Like you. Harry Styles. [EN EDICIÓN]

12

Harry.

Ni siquiera sabía que pasaba por mi cabeza cuando intentaba en serio con Abigail. Mentiría jodidamente si me hiciera creer a mi mismo que no la quería en mi cama pero ¡Mierda! Esa jodida chica tenía algo que llamaba toda mi atención de mierda.

No había evitado hace contacto visual con ella. Yo no tenía porque mierda esconderme. Su amiga… ¡Sam! Si, ese era su nombre, siempre me miraba esperado a que las saludara pero claramente eso era lo que Abigail menos quería y era que tampoco yo iba a inmutarme.

En los entrenamientos no podía dejar de mirarla. La forma en que su falda se levantaba entre movimientos me permitía ver mas allá de sus piernas bronceadas y bien trabajadas mientras la forma en coleta en la que llevaba su cabello se movía al ritmo de sus caderas. Tenía que admitirlo, estaba jodidamente buena.

—Vamos, Harry. —Zayn habla a mi lado frente a los espejos de los vestidores.

— ¿No vas a ir por Rebecca? —le pregunto.

—No. —niega—. Hemos terminado las cosas esta mañana.

—Pero si eran la parejita perfecta del año. —me burlo.

—No jodas. —Me fulmina con la mirada—. Y apresúrate, tengo que arreglar todo para esta noche.

— ¿Crees que vaya? —frunzo mis labios en un puchero mirándole fijamente para luego soltar una fuerte carcajada.

—Al menos tuve a Becca y me la folle insaciablemente. —sonríe—. Lastima para ti que Abbie no quiera ni darte la hora. —se burla. Presiono mis labios en línea recta.

—La diferencia es que yo no estoy enamorado de Abigail. —me burlo yo ahora.

—Y ni siquiera has logrado que ella se interese en ti. —sonríe enarcando una ceja.

—Vete a la mierda. —escupo. El suelta una carcajada.

Le fulmino con la mirada antes de apoyar mi brazo en la puerta y empujarla con fuerza saliendo de los malditos vestidores. En la puerta siguiente esta Rebecca con su equipo de animadoras buenas, dándoles algunas instrucciones.

—Deben traer listones azul y amarillo en sus coletas altas. —Dice señalando su cabello—. Asegúrense de que estén fuertes, no queremos que si llueve se estropeen. —se encoge de hombros.

Kate quien había estado fastidiándome toda la semana frunce sus labios en una mueca y se cruza de brazos mirando fijamente a Rebecca. Sonrío acercándome.

—Disculpa la interrupción, Rebecca. —Todos los pares de ojos son puestos en mí—. Kate, ¿Vas a venir esta noche a casa de Zayn?

—Sí. —asiente emocionada.

—De acuerdo, nena. —sonrío—. Pasare por ti a las 10. —le guiño un ojo.

Me dirijo a Rebecca quien me mira con el ceño fruncido y entrecerrando sus ojos débilmente. Me encojo de hombro y poso mis ojos por un minuto en los de Abigail para volver a los de Rebecca.

— ¿Vienes esta noche, Rebecca? —pregunto.

Ella abre la boca pare decir algo pero pronto la cierra mirando sobre su hombro a Abigail quien se encoje de hombros asintiendo sin problema.

—Sí. —asiente frunciendo sus labios. Sonrío.

—Debí suponerlo. —Asiento—. Y todas están invitadas a ir. —las señalo.

Con una sonrisa me despido y me alejo sabiendo que aún todas las miradas están puestas en mí. Entro a mi coche y rápidamente salgo de los estacionamientos.