Lo que paso por mi imprudencia.

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Por fin es viernes pensé, pero nunca imaginé lo que ese días pasaría.

Luego de la rutina ya conocida para llegar a la escuela, entré al salón, escuché cuchicheos, no se de que estarían chismeando, así que mi curiosidad pudo más, me acerqué al grupitos de amigos del salón y se quedaron callados.

Ya me había dado una idea de lo que hablaban: el mensaje de Matías y yo.

Tocaron para entrar a la primera clase, Lea llegó tarde y ya sabía todos los chismes.

Terminó la primera y la segunda hora, Lea estaba muy extraña, tenía que contarle lo del departamento, los mensajes y el acercamiento de Bastian.

En el receso Lea estaba muy distante, todo el día estaba muy distante, cuando terminaron las clases, me fui a casa sólo, Lea me había esquivado eso era muy mala señal.

Llegue a casa y cerré la puerta, di unos pasos y tocaron el timbre.

Abrí era Lea, estaba sucia, arañada y sudaba ¿qué podría haber hecho mi bicho raro en menos de 7 minutos para estar así?

Pasó, no sabía que decir.

-¿Qué te paso bicho raro? – Dije soprendido.

- Me debes dos cosas animal- Tono fatigado.

-¿Te debo?- Mi pregunta era más que evidente desconocía a lo que se refería.

- Me debes la explicación de Cipriano y los mensajes de Matías.

(Me quedé congelado al escuchar “Matías”), ¿Qué había hecho Lea?

-Bueno te contaré todo, pero primero tú, ¿Qué rayos te paso?

-Adivina. . . me peleé con la zorra de Matías y sus amiguitas de mierda.

¡¿QUÉ RAYOS HABÍA DICHO?! (Aunque Matías es homosexual no es nada afeminado, de hecho tiene un cuerpo como de gimnasta, si como de pero no la verdad parece un palo)

-¡¿Pero por qué?!

-¿Por mí?

-Después de que te fuiste sin mí, me quedé en el patio y escuché a Matías diciendo que eras una perra prostituta porque te habías metido con su novio y que se lo habías negado en mensajes de voz. . .  Me enfurecí tanto que terminamos en el suelo, lo deje peor que yo, y sus amiguitas ni siquiera se acercaron. Y ahora sí me vas a contar todo. Lea estaba hecha una furia.

La abracé, Lea no era sólo mi mejor amiga, era mi hermana.

-Lea no tenía que hacerlo, tu sabes que no es cierto.

-Lo sé, pero es que me enfurecí tanto, ahora veremos si vuelven hablar mal de ti.

Aunque estoy en contra de la barbarie, esta vez me sentí agradecido por ello. Aunque no debía.

Le expliqué todo a Lea, desde Cipriano, los zapatos llenos de mierda, la moto, el departamento, el telescopio, la mano de Bastian con la mía, la playera mojada y el acercamiento de Bastian y de cómo le había respondido, Lea no sabía que cara poner, y reserve lo mejor para el final, los mensajes de Matías y mi respuesta.

-Definitivamente tienes un hígado grande  para responderle a ese.

-Ni que lo digas, pero que dirán ahora de ti Lea, que eres una agresiva.

-Bueno no te preocupes, yo sólo le di al final, alguien comenzó por mi.

-¿Quién?

-El nuevo novio de Ángel, el ex de Matías.

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⏰ Última actualización: Jul 16, 2014 ⏰

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