.

Finalmente, tras unos pocos minutos, comenzó finalmente a acercarse a Boutique Ponyville, sintiéndose o al menos creyendo sentirse listo para lo que está por venir como siempre ocurre con el futuro, lo que está por pasar es totalmente incierto y podría pasar lo que fuera pero como dije antes, Spike no está pensando en ello. Ahora se encuentra justo delante de la puerta de la boutique, lo único materialmente físico que la separa de ella, con un rostro determinado, serio y decidido sobre su rostro el cual se había reforzado por sus garras cerradas en puños, en un intento físico de mantenerse firme y con la cabeza en alto para confesársele, pero entonces cuando se percató de que el siguiente paso en caso de que siquiera dispuesto en seguir adelante era tocar o abrir la puerta del establecimiento de Rarity, esta confianza y determinación suyas acabaron por el suelo como un castillo de naipes lo cual se vio reflejado en la expresión de angustia, temor, duda y nerviosismo que formo sobre su cara, así como el hecho de que abriera sus garras y estas dejaran ya de ser puños, y sin borrar esa expresión de su cara comenzó a acercar lentamente su garra izquierda hacia la puerta, con esta temblando como la gelatina y sudando pero entonces; antes de que su garra hiciera contacto alguno con la puerta retrajo su garra con una velocidad sorprende y se abofeteo a si mismo con ella sin demasiada fuerza para auto-controlarse, tuviendo suerte a la vez de no haberse dejado una marca de zarpazo en la mejilla.